Pequeño Cruella.

Chapter 6

Amir y Noah estrecharon su mano, el pelinegro a su lado no quitaba la mirada del pequeño Noah.

-¿Nos conocemos?-pregunta el, al instante es regañado por su príncipe.

-Oye, perro callejero. ¿No te enseñé a comportarte?-los susurros del príncipe se escuchaban a pesar de todo.

Los ojos grises claros siguieron mirando a Noah, quien no podía articular alguna palabra. Richard al ver esto, decidió apartarlo a un lugar más alejado.

-¿Te sientes bien?

No se sentía bien, la persona que le habló se parecía al muchacho de sus sueños, uno que parecía cercano a el.

-Continuemos padre, aún queda gente que saludar.

Y fue de esa forma que el anterior encuentro se le desapareció de la mente, hasta que la última persona le devolvió algunos recuerdos.

"Si no quieres que golpee a Muerte dile que no me moleste"

-Mhn...-Noah sujeto su cabeza.

-¿Noah? Hey, te llevaré con el doctor.

El pelinegro se negó, y en cambio, ignoró el dolor para saludar como se debe a la última persona que le resulta familiar.

-Soy el Duque Da Cooper, mi nombre es Calixto, es un placer conocer a su alteza. Ella es mi esposa-señala a la mujer de su lado, quien hace una reverencia, su estómago tiene una bola bastante avanzada dentro-su nombre es Delein.

Su esposa es una persona bella, aunque esos ojos son de un rojo oscuro, y de cabellos negros, no da miedo, al contrario cree que es una mujer guapa, Noah está seguro de que el niño tendrá buenos genes.

-Felicidades, estoy seguro que el niño será un lindo bebé albino de ojos rojizos.

Ambos se rieron, Calixto tocó la panza de su mujer, arrodillado se puso a escuchar.

-¿Escuchaste mi pequeño Valentino? Su Alteza lo dijo, si, aja, por supuesto-el mira a Noah felizmente-Valentino le agradece.

Son una pareja feliz.

El cabello blanco, y los ojos celestes de este hombre eran igual al mayor de sus sueños, una persona de buen corazón.

Richard se despidió y llevó a Noah a una habitación apartada del salón, su hijo se tiró en un sillón tocando su cien.

-La comida llegará pronto.

-Genial, porque estoy muerto de hambre.

-Si hubieras llegado temprano...

Noah tapó sus oídos, su padre va a regañarlo, es difícil, porque primero es su regaño y luego el de su hermano.

-Hey, ya llegó la comida. Ya no te regañaré.

Noah se sentó frente a su padre, recibió la comida y luego se tomó los medicamentos.

-¿Quieres ser el principe heredero?

Esa pregunta hizo que Noah se atragantara y tosiera golpeando su pecho.

-No, mi respuesta es no.

-Dame una razón.

-Soy un flojo padre, quiero vivir en libertad y sin preocupaciones.

Richard suspiro.

-Lo sabía, mi primera opción es única para ese puesto.

-¿A quien pondrás? Debes elegir bien, Kosher me agrada pero aún es inmaduro y blando de corazón. Millen es un buen partido, lamentablemente no tiene el apoyo de los nobles. Y Lucas está discapacitado.