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Sanji estaba saliendo de su club con una expresión de cansancio, ser presidente del club de cocina era un trabajo difícil pero valía totalmente la pena

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Sanji estaba saliendo de su club con una expresión de cansancio, ser presidente del club de cocina era un trabajo difícil pero valía totalmente la pena.

Él sería el futuro dueño del Baratie y esto lo ayudaría a acostumbrarse para cuando llegue el momento, y gracias a que trabajaba para su abuelo ya se estaba acostumbrado.

Pudding:¡Sanji-kun!.

El rubio se detuvo para ver a la castaña que se había acercado a él con una expresión nerviosa.

Sanji se hizo el que no había notado el nerviosismo, no era tonto sospechaba que Pudding estaba un poco enamorado de él.

Pero sólo eran sospechas y tampoco es que quería romperle el corazón a la hermana de su cuñado y así causar un desastre en la relación de su hermano Ichiji.

Tal vez sólo era un poco paranoia y ya.

Sanji: Pudding-chan -dijo con una sonrisa.

Pudding:¿Quieres que te acompañe hasta tu casa? -pregunto nerviosa.

Sanji: no quisiera que tuvieras un desvío de tu casa, permíteme yo acompañarte a tu casa, es la más cercana -dijo con una sonrisa.

Pudding se sonrojo ante la propuesta de Sanji, era todo un caballero y le sorprendía que no tuviera novia...

¡¿Cómo alguien como él no tenía novia?!.

Aunque eso era una ventaja para ella...

Arriba de un edificio

Zoro estaba mirando todo con una mirada llena de molestia, no podía esperar el domingo para ver a su rubio así que había decidido en ir a verlo y sorprenderlo en cierto lugar.

Pero su lindo rubio se atrevió a aceptar la invitación de una estúpida mocosa de cuarta.

Sabía quién era ella, era Pudding Charlotte, era una de las hermanas del cuñado de Sanji.

Y no debía estar tan cerca para darse cuenta del obvio enamoramiento de esa mocosa con SU Sanji.

Respiró hondo y decidió seguirlos.

Algunas veces odiaba la caballerosidad de Sanji, Pero era parte de él y se veía tan adorable siendo todo un caballero con todo el mundo.

Con Sanji

Sanji estaba disfrutando del aire fresco mientras que Pudding no paraba de verlo.

Y eso el rubio lo notaba...

No quería ser descortés y hacerla sentir mal, nuevamente la relación de su hermano estaba en el medio de esta situación.

Soltó un suspiro y decidió sonreír con toda la calma del mundo, sinceramente creía que era muy obvio que él era gay, aunque bien dicen que el más ciego es el que no quería ver.

Pareja De Un MafiosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora