Scream 7 Pip X Tara (Au)

7 - comienza la investigación

Martes
Pippa

Me senté en el borde de mi cama, mirando por la ventana. El sol se ponía, tiñendo el cielo de tonos cálidos, pero yo no podía disfrutarlo. Mi mente estaba en Ravi. Aunque ya no sentía lo mismo por él, había una conexión profunda que no podía ignorar.

Recordaba nuestras risas, las largas charlas y cómo siempre estaba ahí para mí. Sin embargo, en los últimos meses, la chispa se había apagado. Me preocupaba cómo se sentiría si le dijera que, aunque lo quiero mucho, mi corazón ya no late de la misma manera.

No quería lastimarlo. Cada vez que pensaba en eso, un nudo se formaba en mi estómago. Lo amaba como amigo, y la idea de perderlo me aterraba. Pero la verdad pesaba en mi pecho. Tal vez era hora de hablar, de ser honesta.

Con un suspiro, me levanté, decidida a enfrentar mis sentimientos y a proteger lo que quedaba de nuestra conexión. Tenía que encontrar las palabras correctas. Sabía que una conversación sincera podría salvar nuestra amistad.

Decidida, tomé mis cosas y salí hacia la casa de Ravi. La caminata me dio tiempo para pensar en cómo abordar la conversación, pero al llegar, mi corazón se hundió al ver que la puerta estaba entreabierta y no había señales de él en el interior.

Llamé varias veces, pero el silencio era abrumador. Comencé a preocuparme. ¿Dónde podría estar? ¿Estaría bien? La ansiedad me llenó, imaginando las peores situaciones. Caminé por la casa, comprobando si estaba en alguna habitación, pero todo estaba en calma.

En la cocina, noté un par de tazas de café aún sobre la mesa, como si acabara de dejarlas allí. Mi preocupación creció. Decidí enviarle un mensaje, preguntándole dónde estaba y si necesitaba algo. La espera fue tortuosa; cada segundo parecía un minuto.

Necesitaba hablar con él, pero también necesitaba saber que estaba a salvo.

(...)

Aquel mismo día, la preocupación por Ravi seguía dándome vueltas en la cabeza mientras caminaba hacia la universidad. Las clases pasaban, pero mi mente no podía concentrarse. Cada vez que miraba mi teléfono, esperaba un mensaje que me asegurara que estaba bien.

Al salir de la última clase, vi a Tara sentada en un banco, leyendo. Su rostro se iluminó al verme, pero yo apenas podía devolverle la sonrisa.

Tara:"¿Qué te pasa, Pip? Te veo distraída "

dijo, cerrando el libro y mirándome con curiosidad.

Suspiré, sintiendo que necesitaba soltar todo lo que me atormentaba. Me senté junto a ella y le conté sobre Ravi: lo preocupado que estaba por su ausencia, cómo me sentía culpable por no poder darle lo que necesitaba y el miedo a perderlo como amigo.

Pip:"A veces me pregunto si estoy siendo egoísta "

Pip:" Lo quiero tanto, pero ya no tengo esos sentimientos románticos. Me da miedo que eso lo lastime."

Tara me escuchó atentamente, asintiendo.

Tara:"Pip, no es egoísta querer ser honesta. Los sentimientos cambian, y eso no significa que dejes de quererlo. Lo más importante es su bienestar. Hablar con él puede ser lo mejor, aunque no sea fácil."

Con su apoyo, me sentí un poco más ligera. Después de un rato, decidí que no podía esperar más. Tenía que ir a buscar a Ravi.