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William Davis:


Uff, que día agotador, había entrado a la casa hace bastante tiempo, y si, decidí vivir con los chicos. No había encontrado otro lugar para quedarme, y mí penthouse... me trae muchos recuerdos, aún que acá tengo a la persona causa de esos recuerdos.

Hace un ratito me había hablado Dayana, no es una mala chica, todo lo contrario es asombrosa, es muy amable, dulce, y cariñosa... Aún que un poco bipolar, se enoja un poquito rápido, pero aún así es una gran persona. Me contó que tiene un perrito, es pequeño, me mandó unas cuantas fotos, es hermoso.

Los chicos estaban en el comedor, sinceramente no se de qué, no e querido bajar por las dudas, aún que se que ella aún no está aquí, no había venido desde que me vio con Dayana. Y eso literalmente me estaba torturando...

Tenía muchas ganas de salir de mí habitación, pero, ¿Y si la veía justo? ¿Que iba a decirle?, pero tampoco me voy a quedar aquí de por vida... ¿Tal vez ir a pasear...? Es la mejor opción que tengo hasta ahora.
Me pongo las zapatillas, salgo de la pieza, me despido de los chicos y salgo, camino hacia el ascensor y bajo.

Hace tiempo que no entro a las redes sociales, ¿Que podría pasar? Prendo el celular, y abro instagram, adentro me encuentro fotos de Dayana y yo, y otras fotos de reconocidos. Estoy apunto de darle me gusta a una de las fotos, hasta que chocó con alguien.

– ¡Disculpa! - Levanto la mirada...

– ¿Michelle que pasa...? - Ella me mira aterrada. - ¿Que sucede? - En su cara demuestra miedo, tiene los ojos demasiado abiertos, la boca entre abierta, está un poco despeinada, y parece que estuvo corriendo mucho.

Lo primero que hace es verme, y abrazarme.

– Tengo miedo, Wil, tengo mucho miedo, y no tiempo para explicar nada, el, el es capaz de todo... - Es lo que susurra contra mí hombro, mientras escucho que solloza.

– ¿De que?, ¿Que pasa Mich? - Digo mientras le devuelvo el abrazo.

– Pa, Patric, está viniendo...

– ¿Es tu novio no? - La interrumpo.

– ¡Mierda!, no, el me...

– ¿El que Michelle? - Digo con el ceño fruncido, y separándome un poco para ver su cara.

– Wil... El, el, el... - No logra decir más, ya que comienza a llorar.

– Ey, no pasa nada. - Digo mientras niega con la cabeza.

Salimos del edificio, ya que nos estaban mirando raro.

– Wil, el, el no me quiere, no me ama, el... - No se que es lo que quiere tratar de decirme.

– Ey, no pasa nada, vayamos a la plaza. - Ella camina, mientras se seca las lágrimas.

No entiendo lo que trata de decirme, el no me ama, el.. ¿El que? Se escucha y se ve tan feliz cuando habla de el, que no creo que sea capaz de hacerle daño, y menos a ella que es una mujer de carácter duro.

Llegamos a unos bancos que tiene la plaza, y nos sentamos, ella cumple primero con la acción, mientras se agarra la cabeza.

– ¿Que sucede Mich? - Veo como se descubre su cara, y me deja ver como sus ojos azules están llenos de lágrimas.

– ¡Wil, tengo miedo!, mierda, nadie sabe esto Wil, pero...

Se queda callada ya que comienza a caerle nuevamente unas cuantas lágrimas.

No sé cómo tranquilizarla.

– Ey, Michelle, porfavor dime, no te gas miedo yo no voy a juzgarte, y lo sabes.

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⏰ Última actualización: Oct 22 ⏰

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Un Encuentro en Nueva York ( LIBRO ORIGINAL )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora