Star Wars: The Big Hunger

Capítulo 9

En un planeta al borde de la destrucción por otro ataque tiranido los pocos soldados vivos ya estaban aceptando su destino en ser devorados por aquellas bestias de otra galaxia pero entre el grupo de soldados se encontraba una bruja de Dathomir quien se negaba a morir pues era innegable que se aferraba a la vida y ella al menos quería morir de una manera pacífica y no siendo comida viva por aquellos monstruos, sus pensamientos estaban siendo inundados por el hecho de una muerte pacífica y también de que su magia fuera lo suficientemente poderosa como para matar a esas cosas y entre su mar de pensamientos unas voces se hacían presentes diciéndole que se podía salvar, la bruja estaba en un inicio confundida por las voces pero al oír esas palabras de ser salvada simplemente diría casi sin pensarlo qué aceptaba pero a cambio debía dar las bendiciones al Padre de la Plaga por lo que al momento de aceptar esta empezó a enfermarse gravemente donde vomitaria sangre con bilis y parte de su carne comenzaba a pudrirse a la vez que el olor se hacía insoportable y el olor a putrefacción llegaría a los soldados que estaban aún presentes y todos verían que a la bruja de Dathomir le pasaba algo pues en un inicio pensarían que algo tiranido pero nada de eso. Los soldados desconociendo todo lo que pasaba con aquella bruja dispararon pero por más disparos que le dieran nada le pasaba más allá de provocarle hoyos en el cuerpo que liberaban una peste sin igual haciendo que todos vomite, la bruja ahora vuelta una cultista de Nurgle abriría la boca para echar un gas tan nocivo que "mataría" a soldados donde a los pocos segundos de haber inundado la habitación con ese gas verdoso ellos se levantaron ahora todos siendo sirvientes de Nurgle.

Hermanos, el abuelo Nurgle nos ha salvado del dolor y de la muerte ahora debemos esparcir su bendición por todo el planeta. Ya no moriremos por esos monstruos pero ellos si van a morir, esparzan las enfermedades que este planeta se vuelta parte del jardín del abuelo Nurgle.

Con aquellas palabras los nuevos sirvientes de Nurgle empezaron a moverse donde usando sus gas mortales mataban a los pocos supervivientes que aún quedaban en el planeta y con cada muerte las plagas del Dios del Caos se esparcian rápidamente ofreciendo las almas a este dios tan malvado donde mientras las enfermedades cubrían a las personas un círculo que resultaba ser un pentagrama con el símbolo del Dios del Caos haciendo un rezo para que con todas almas sacrificadas un portal verdoso apareciera en aquel pentagrama donde lo primero en salir sería un monstruo gordo con una boca su estómago de la cual salían gusanos que saliendo de esa boca se volvían moscas de un gran y más seres deformes y verdes salían de ese portal para que al momento en el que los tiranidos derribaron la puerta los demonios del dios de la plaga atacarian, una nueva batalla comenzó para los tiranidos donde los tiranidos al no haberse esperado que los seres de la Vía Láctea estuvieran aquí sería una guerra aplastante donde los tiranidos morían con las enfermedades de Nurgle algo a lo que estos no se podían adaptar o resistir. Aquel planeta condenado a los tiranidos fue totalmente consumido por las enfermedades de uno de los dioses del caos y deseaban extender sus dominios aún más y sin la presencia del Imperio de la Humanidad no pararían.

Y nuevamente otro satélite y unos droides sonda grabaron toda la batalla antes de ser destruido por las garras de una gargola, aquella grabación dejó desconcertado a todo el Consejo Jedi junto con los sith y la madre de todas las brujas donde nadie era capaz de responder de que eran esas cosas y de donde salieron pues el droide solo fue capaz de grabar la batalla de los tiranidos contra los seres verdes que parecían ser muertos vivientes y no sabían si a estos seres los podían considerarlos aliados pues al ver sus habilidades era más que claro que mataban con gases venenosos y ácidos, Yoda el más viejo de todos los ahí presentes no entendía tampoco que eran esas cosas por lo que debía investigar a través de la meditación para saber que era lo que eran estos seres por lo que apagando las comunicaciones se iría a una recámara en solitario para tener la paz suficiente para poder meditar y que a través de la fuerza pueda resolver esa duda. Por otra parte en toda la galaxia la guerra tiranida comenzaba a ser más agresiva y todas las fábricas de clonación de Kamino fueron en su totalidad destruidas y comiéndose todo el planeta drenando los océanos a un nivel alarmante los pocos clones que consiguieron escapar con sus creadores se retiraron a Corusant para ver que podían ahora hacer los kaminoanos, mientras las fábricas de clones caían las fábricas de droides eran creadas y sin pensar en las consecuencias las fábricas estaban extrayendo todos los metales de los planetas cercanos.

A medida que la guerra iba avanzando las tropas se iban volviendo más agresivas para enfrentarse a los tiranidos ya que estos últimos con cada oleada sus tácticas no funcionaban dos veces y gracias a la ayuda indirecta de la mente colmena de los tiranidos las tropas de la galaxia usaban diferentes tácticas al mismo tiempo para abrumar a los ataques tiranidos y de esa forma evitar que se pueda anticipar al menos hasta que se pueda adaptar a cada batalla y el hecho de mejorar sus armas era más que necesario para esta guerra en la cual ningún bando tenía piedad, si uno atacaba fuerte el otro tenía que atacar con más fuerza. Para estos momentos de la guerra los jedis se vieron obligados a dejar de lado sus sables de luz y utilizar los rifles de plasma aunque no les gustaba era lo más práctico que ser partidos por la mitad por algún tiranido, en uno de los planetas donde otra batalla tiranida se estaba efectuando un tanque estaba apuntó de ser destruido con soldados adentro por un carnifex pero este sería elevado por el aire para que este sea partido por la mitad y seguidamente sus extremidades también serían partidas donde el tiranido dio un rugido el cual fue silenciado por un sable de luz verde atravesando la coraza del alienigena, la persona responsable se trataba de Ahsoka Tano quien recientemente fue integrada a la compañía de Anakin quien ya siendo este un adulto con experiencia lidiando con estas bestias a lo largo de su adolescencia y comienzos de su adultez.

Vaya nunca pensé estar frente a estas cosas, por la fuerza si que están feas y más de cerca

Comparto el sentimiento pero ahora debemos seguir moviendonos aún nos faltan más tiranidos que matar *diría el jedi quien por los años se volvió más un soldado pero aquel título de jedi dejó de importar cuando esta guerra comenzó Ahsoka quien seguía a su maestro a través de una ciudad destruida por la batalla que ha durado meses sin parar y ellos junto a varias tropas con tanques se dirigían a otro sector que era atacado por los alienígenas de otra galaxia

Oye Anakin puedo preguntarte algo

Dime Ahsoka

¿Como es que tú lidias con la pérdida de varias personas que han muerto en esta guerra?

Sencillo Ahsoka no te encariñes con las tropas de esa manera no te dolerá nada sus muertes

Enserió, eso me incluye *Anakin se quedó callado por eso que Ahsoka mencionó y este solo respondió que se muevan rápido que Obiwan no podrá aguantar por siempre, en unos minutos estaban cerca de la zona de combate ya que se oían las explosiones de los cañones y demás artillería pesada donde el comunicador de Anakin haría un ruido

Habla Anakin, si, ya veo enseguida

¿Que te dijeron?

Debemos detonar un puente pues el líder de esas cosas se acerca a nuestra posición y por lo que te dijeron ya sabes lo difícil que es matarlo sin que pierdas una parte del cuerpo *diría Anakin recordando que en una de sus batallas contra el Señor de la Horda perdió una pierna y la tuvieron que reemplazar con una prótesis robótica