Capitulo 1: Tierra oscura

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En el pueblo de Syrup se vivía con relativa tranquilidad, sus pueblerinos eran amables y trabajadores, procuraban la cosecha de todos los años y se apoyaban mutuamente, todo estaba bien, bueno eso era lo que aparentaba, todo estaba bien mientras el sol iluminaba sus días, su otro lado de la cara se mostraba cuando la noche se acercaba, todos y cada uno de los pueblerinos se encerraban en sus casas a cal y canto al caer la noche, nadie se atrevía a salir cuando el sol se ocultaba, el atrevido y valiente que lo hiciera era paciente seguro del mejor medico del pueblo, Trafalgar Law decidió estar en el pueblo a ayudar a la gente para mejorar sus habilidades medicas mas nunca espero que esta misma tuviera un terrible problema, todos y cada uno de sus pacientes tenían el mismo problema cuando la noche los sorprendía en su regreso de las cosechas, anemia por falta de sangre y una terrible mordida en sus cuellos, todo aquel que la noche los sorprendiera era victima de ellos...

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-Vampiros- le decía su amado padre tratando de convencerlo de no ir pero el se rehusó

-Si eso es verdad tengo que ayudarlos, Cora-san, ellos no tienen ningún medico y están en muy mala situación, deseo ayudarlos- le decía mientras empacaba sus cosas, el rubio preocupado trataba de detenerlo pero resignado solo suspiro mientras le daba una cruz

-Toma, por lo menos llévate esto y así no se te acercaran- le advertía mientras el contento guardo la cruz en su maleta y lo abrazo

-No te preocupes, practique esgrima y se defenderme, regresare después de lograr que alguien ahí se vuelva medico ¿Si?- le proponía a su padre quien llorando asintió

-Esta bien Law, cuando pueda iré a visitarte y por favor no salgas de noche- le advertía sobre la leyenda de los vampiros antes de marcharse

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-Si no fuera que no es lo único que existe te diría loco padre- se rindió en su asiento al atender a la ultima victima del reciente ataque nocturno

-Hombres lobos, vampiros, fantasmas, brujas, monstruos, duendes, hay tantas cosas en los alrededores de este pueblo que de seguro si voy a una ciudad me meten al psiquiátrico- se rascaba la nuca al pensar en todo lo que le había tenido que ver al estar ahí, de pronto algunos comenzaron a gritar fuera de su consultorio, eran un par de hombres cargando a otra victima pero este se veía fatal, peor que los demás, rápidamente lo atendió y busco sangre donada para tratarlo, los hombres veían que el hombre sufría

-Esto se esta saliendo de control, tenemos que hacer algo- decía uno de ellos desesperado

-Cálmate Iceburg y pensemos con calma- le advertía el rubio de tez morena

-No podemos seguir así Paulie, debemos eliminar el problema desde la raíz- decía muy seguro, el hombre comenzó a gritar y se retorcía de dolor

-¿Que pasa?- Law salio de la otra habitación y vio como ellos dos retenían al hombre en la cama

-No sabemos, esta es la primera vez que pasa algo como esto- los dos estaban angustiados, de pronto el hombre intento morder a Paulie quien apenas logro esquivar su mordida

-¿Que te pasa Trébol?- Iceburg pregunto mientras aplicaba aun mas fuerza en el, Law veía preocupado la reacción del hombre, recordó lo que su padre le había dado y decidió sacarlo de su cajón que tenia cerca y se lo mostró, se retorció con aun mas fuerza

-No es posible- decía el rubio muy preocupado

-No puede ser, Trebol se volvió uno...- abrió la boca mostrando grandes colmillos ante la sorpresa de todos los presentes, Law rechisto y salio corriendo del consultorio pidiendo a ellos dos soportar al hombre, llego a la iglesia inquieto y llamo al padre del lugar

-Urouge-sama, necesitamos de su ayuda urgente- le decía preocupado por la situación en su consultorio, este rápidamente lo acompaño y vio con horror en lo que se estaba transformando el hombre

-¿Fue mordido?- saco una botella con agua bendita

-Si pero los anteriores también lo fueron pero está vez a Trébol le está afectando demasiado- decía el rubio aún haciendo gran esfuerzo por retenerlo

-No queda más, si el se está volviendo uno de ellos no nos queda más que...- decía inquieto mientras se preparaba para lanzar el agua, Law sospechando lo que iba a ocurrir le gritó a ellos dos

-Apártense!!!- en ese instante lo soltaron y fue a atacar a Urouge quien le dio de lleno con toda el agua, el sujeto comenzó a revolcarse en el suelo mientras un humo blanco salía de el, se estaba quemando y sufría con ello, rezando el hombre saco de su morral una estaca

-¿Urouge-sama? ¿Que va hacer?- pregunto Law preocupado por lo que estaba planeado

-Ya no es uno de nosotros, el ya se perdió y solo queda ese mal- nervioso se acercó al sujeto e inserto esta misma en su corazón, saco un martillo de su morral y con apenas deseo de hacerlo termino de hundirla en su pecho matándolo al instante, todos los presentes estaban horrorizados por lo que había ocurrido y el padre cayó hincado mientras rezaba

-Lo siento señor, tenía que hacerlo, lo siento mucho señor- trataba de controlarse, Law estaba angustiado al ver lo que estaba ocurriendo, con enojo observo el castillo que apenas lograba verse a lo lejos, resentido miro el miedo de los aldeanos a los cuales el apreciaba

-"Esto debe terminar"- apretó con fuerza la cruz en su mano pensando en lo que haría de ahora en adelante para dejar de sufrir todo eso.

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En el castillo tres sombras veían llenos de confianza y alegría pasar algunas personas hacia el pueblo próximo

-Horohorohoro, ¿Puedo padre?- preguntaba ansiosa mientras flotaba de alegría

-Oye déjame algo aunque prefiero la carne- refunfuñaba el otro

-No desesperen, debemos ser precavidos al fin de cuentas lo único que queremos es vivir en paz- sus intensos ojos dorados observaban a detalle al par de hombres que pasaban por el camino hacia el pueblo Syrup.

Bajo la luz de la LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora