La mañana siguiente fue tan extraña como el día anterior. Jake estaba tranquilo y distraído por algo, y cada vez que sus ojos lo encontraron, se puso notamente nervioso por algún motivo.
Mientras viajaban en silencio hacia el centro de entrenamientos, Sunghoon consideró brevemente presionar en el asunto, pero el dolor de cabeza palpitante en sus sienes le hizo muy difícil concentrarse. La falta de sueño de la noche anterior se manifestaba.
"¿Estás bien?" Jake dijo cuando llegaron y Sunghoon estacionó el automóvil.
"Sí," dijo Sunghoon, frotándose la frente. "Sólo con algo de dolor de cabeza. Debe irte, o vas a llegar tarde al entrenamiento."
Jake se inclinó y le dio un beso en la mejilla, sólo a una pulgada de sus labios. "Que te mejores," dijo suavemente y le besó la comisura de los labios antes de quedarse congelado, sus ojos verdes ampliados y desconcertados.
Sonrojándose, se deslizó fuera del coche y corrió hacia el edificio de entrenamientos.
Sunghoon se tocó la boca, viendo a Jake desaparecer en el edificio.
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El resto de la mañana estuvo ocupado para Sunghoon. Todavía estaban cortos de personal, y las lesiones no parecían tener fin. No quería criticar a Liz Boyle pero era cada vez más evidente que el trabajo, sobre la prevención de lesiones, había sido pobre mientras él había estado fuera.
Suspirando, Sunghoon se frotó las sienes cuando la puerta finalmente se cerró detrás de otro jugador lesionado más.
"¿Dolor de cabeza, Dr. Park?" dijo una voz suave.
Sunghoon levantó la vista. Se había olvidado por completo de la presencia del pasante en la habitación. Ojos marrón oscuro lo miraban con simpatía.
"Sólo una migraña, Maki," respondió.
Sonriendo, Maki se acercó.
"Déjeme ayudar. Me han dicho que doy unos masajes geniales."
"Adelante," Sunghoon dijo, pensando que no le haría daño. El tipo pronto sería fisioterapeuta, después de todo.
Cerró los ojos cuando los dedos de Maki comenzaron a tocarle la cara: primero aplicando presión sobre sus cejas, luego acariciando su cuero cabelludo suavemente antes de empezar a masajear bajo la parte posterior de su cráneo. Sunghoon hizo un sonido apreciativo cuando el dolor de cabeza retrocedió un poco.
"¿Mejor?" Maki le murmuró al oído, más cerca de lo que Sunghoon habría esperado.
"¿Qué están haciendo?"
Los párpados de Sunghoon se abrieron de golpe.
Jake estaba de pie en la puerta, mirándolos.
"El Dr. Park me pidió que le diera un masaje," Maki respondió. "Por su migraña."
"Puedes irte," dijo Jake. "Yo me encargo."
"Pero–"
"Vete," Jake dijo disfrutándolo.
Cuando Maki no se movió, Jake lo miró con una expresión severa.
"¿Tienes un problema de audición?"
"Maki, puedes irte," Sunghoon dijo lentamente, mirando a Jake.
Pero antes de que Maki pudiera salir, el teléfono sonó y Maki lo respondió.
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Easier | Sungjake
Fiction générale¿Por qué siempre tenemos que huir? Y terminamos en el mismo lugar, es como si estuviéramos buscando lo mismo. Cada vez que dices que te vas a ir, es ahí cuando consigues lo mejor de mí. Sabes que nos necesitamos como el aire que respiramos. Prólogo...
