El Reino del Juicio.

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Adán ha muerto, viviendo en la Tierra Primordial como mortal durante 930 años  cuidando de su esposa, de sus hijos, siendo fiel al señor incluso en los momentos más oscuro.

Quería descansar, quería estar en paz, quería alejarse de todo los problemas que le causaba ser mortal.

Sin embargo, Dios tiene otros planes para él.

Debido a que el mal se ha despertado en la Tierra, y por lo tanto, en su descendencia, conociendo que el mal es más tentativo que el bien, Dios tiene que crear un balance.

Un reino entre el Cielo y el Infierno.

Donde las almas ambiguas deben ser juzgados por sus acciones, si se le permitirá la entrada al Cielo, el destierro en el infierno, o el renacimiento.

Y es ahí donde entra Adán.

[...]

He muerto, rodeado de mis hijos, rodeado de mis nietos, rodeados por los niños que yo crie con esfuerzo y sudor.

A pesar de la violación de Lilith, a pesar del abandono de Eva, a pesar de las enfermedades y la hambruna, me mantuve firme.

Crie a mis niños, crie a los míos, los protegí de las bestias que Dios ha dejado en la Tierra Primordial.

Siempre me mantuve firme.

Ahora, solo quiero descansar.

"Lamento que eso no puedo hacer eso, hijo mío". Una voz retumbante, con la fuerza de mil truenos, resonó en toda la oscuridad que me rodea.

"¿Padre?" Pregunte consternado.

La figura de Dios se posó frente a mí, tan gigante como una montaña, sentando en un trono dorado. Era difícil describirlo, y era de menos, es un ser que trasciende todo lo divino, el creador de todo lo existente. Él y Adán son iguales, al menos Adán logro verse igual a la forma humana que Dios está usando ahora mismo gracias a que envejeció como mortal.

 Él y Adán son iguales, al menos Adán logro verse igual a la forma humana que Dios está usando ahora mismo gracias a que envejeció como mortal

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"Hola, hijo". Saludó el Creador de todo con una sonrisa hacia su hijo.

"Padre". Saludó el primer hombre con una sonrisa de felicidad, ya pasó mucho tiempo desde la última vez que vió a su creador. "Pero, ¿A que te referías? ¿he hecho algo mal?"

"No, hijo, no haz hecho nada malo. Todo lo contrario, superaste las expectativas, te mantuviste firme con todo lo que te sucedió, incluso sin mi, seguiste adelante, peleando por tus hijos, asegurándote que no corran grandes peligros con las bestias primordiales en el futuro". Explicaría el ser Todopoderoso, detonando orgullo ante el primer hombre, hecho a su imagen y semejanza. Sin embargo, su sonrisa desapareció y tomo una expresión mas severa. "Sin embargo, debido a que Eva comió del fruto, toda tu descendencia ahora sabe que es el mal; el mal es tentativo, Adán, mas tentativo que el agua en un desierto".

Diferentes Dimensiones [Adán, Hazbin Hotel]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora