Capítulo 1

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Dailo Vasilakis

Dailo Vasilakis

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Yoi Easton

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Yoi estaba tomando el sol en la tumbona de la piscina de la mansión, pero se sentía solo, echaba de menos a su novio. Sabía que iba a estar unos días ausente por su trabajo pero no podía hacer nada al respecto, tampoco podía ir a visitarlo así que solo le tocaba esperar a su regreso. Suspiró con una enorme tristeza en el pecho desconsolado mirando como el agua de la piscina se movía golpeando el pavimento, cuando un mayordomo se acerca, deshaciendo su momento de soledad con bandeja en mano que sostenía un teléfono, el cuál le acerca.

—El señor le llama. —La elegancia del mayordomo no conocía límite, a Yoi todavía le impresionaba tanta etiqueta.

—E-está bien, gracias. —Tras coger el teléfono el mayordomo se retira.

Yoi se quita las gafas de sol y se acerca el aparato al oído para esbozar una tonta sonrisa al oír la voz de su amado.

—¿Me echabas de menos? —la voz de Dailo se oía aún más sensual a través del teléfono, escucharla tan cerca de su oído le puso a Yoi los pelos de punta.

—Sabes que sí cariño —intentó decir sin que se le temblara la voz. Tenía el corazón a mil, aún después de tanto tiempo juntos Dailo conseguía ese efecto en él.

—Pobre, te he dejado solo por tanto tiempo... te prometo que cuando llegue a casa te lo compensaré con todo lo que quieras.

—Solo quiero que estés aquí conmigo. —Yoi apretó los labios y la toalla que reposaba sobre sus piernas con la mano libre pues ya se imaginaba lo que respondería su pareja.

Al otro lado de la línea se oyó un suspiro.

—No me hagas esto... sabes que por ahora no puedo, el trabajo se me está complicando un poco. —Al no obtener respuesta de Yoi se hizo un pequeño silencio—. Venga Yoi, anímate, en cuanto vuelva te prometo que te haré mi esposa.

Un corazón oscuroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora