𝗗𝗢𝗡𝗗𝗘 Mia se siente nerviosa y sorprendida al saber que es una princesa de un pequeño Reino en genovia.
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𝗗𝗢𝗡𝗗𝗘 Sam se convierte en el nuevo guardaespaldas de la princesa, empezando una enemistad grande y muy caótica.
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SAM LEVANTABA PESAS MIENTRAS ESCUCHABA MÚSICA, se detuvo al ver a su madre llegar con un poco de comida para el, le sonrió tiernamente y se acercó a ella besando su mejilla.
—Cariño, ¿ya terminaste tu discurso? —Cuestionó la mujer curiosa.
—Estoy aún en eso mamá —Aclaró tomando un poco de limonada—, es pastel de chocolate.
—Así es, tu favorito —Sonrió acariciando su mejilla, sentándose al frente—, escuche que te darán otro puesto en el castillo.
—Así, cuidare a la reina —Aclaró tranquilo comiendo el pastel—, después de la muerte del príncipe, mi madrina cree que es mejor que este junto a ella y mi tío.
—Oh, Clarissa siempre tan amable con nosotros —Habló tranquila sacando una caja.
—¿Donde tenías escondido eso? —Cuestionó el castaño confundido.
—Para que veas que no saber completamente todo de tu madre —Habló con una sonrisa orgullosa, dejando la Caja en la mesa—, era de tu padre.
—¿Asi?.
Dentro había un reloj antiguo de bolsillo, Sam lo saco viéndolo con cierta curiosidad.
—Ha pertenecido a la familia de tu padre por generaciones, primero fue de tu tataratatara abuelo Frederic, luego de tu abuelo Albert —Explicó con una sonrisa cariñosa—, luego de tu padre h ahora es tuyo, en un futuro será de tu hijo.
—Si, no creo que tenga hijos, mamá —Aclaró Sam dejando el reloj en la Caja.
—Claro que si, te enamoraras de una hermosa mujer —Habló Margaret con una sonrisa—, ya planeare tu boda.
