El conejo y el lobo giyuutan <primera temporada>

5

Zenitsu se movía rápido a través del bosque, su pelaje amarillo se confundía con la luz tenue de la luna que se filtraba entre las ramas. Después de hablar con los padres de Tanjiro, el conejo había decidido salir a despejarse un poco. La información que había recopilado sobre Tanjiro lo había dejado más confundido que nunca. ¿Qué hacía Tanjiro tan cerca de la manada de lobos? ¿Acaso los lobos lo estaban cuidando? ¿O había algo más que no lograba entender?

Sin embargo, no quería precipitarse en sus conclusiones. A fin de cuentas, aún no conocía del todo la situación y no podía sacar conclusiones apresuradas.

Mientras seguía su camino, notó un par de ojos brillantes observándolo desde las sombras. Los latidos de su corazón se aceleraron. Zenitsu se congeló, sus orejas se alzaron en señal de alerta. Sabía que no era un lobo por la forma en que se movía... pero tampoco era un conejo. No había duda: era un depredador.

Antes de que pudiera reaccionar, una figura ágil y esbelta emergió del follaje. Se trataba de un zorro de pelaje blanco con destellos dorados en su cola y orejas. Sus ojos amatistas centelleaban con curiosidad y un toque de diversión mientras observaba al pequeño conejo. Sin embargo, lo que más sorprendió a Zenitsu fue que el zorro se transformó lentamente en un humano alto y elegante. El hombre frente a él tenía cabello blanco y dorado, y una sonrisa confiada que irradiaba carisma.

U🦊: "Bueno, bueno, ¿qué tenemos aquí? ¿Un conejo perdido en el bosque a estas horas de la noche?"

La voz del zorro resonaba con un tono seductor y juguetón. Uzui Tengen, un zorro conocido por ser tan peligroso como encantador, no pudo evitar sentirse intrigado por la pequeña criatura temblorosa que tenía frente a él. Zenitsu, a pesar de su miedo, no pudo evitar sentirse cautivado por la presencia imponente de Uzui.

Z🐰: "¡Ahh! ¡Lo-lo siento! No estaba haciendo nada malo... ¡solo estaba de paso, de verdad!"

Zenitsu retrocedió un poco, sus ojos grandes y temerosos observaban a Uzui con nerviosismo. Pero el zorro dio un par de pasos hacia él, inclinándose un poco para verlo más de cerca.

U🦊: "Relájate, pequeño. No muerdo... a menos que me lo pidan. Pero dime, ¿qué hace un conejito como tú solo en un bosque lleno de lobos? ¿No deberías estar con tu manada?"

Zenitsu tragó saliva, sin saber cómo responder. Había algo en la forma en que Uzui lo miraba que lo hacía sentir expuesto, como si pudiera ver a través de él.

Z🐰: "Estaba... estaba explorando. Mis padres querían saber más sobre el territorio de los lobos."

Uzui entrecerró los ojos, analizando la respuesta del conejo. Luego, se inclinó aún más cerca, lo suficiente como para que Zenitsu pudiera sentir su aliento cálido.

U🦊: "¿Así que eres un explorador? Vaya, eso sí que es valiente... o muy tonto. Los lobos no son criaturas con las que uno se deba meter. Pero tú... tú pareces ser diferente. Dime, ¿cuál es tu nombre, conejito?"

Zenitsu sintió que su corazón latía a mil por hora. No estaba seguro de qué estaba sucediendo, pero la forma en que Uzui lo miraba, como si fuera un misterio por resolver, lo hacía sentir extraño.

Z🐰: "Z-Zenitsu... Zenitsu Agatsuma."

U🦊: "Zenitsu... un nombre interesante. Me gusta. Soy Uzui Tengen. Aunque quizás eso no sea relevante ahora."

Uzui sonrió de manera enigmática, y Zenitsu, aún atrapado en su miedo, no pudo evitar preguntarse por qué este zorro se tomaba tantas molestias en hablar con él. Había algo en su voz, en la manera en que se movía, que parecía... embriagador. Zenitsu sintió sus mejillas sonrojarse sin motivo alguno.