Paseando por la tierra del terror

El amanecer de los muertos (Parte 6)

El amanecer de los muertos (Parte 6)

"Tenemos que salir de aquí", dijo Ana mientras miraba a los demás en el oscuro centro comercial. Habían pasado algunas horas desde que se apagaron las luces y el daño era peor de lo que nadie podría haber esperado. Si bien la pareja esperaba poder reparar el artefacto, tuvo una falla catastrófica que básicamente requirió que se reemplazara por completo. Lo que significaba que todos no tenían suerte en un mundo destruido por los muertos. Claro, tenían algunos generadores más pequeños para mantener la granja hidroeléctrica y el entretenimiento, pero el agua potable sería cada vez más difícil cuando los sistemas automatizados de las compañías de agua colapsaran.

"Logan arregló esos autobuses que necesitábamos para salir de aquí, parece que es hora de usarlos", dijo Michael. Steve, un tipo rico que sobrevivió hasta ahora por tener suerte y salvarse a sí mismo durante todo este maldito lío, se rió mientras pasaba.

"Sí, claro, ¿qué tal si tomamos esos autobuses hasta la Marina?" dijo mientras se servía un café. "Luego podemos tomar mi bote para ir a alguna isla", ofreció exageradamente. 

"¿Qué tan lejos está el puerto deportivo?" preguntó Michael mirando a su alrededor. Steve se rió entre dientes mientras miraba al grupo como si estuvieran locos. Pudo ver que muchos estaban considerando la idea descabellada y se rió aún más. 

"¿Estáis todos locos? Tendríamos que atravesar la ciudad, atravesar el infierno", dijo mientras sorbía su bebida. 

—¡Es una buena idea, Steve! —dijo Mónica mirando al hombre. Había comenzado a vivir con él a regañadientes durante el mes que estuvieron allí después de que sus avances hacia Logan fracasaran en la puerta. Todavía recordaba la mirada que le dirigió su esposa cuando la sorprendió mirándolo. Sabía cómo juzgar a una perra que mataría y a una que golpearía, y Akane parecía que la torturaría lentamente hasta la muerte.

—¡Oh, cállate, Mónica! ¡No quiero morir! —dijo Steve antes de mirar a su alrededor con desesperación. Su expresión no le valió ningún apoyo y se burló y sacudió la cabeza antes de callarse y mirar su café. Logan, Akane y Andy estaban en la esquina limpiando y recargando las armas que tenía el grupo. 

"Siempre podríamos ir al campo, hay muchos animales para cazar y no mucha gente", dijo Andy a los dos. Quería probar sus pensamientos con las dos personas que parecían que iban a sobrevivir hasta el final, grupo o no. La pareja meneó la cabeza al mismo tiempo mientras veía al grupo comenzar a planificar su escape. 

"Los muertos están viviendo demasiado tiempo, Andy", dijo Logan. No sabía mucho sobre el cuerpo humano, pero después de leer un libro de medicina sobre el tema, tuvo una mejor idea. "Los cadáveres que caminan deberían haber comenzado el rigor mortis hace semanas, sin mencionar la descomposición por el sol y las bacterias que deberían estar recibiendo del calor del día". Andy pensó en eso y luego asintió con la cabeza. 

"La mejor apuesta sería llegar a una isla lo suficientemente grande para cultivos y ganado, aunque Steve tiene razón en que conduciríamos por el infierno para llegar a su bote", dijo Akane mientras limpiaba su Glock limpia. "Sería mejor conducir por las carreteras secundarias hacia otro puerto deportivo menos poblado para tomar un bote que esté más cerca de la isla a la que queremos llegar, aunque eso sigue siendo un riesgo si no podemos encontrar un bote lo suficientemente grande para todos". Andy asintió de nuevo mientras limpiaba el cañón de su rifle. La pareja sabía que el camino correcto era el que Akane ofrecía, pero no iban a insistir.