9 de mayo 2022
Desde ese día no habíamos hablado, con suerte unos vistazos entre clases, pero cada una andaba con su grupo de amigas. Sin embargo, un mensaje me llegó cuando estaba leyendo en wattpad, "¿me puedes dar un abrazo?" con un sticker acompañando el mensaje, claramente no me negué y apenas sonó el timbre del receso, fui a buscarla a su salón.
Nuevamente volvíamos a nuestra rutina de solo darnos un abrazo y luego cada una vuelve a su grupo de amigos, o simplemente nos pasamos un buen rato así, en un fuerte y apretado abrazo hasta que se siente asfixiada.
Volvimos a clases y al poco rato Alexia subió un estado quejándose de no sé que cosa sobre irse, se lo respondí.
Leyla: ¿Te vas?
Alexia: Tal vez
Leyla: ¿Por qué?
Alexia: A parte no me interné para estar en tu cumpleaños, pero ya no quiero mucho estar aquí
Leyla: Entiendo
Alexia: Depende de lo que diga mi papá
Le mandé un sticker, ya que no sabría que poder decirle, mi pecho estaba un tanto apretado, ¿Qué se supone que haré cuando ella se vaya y ya no pueda verla más? Se me hace difícil salir de mi casa y ella prácticamente estará viviendo en el liceo al que asistirá.
Seguimos hablando durante el día, tarde y noche, sin embargo un estado nuevamente que subió expresándose hizo que cambiáramos el tema y yo le reclamara el por qué volvió a fumar.
Alexia: Me da lo mismo
Leyla: Algo te pasa
Alexia: Bueno, si
Le empecé a dar razones del por qué encuentro que está rara, y entre todas sus razones, nuevamente volvió a recordarme que ya no le gustaba y que por eso se estaba acercando a mí.
Le di la razón e ignoré el tema para seguir en los otros temas, ya ignorando el hecho de que había vuelto a fumar, después de todo lo hace para sentirse mejor y yo no soy quién para prohibirle qué hacer.
(...)
Los días pasaban y nuestro humor iba mejorando, Alexia estaba mas que feliz al saber logró terminar un entrenamiento completo sin que el pecho le molestara, aunque arruiné su felicidad al decirle que se siguiera cuidando, pero es muy terca. Sin embargo, entre más hablábamos, de nuevo me seguía dando cuenta que me seguía ocultando cosas que se le escapaban y después solo quería huir para que no la interrogara.
No sé qué tipo de relación de amistad teníamos, pero demostraba ya no confiar en mí. ¿Hice algo mal? ¿Debo estar más con ella? ¿Debo alejarme para que pueda conocer a más personas?
Pensar en las razones por las cuales me esconde tantas cosas y evita a toda costa decirme lo que sucede hace que me frustre y mi humor cambie a cada segundo, no estoy soportando.
Los días cada vez iban pasando más rápidos, Alexia desaparecía en las tardes para ir a entrenar y se le veía feliz por estar haciendo lo que más le gusta, subía muchas fotos y videos a Instagram junto a sus compañeras del equipo, estoy feliz por ello.
ESTÁS LEYENDO
Hasta que pudimos coincidir
Teen FictionLeyla no sabía que en poco tiempo su vida se volvería un campo minado, que cada paso que daba podría hacer que algo explotase y que generara una desgracia. Se sentía así luego de darse cuenta que su vida no estaba yendo por el camino que quería, qu...