Deseo Cumplido.

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Flufftober. Día 3, "Cumpleaños"
Fandom: Harry Potter
Pareja: Ronarry
Universo: Alterno. No hay un Señor Tenebroso después de Grindelwald... Bueno, lo hubo, pero lograron derrotarlo. No existió profecía alguna, aunque Colagusano sí traiciona a sus amigos y Harry sí queda huérfano.

La autoría de los personajes y lugares reconocibles no es de mi propiedad, si no de Rowling.

Antes de cumplir 12 años de vida, Harry Potter había experimentado pocas muestras de afecto. Como la compañía de sus amigos.

Por ejemplo, y desde que se conocen, cuando Hermione está de buen humor, siempre lo abraza, tan fuerte que siente que podría romperle las costillas. O las palmadas de camaradería que Dean suele darle en la espalda. O la forma en que Ron y sus hermanos le revuelven el pelo, ya sea porque están festejando algo, o porque lo han visto desanimado.

Pero el mayor acto de preocupación y cariño para él, es justamente el momento en que Ron y los gemelos Fred y George llegaron hasta su ventana conduciendo el bonito (y para nada común) Ford Anglia del señor Weasley, arriesgando su vida y libertad por él. Que le hayan salvado del encierro impuesto por los Dursley fue uno de los mejores regalos de cumpleaños que recibió en su vida.

A la edad de trece, la compañía que más le conforto cuando creía que Sirius no era más que un traidor, fue la de Ron. Después de enterarse de lo que su padrino había hecho, Harry se la pasaba llorando varias noches después de que todos cerrarán los doceles de las camas. El único que seguí despierto y se acercaba a consolarlo, era justamente su pelirrojo amigo.

Y luego, Sirius atacó a Ron. Harry temía por la vida del otro chico. Aunque después, resultó que la rata Scabbers era un adulto de treinta y tantos años que había sido el verdadero culpable de la traición a sus padres y de que Sirius terminara en Azkaban.

Harry, a pesar de todo, decidió que perdonarle la vida a Pettigrew era mejor opción. Un acto que, no solo redimiria a Sirius y haría que recuperará su vida junto a Remus, si no que también, haría quedar al ministro y a los aurores como no más que un chiste.

Después de entregar al hombre a los dementores, y de que Sirius y Remus retomarán su vida donde la dejaron, Harry tenía miedo de que algo más pudiese pasar. Y por eso, esa misma noche, reunió todo el coraje que caracterizaba a un digno Gryffindor como él y se dirigió a la enfermería para ver a Ron, justo veinte minutos antes del toque de queda, por lo que la señora Pomfrey insistía en que no podía dejarlo pasar.

Necio como es, no acepto un no por respuesta, por lo que convenció a la bruja de que, entre más tratase de correrlo, más tarde se haría y logró pasar. Se dirigió corriendo a la camilla de Ron, tomó el rostro blanco y pecoso entre sus manos y le plantó un tierno beso en los labios, sin permitir que el otro chico hablara siquiera.

La cara de Ron se coloreo de un rojo vivo y brillante, una sonrisa se dibujo en sus labios y volvió a besar a Harry. No se necesitaron palabras, pues la misma acción lo dijo todo.

Quince años después.

Se encontraban en la madriguera. Era primero de marzo, justo el día en que Ron estaba cumpliendo veintiocho años de edad. Todos cantaban el feliz cumpleaños mientras la señora Weasley ponía sobre la mesa una bella tarta casera hecha por ella misma.

Ron cerró los ojos, pidió un deseo y soplo las velas. Al abrirlos, vio delante suyo a su familia y seres queridos. Y a Harry, quien apenas había cambiado a lo largo del tiempo.

Harry se acercó a él, lo abrazó por los hombros y preguntó:

-¿Cuál fue tu deseo de este año?

-Qué dijeras que sí.

En ese momento, Ron sacó de su bolsillo una linda cajita de terciopelo negro que resguardaba un lindo anillo de oro, lo que llamó la atención de todos los presentes.

-Harry James Potter. Lo que te ofrezco quizás no sea mucho comparado a lo que tienes, pero te doy mi vida si la necesitas. Te amo, y quiero que estemos juntos hasta el día en que mi corazón deje de latir y que toda la felicidad que me des, me dejes dártela de vuelta. Así que... ¿Quieres casarte conmigo?

Todo el mundo quedó en silencio por algunos segundos, expectantes a la respuesta, mientras Harry quedaba mudo por la sorpresa.

Ron empezaba a pensar en que era mala idea pedirle matrimonio a su novio de la nada, y cuando estuvo a punto de retirar el anillo, Harry tomó sus manos, dio un par de besos en ambas y luego plantó uno más sobre los labios del pelirrojo. Al separarse, solo dijo:

-Es injusto que tuvieses la misma idea que yo - sacó de su bolsillo una caja similar a la de Ron, pero de color rojo, donde resguardaba un anillo parecido al que, su ahora prometido, le ofrecía. La única diferencia eran las piedras. Mientras que, en el anillo que Harry portaria había un pequeño zafiro, en el anillo de Ron reposaba una esmeralda.

Los cumpleaños de ambos no fueron lo mismo desde que se conocieron, menos aún, desde que se casaron.













¿Atrasada? ¿Quién? 😂
Les pido una disculpa bebés, prometo ponerme al corriente lo más pronto posible. Espero que este pequeño corto sea de su agrado.

Flufftober 2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora