7

412 118 9
                                    

A medida que pasaban los días, Yoongi y Jimin comenzaron a encontrarse con más frecuencia. Yoongi descubrió que, aunque el aroma de Jimin era intenso, podía soportarlo mejor que los demás, pero no significaba que era del todo inmune a este.

Pues había días que luego de ver al omega caía enfermo o su nariz sangraba, ese día se encontraba con su esposa, muy pronto le harían más análisis para ver su condición y ver si era apta para la cirugía.

—¿En qué piensas cariño? —preguntó la omega.

—En nada. —le sonrió. —No debes preocuparte.

—Te veo diferente. —le dijo.

—Es por mi nuevo trabajo fijo. —sonrió. —pagan bien y con ello pagaremos tu tratamiento.

—¿Conseguiste empleo fijo? —sonrió.

—Sí. —la tomó de la mano.

—¿Y de qué es? —preguntó curiosa.

Yoongi sonrió nuevamente sabía que no era bueno mentirle a su esposa, pero iba en el contrato que firmó que no debía revelar nada sobre la isla a la que iba.

—Es de niñero. —respondió. —Debo de cuidar a alguien.

—Ya veo. —dijo. —Me alegra que ya tengas un trabajo fijo y no muchos que solo te cometían estafas con el pago.

—Lo sé. —asintió.

Yoongi escuchó cómo su celular sonaba y se levantó para responder, el suspiro al escuchar lo que le decían por lo cual asintió y colgó, volvió con su esposa y esta lo vio.

—Es de mi trabajo, me necesitan con urgencia. —le dio un beso en la frente.

—Tranquilo ve con cuidado. —sonrió.

Yoongi asintió y se fue de ahí, se subió al auto qué ya lo esperaba para ir a la isla, Jimin por su parte estaba sentado viendo donde los helicópteros le dejaban las cosas estaba vacío. Él estaba esperando la llegada del alfa, miró su celular y vio sus contactos en ellos tenía al de su padre únicamente y el de seguridad.

Su vista se posó en el helicóptero qué venía donde él estaba, vio como bajo el alfa el cual traía unas cosas, Jimin no dijo nada solo lo veía entrar con cuidado.

—Hola Jimin. —lo saludo.

—Hola. —murmuró.

—¿Estás bien? —se acercó a él despacio.

—Sé que hoy no debías de venir. —murmuró. —pero me sentía solo y pues mi mente pensó en ti.

—No pasa nada. —negó. —Traje algunas cosas espero no te moleste.

—¿Qué es? —preguntó.

—Traje pollo frito y algunas películas para ver. —abrió su mochila.

Jimin sonrió ante eso y no pudo evitar sentir su corazón latir muy fuerte, pues se estaba enamorando en tan poco tiempo del alfa de piel pálida.

Nevermind [YM]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora