Estaba emocionada, siempre había sido una persona solitaria, durante toda mi vida me había dedicado a mis parejas y el hacer amigos nunca había sido mis prioridad. Pero ahora no podía creer que tuviera una amiga, una amiga como Julie tan alegre,tan buena persona, tan gentil y amigable, hace escasas 2 semanas que la conocía pero ella era diferente.
Yo seguí en mi casa recostada, pensando en todas esas cosas, hace algunos días que no veía movimiento en su casa... A veces la veía salir muy temprano con sus trajes rumbo a su trabajo, ayer mientras lavaba mis trastes la vi llegar y después de unas horas volvió a salir pero vestida de diferente forma.
Habia estado pensando en invitarla a comer algo cómo le había prometido, pero cómo no había estado no había tenido oportunidad de ir a su casa... Pero a lo mejor hoy si esta, hoy no la vi salir en la mañana.
Me levanté rápidamente de la cama y me metí a bañar, me puse unos pantalones vaqueros y una blusa pegada, me peiné y arreglé un poco, tomé mis llaves y salí directo hacia su casa, estaba a punto de tocar cuando escuché gritos e inmediatamente abrió la puerta una mujer rubia alta y delgada.
-Y no me importa nada...-salio gritando
-ho...hola- saludé tímidamente- ella solo se pasó de largo y se subió a su auto
-Hey Laura, espera... ¿Sarah?
-ella salió con una bata de dormir
-Lo siento creo que no fue un buen momento para venir
-No te preocupes Sarah, no le tomes importancia a Laura
-¿Era algún cliente?-pregunté interesada
-No,para nada era mi novia, hace escasos...-miró su reloj- 15 minutos
-Tu... Tu novia?, Julie tú.. Tú eres...
-Si, soy gay Sarah
-¡oh!, eso es... genial-
-¿Hay algún problema con eso?
-No para nada, eso sólo que no me lo esperaba, me cayó de sorpresa...lo siento, no es ningún problema para mí
-No te preocupes, pasa, no es muy agradable estar en bata de dormir en la calle-dijo divertida
-ok, con permiso- pasé y ella cerró la puerta a mis espaldas
-Es hermosa tu casa Julie- su casa era amplia y muy acogedora, tenía casi todos sus muebles de madera y algunos otros detalles igual de este material, en la sala tenía una pequeña chimenea, y las escaleras eran grandes igualmente de madera.
-Gracias, me alegro que te guste... Anda toma asiento
Me senté en sus sillones, los cuales eran muy cómodos y muy bonitos.
-Y ¿que pasa Sarah?, ¿en que te puedo ayudar?
-Si bueno yo... Venía a invitarte a comer cómo te había prometido...
-¿Enserio?, magnífico, me encantaría, ¿cuándo?
-¿mañana esta bien?
-Si, mañana esta perfecto...
-Oye, perdona mi indiscreción, pero porque tú y tu novia... Bueno ya sabes... ¿Terminaron?
-Bueno, teníamos muchos problemas, peleábamos constantemente, con el trabajo no tenía tiempo para ir a verla... En fin nuestra relación ya estaba en las últimas
-ah, lo siento mucho...
-No te preocupes, ya pasará...¿Quieres tomar un café?
-no, yo debo de ir a arreglar mi casa
-Mujer no nos hemos visto desde hace algunos días, el trabajo no me ha dejado nada de tiempo... Es más vamos a salir, ¿te puedo enseñar el pueblo, ¿qué dices?
-Pues, bueno esta bien
-genial, ahora déjame ir a darme un baño y paso por ti ¿ok?
-Claro asi sirve que voy por algunas cosas que dejé en casa- contesté entusiasmada
-Pero antes de que te vayas, tengo que darte algo- dijo tomando una bolsa azul
-¿Qué es esto?- dije tomando aquella bolsa
-Es la ropa que me prestaste, no te la había podido dar pero ya está como nueva lavada y planchada
-Oh no! Julie no debiste...
-Claro que si, muchas gracias por prestármela- me mostró una sonrisa de agradecimiento y tomó mi mano. Por unos minutos las dos nos quedamos mirándonos fijamente sin pronunciar ni una palabra.
-Bueno, yo me voy a arreglar ahorita paso por ti-dijo soltando mis manos
-Si, yo iré a mi casa, te espero
Salí apresurada de la casa de Julie directo a la mía, me cambié de ropa, y me arreglé un poco más. Unos cuántos minutos después Julie estaba en mi puerta tocando, yo salí y nos fuimos. Ella me abrió la puerta del auto y dejó que entrara, cerró la puerta y entró ella.
- Muy bien señorita, ¿qué le gustaría hacer hoy?
-No se, no tengo idea Julie, mejor decide tú
-Muy bien Sarah...
Llegamos a un parque en la cual había mucha gente paseando a sus mascotas, niños jugando, gente en bicicleta, parejas caminando de la mano. Aquél lugar era hermoso y muy tranquilo
-Muy bien pues no es mucho pero me gusta visitar este lugar, me tranquiliza
-Es hermoso Julie, me gusta Caminamos hacía una pequeña banca bajo unos árboles platicamos, comimos un Helado. Después fuimos a una plaza miramos la ropa y pasamos a tomar un café, nos sentamos a platicar.
-Espero no te moleste Julie pero tengo varias dudas
-¿Enserio?, muy bien pues dime... -Bueno acabas de terminar con tu novia y yo te veo muy tranquila, no te dolió
-Bueno no es que no me doliera, sólo que nuestra relación estaba muy dañada ya y creo que esto fue lo mejor.
-¿Y como te gustan las chicas?
-Como tú...
La sangre se me congeló y no supe como reaccionar, sólo sé que estaba ruborizada
-Es decir me refiero a que me atraen las chicas altas, cabello rubio, linda sonrisa y unos ojos bonitos... así cómo tú.
Reí apenada- ¿En serio crees eso de mi?,
-claro que si Sarah eres una mujer hermosa
-Bueno pues gracias Julie- la manos me temblaban y no sabía que me pasabaDespués de unas horas decidimos regresar a casa, las dos nos despedimos y entramos a nuestras respectivas casas
ESTÁS LEYENDO
Haciendo bien las cosas
RomanceDespues de tres matrimonios fracasados y un pasado tormentoso, Sarah Paulson se muda a una nueva casa en busca de rehacer su vida. Lo que ella no espera es que ahí conocera algo nuevo para ella... el amor de una mujer.