Felix es un periodista conocido por destapar los secretos más oscuros del mundo del espectáculo y Hyunjin, el enigmático guitarrista de la banda más famosa del momento, es su nuevo objetivo.
Pero, ¿Qué ocurre cuando el cazador se enamora de su pres...
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Felix caminaba por los pasillos de la oficina, su paso algo más lento de lo habitual debido al cansancio acumulado. No era la mejor forma de empezar un domingo, pero no podía ignorar el mensaje que le habían enviado desde su trabajo, pidiéndole que asistiera a una reunión urgente.
Al menos, se repetía a sí mismo, no había tenido que cancelar su salida con Hyunjin... Hyunjin.
El solo pensamiento de su nombre hizo que Felix frunciera el ceño brevemente, sintiendo un ligero revoltijo en el estómago.
Después del mensaje que le había enviado anoche, las emociones habían estado un poco descontroladas.
¿Cómo debía lidiar con todo eso cuando su vida personal y profesional estaban chocando de forma tan repentina?
Respiró hondo antes de abrir la puerta de la sala de juntas. Todos ya estaban reunidos, esperando.
El pecoso entró con calma, manteniendo su compostura, y realizó una leve reverencia a todos los presentes como saludo.
"Buenos días" murmuró educadamente antes de ocupar una de las sillas libres al final de la mesa.
El ambiente en la sala era tenso, pero había cierta satisfacción flotando en el aire.
Sabía exactamente por qué lo habían llamado a esa reunión: su artículo bajo el nombre de Yongbok había explotado en las redes sociales apenas unas horas después de su publicación.
El escándalo de la solista que fue descubierta consumiendo drogas en un bar durante una fiesta de influencers había sido lo último en sacudir a la industria del entretenimiento, y Felix había estado en el centro de esa revelación.
Como periodista de investigación, había trabajado sigilosamente para obtener esa información, y aunque la solista en cuestión tenía una imagen impoluta, sus fuentes habían sido certeras.
Él fue quien consiguió las pruebas definitivas que aseguraron la credibilidad del artículo.
Ahora, las repercusiones estaban en marcha.
Domingo y aquí estoy, pensó mientras se acomodaba en la silla.
No debería estar trabajando hoy, su mente se quejaba en silencio.
Pero, claro, cosas así podían suceder en su línea de trabajo, y había aprendido a lidiar con el caos.
El jefe de redacción, un hombre de mediana edad con una mirada afilada, carraspeó para captar la atención de todos.
"Bien, creo que todos sabemos por qué estamos aquí. Yongbok..." comenzó, sus ojos clavándose en Felix, aunque no directamente. "excelente trabajo con la investigación de la solista, has puesto a la agencia en boca de todos, y el artículo está rompiendo récords de tráfico.
Felix asintió ligeramente, manteniendo su expresión seria. Sabía lo que significaba ese reconocimiento. En el fondo, esta clase de éxito siempre venía acompañada de complicaciones.
