VII.- Las sombras guardianas de Beacon Hills

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Stiles miró a la manada Hale de manera seria, todos estaban sentados comiendo de manera tranquila. Sus hermanos sonreían y charlaban con los demás, él en cambio se dedicaba a verlos a todos. Los Hale eran más transparentes de lo que pensaban, eso no era tan bueno, a su parecer. Para ser los guardianes del territorio confiaban mucho en los demás y se apoyaban demasiado en la magia de Stuart que estaba lejos de ser perfecta, después de todo aun tenía mucho que aprender para dominarla. Esa era un de las razones por las cuales los Argent habían podido infiltrarse tanto en todo el pueblo.

— ¿En qué tanto piensas? — le preguntó Derek sentándose a su lado.

— En tu manada. Son diferentes a las que había conocido, incluso a la mía.

— ¿En un buen sentido?

— Si...

— Algo me dice que no me estás diciendo la verdad. Puedes ser honesto conmigo, yo veo muchas fallas en la manada, pero a veces prefiero no decirlo. Mamá dice que puedo ser paranoico.

— Ser paranoico puede ser bueno, eso te hace estar alerta a cualquier amenaza.

— Es un buen punto. A mi parecer eres más de lo que muest5ras. Siento que escondes tu verdadera naturaleza, es extraño.

— Siempre hay que tener uno o más trucos bajo la manga. Pero tranquilo Hale, tu manada nunca será herida por mí o por lo míos.

— Hablas como un Alfa. — miró a su alrededor y se dio cuenta de que nadie los estaba escuchando, era como si ni siquiera pudieran escucharlos o entendieran de que hablaran.

— No soy un Alfa, ni siquiera soy un lobo.

— Actúas como uno. Eres muy diferente a Stu.

— Somos dos personas diferentes, lo único que tenemos igual es el rostro.

Derek negó con la cabeza.

— No eres Stuart, jamás lo serías. Tu eres Mieczyslaw Steiner, una personas completamente diferente. Lo sé.

Stiles sonrió y se levanto sin decir algo más.

*

Dean suspiró al ver a su hijo mayor entrar a casa, algo había pasado con los Hale, pero no sabía si era bueno o malo. Su Mica sabía ocultar sus sentimientos demasiado bien, pero él sabía que le pasaba algo, Deucalion siempre le decía que era su instinto "materno", aunque siempre terminaba en el suelo por un golpe.

— ¿Sucedió algo con su hermano? — le preguntó Dean los gemelos que se echaron al sofá soltando un suspiro de alivio. Les agradaban los Hale, pero estaban cansados de vigilar los alrededores.

— Habló con Derek un buen rato, creo que dijo algo que le gusto. Se veía... ¿feliz? ¿Satisfecho? No sabría identificar lo que sentía. — comentó Ethan en su hermano después de esa conversación.

— No me agrada. — dijo Aiden haciendo un puchero logrando que el otro bufara.

— Más bien eres un hermano celoso que sabe que el Hale esta detrás de los huesitos de Mica.

Dean rio levemente.

— ¿Y creen que él este interesando? — les preguntó el mayor con curiosidad. Era la segunda vez que su hijo mayor mostraba interés por alguien de manera romántica. La primera vez no había salido muy bien. así que esperaba que la mejor fuera mejor, aunque algo le decía que sería de esa manera.

— ¿Mica? — el mayor asintió — Tal vez... Hace tiempo no lo veía interesarse por alguien. — comentó Ethan restándole importancia al asunto, él solo quiere que su hermano sea feliz y pueda dejar ir un poco las cadenas que cargaba. Para él, Stiles merecía toda la felicidad del mundo, ya había sufrido bastante con todo lo que había pasado así que si obtenía parte de esa felicidad en ese pueblo él no se opondría ni se metería en su camino.

Dean acarició el cabello de sus cachorros y miró la oficina de su esposo donde había entrado Stiles.

*

— Son demasiado descuidados. Puede que Thalia ya no sea la Alfa de la manada, pero hay demasiados huecos en su seguridad. No me extraña que los Argent pudieran meterse tanto en el territorio. — suspiró mientras acomodaba unas cosas en su pizarra — Confían demasiado en la magia de Stuart y en sus habilidades. Creo que ni siquiera se han dado cuenta de eso... bueno hay alguien que se da cuenta, pero no hace nada para cambiarlo. La estructura de la manada esta un poco anticuada. — dijo Stiles mientras colocaba las fotografías de Derek y Laura Hale.

— ¿Por qué lo dices? — le preguntó Deucalion con cierta diversión. Sabía que su vieja amiga había descuidado un poco los términos y reglas que le había inculcado a sus hijos.

— Thalia le enseñó a Laura y Derek a ser Alfas con sus propios ideales, pero por lo que pude hablar con Derek él piensa de manera diferentes y ve los mismos huecos que yo dentro de su propia manada, pero no se esfuerza por cambiar nada. Es como si no quisiera alzar la voz. — bufó — Él también es un Alfa de la manada y tiene más voz que cualquiera, pero por alguna razón no se ve a sí mismo como alguien de rango diferente o con poder, no digo que los Alfas tengan más poder, pero ellos pueden ver muchas más cosas y deberían sentirse más libres de hablar al ver fallos en su propia manada.

Deucalion rio levemente. Ahora podía ver la frustración de su hijo.

— Los Hale son así. Thalia siempre ha impuesto respeto y Laura es la imagen y semejanza de ella, mientras que Derek se parece más a Peter. Ve las cosas de manera diferente, pero no creo que tenga la confianza para dar su opinión; apenas es un Alfa nuevo, no lleva mucho tiempo de serlo. — se sentó detrás de su escritorio — No creo que haya asimilado que tiene ese poder y autoridad... todavía.

— Tiene que aprender pronto. — suspiró — Son muy afortunados de que estemos aquí. — miró el tablero de ajedrez sobre la mesa de al lado suyo — ¿Los chicos se encargaron de lo que les pedí? — preguntó moviendo otra pieza.

— Lo hicieron y ahora tenemos cinco cazadores menos y dos bajo nuestra custodia.

— ¿Puedo interrogarlos?

— Te lo iba pedir, eres el mejor de todos.

Stiles sonrió de manera sombría mientras movía otra pieza.

— Todo esta saliendo perfecto. No tardaremos mucho en atrapar a una gata y luego al aclamado "Rey". Ni siquiera se darán cuenta de nuestros planes, no lo verán venir.

— ¿Pronto tendrás a Kate dónde quieres?

— Por supuesto. Es más tonta de lo que pensaba, pensé que su nueva naturaleza la ayudaría, pero esta tan centrada en crear Berserkers para vengarse de Derek que ni siquiera se da cuenta del peligro a su alrededor.

— Será una buena caza. — rio levemente — A este paso nos vamos a convertir en las sombra guardianas de este pueblo.

— ¿No es lo que ya somos? — le preguntó Stiles con cierta diversión. 

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