"¿Hice algo mal?" preguntó Klaus, entrecerrando los ojos al ver a su esposa marchando, furiosa y deslumbrante, mientras ella los guiaba a ambos en lo que parecía ser una zona cada vez más aislada de los bosques de Enna.
¿Su única respuesta? Un encogimiento de hombros.
O si fuera más preciso, un resoplido.
Klaus intentó procesar las cosas. Puede que sea un dios, ¡pero eso no significa que pueda leer las mentes! Y se necesita mucho para leer las mentes de las mujeres. Especialmente, cuando están de un humor extraño.
Anteriormente, leer a Caroline no le causaba ningún problema, porque, bendito sea el destino, la mujer solía ser tan transparente. Su rostro casi siempre la delataba. Sin embargo, últimamente, había desarrollado el talento de ocultar sus pensamientos a todo el mundo, y ESA había sido exactamente la fuente constante de dolor de cabeza para Klaus.
Ni siquiera sabía cuándo había empezado eso.
Él comprendió que podría haberle causado a Caroline mucha ansiedad tenerlo a él y a su madre en un lugar durante un período prolongado de tiempo, y por "período prolongado de tiempo" se refería a una semana de festividades en las tierras mortales. Pero ya se había decidido a aceptar cualquier desafío que Liz pudiera ponerle en el camino. Sabía que la mujer no lo soportaría. Estaba preparado para pagar el precio.
"Basado en la mirada que tu madre nos lanzaba mientras nos alejábamos, parece que hice algo mal", continuó, haciendo otro intento de conversación, "Oye, no quiero interponerme entre tú y tu madre", hizo saber su caso, "Otra vez".
Eso se ganó una risa de su esposa y una mirada por detrás del hombro, "Oh, ya lo estás haciendo".
Él asintió, "¿Te gustaría dar más detalles sobre eso?"
Otro encogimiento de hombros.
Klaus murmuró, "Está bien..."
"¿Va a ser así?" escuchó a Caroline suspirar, "¿Por la eternidad?"
lanzando ambas manos al aire, pero ni una sola vez aminorando el paso.
"¿Te gustaría decir eso en voz alta?" propuso Klaus.
Ella respiró profundamente de manera audible y luego lo enfrentó abruptamente, deteniéndolo efectivamente en seco.
"Mi madre..." comenzó bastante insegura, luego plantó una mano en su cadera, "Mi madre ha preparado una habitación para ti..."
"Lo deduje durante el almuerzo..." estuvo de acuerdo klaus.
"En uno de nuestros establos", terminó con una mirada ceñuda.
"Ahh", Klaus no pudo evitar una respuesta.
Esa simple respuesta en realidad la agitó aún más, "Lo sé, lo sé", se preocupó, caminando de un lado a otro frente a él, "Obviamente no esperaba esto. Quiero decir, mi madre puede ser bastante irritable a veces... tiene sus momentos... pero generalmente son justificables. Créeme. Pero este fue simplemente inexcusable".
"¿Estaba planeando dejarme en los establos?"
"¡Exactamente!", exclamó, "¿Puedes creerlo? Lo siento mucho. Debería haberle preguntado sobre tu alojamiento antes del banquete. Quiero decir, TÚ me diste un alojamiento bastante impresionante en tu palacio... Solo pensé, o mejor dicho, tal vez confié demasiado en ella".
Klaus se encogió de hombros, "No me importan los establos".
La mirada de Caroline lo miró fijamente.
"Honestamente, realmente no me importan", respondió, pensando que ella podría necesitar algo de tranquilidad sobre el arreglo, "Créeme, he dormido en lugares más cuestionables en el pasado. Ya sabes, después de la Titanomaquia, Kol, Elijah y yo nos volvimos locos..." se detuvo cuando notó la mirada.
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Holding On To Hell
FanficSolo otro cuento de Hades y Persefone, pero con un klaroline twist.