𝑩𝑶𝑹𝑵 𝑻𝑶 𝑫𝑰𝑬 |||
"El rey Viserys I Targaryen sabía que la rivalidad entre su familia debía terminar, por lo que después de que sus nietos le sacarán el ojo a su hijo en un conflicto en Driftmark, decidió que era hora de ponerle fin a todo...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
120 DESPUES DE LA CONQUISTA,
DRIFTMARK.
Daenys simplemente miraba a su alrededor con aburrimiento, mientras usaba un vestido negro con una túnica verde oscura con algunos bordados dorados sobre sus hombros. La hija primogénita de lord Corlys Velaryon había muerto, y la familia real había tenido que viajar a Driftmark para asistir al funeral. La joven princesa observo como el sarcófago de su prima, lady Laena Velaryon, era lanzado al mar, como era tradición en la Casa Velaryon cuando un miembro fallece.
Los presentes permanecen callados, mientras uno por uno se van retirando al lugar donde se llevara a cabo el banquete funerario. La niña de cabellos platinados siguió a su progenitora, sin despejarse ni un segundo de ella. La reina Alicent simplemente acariciaba los cabellos de su hija menor, mientras su mirada vagaba por las personas presentes, aunque después desvió su mirada a su hijastra, mirándola con ojos juzgadores. Le parecía una ofensa para la Casa Velaryon que haya tenido tres bastardos, y que lo negara. La mujer regreso su vista a su hija, para después hablar.
-Deberías ir a buscar a Helaena... -Musito la mayor, recibiendo un asentimiento por parte de la niña. La cual se alejo, en busca de su hermana mayor. Sonrió al encontrarla en una de las carpas, sentada en el suelo, con una pequeña araña entre sus manos, murmurando cosas. Daenys se coloco junto a sus hermanos; Aegon, Aemond y Daeron, quienes observaban a Helaena.
-Las manos son un telar... Un carrete verde, un carrete negro... -Musitaba la princesa, mientras la araña camina en el dorso de su mano. Ignoraba las miradas de los demás, pues muchos la consideraban una loca-. Dragones de piel tejiendo dragones de hilo...
-Solo mírenla, es una loca... -Menciono Aegon, sosteniendo una copa de vino en su mano. Aemond lo fulmino con la mirada, aunque el mayor lo ignoro, continuando burlándose de su hermana-. Murmurando cosas sin sentido y con sus patéticos insectos, no tenemos nada en común...
-Es nuestra hermana... -Espeto Daenys, cruzando sus brazos contra su pecho. Si pudiera elegir entre todos sus hermanos, siempre elegiría a su adorada hermana Helaena, ella era tan pura y la admiraba totalmente. Aegon bufo, para después dar un trago de su copa, bebiendo del liquido carmesí, para después seguir a una de las criadas, en busca de mas copas. Aemond lo miro con desagrado, para después regresar su mirada a Helaena, quien continuaba murmurando cosas.
Minutos después, una gran sombra cubrió el sol, provocando que los presentes levantaran la mirada, observando la imponente figura del dragón Vhagar, que había estado sobrevolando el lugar toda la tarde, la mas grande en el mundo y que participo en la guerra de la conquista. La vieja dragona había pertenecido a lady Laena, pero tras su muerte, la criatura se quedo sin jinete. El príncipe Aemond observo al dragón con ojos de admiración, pensando que tal vez esta sería su oportunidad para finalmente ser un jinete de dragón, como los demás miembros de su familia.
