cartas jamás enviadas

Interacción

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Abril la saludó mientras iba por el pasillo agarrada de la mano de el.

Al parecer si consiguieron entrar en la misma universidad.

La rubia llevaba días sin dormir, no comía y apenas estudiaba. Estaba pálida con el cabellos ondulado, no planchado como siempre.

Y su sonrisa... su sonrisa había desaparecido.

Samantha la ignoró completamente, subiendo mas el volumen de la música mientras se taladraba los oídos y rasguñaba su mano, debajo de aquellas mangas largas habían pequeños arañazos y heridas causadas por ella misma.

Abril no la hablaba desde que le contó que salia con aquel chico, y ella tampoco podía decir nada sin que su voz se quebrase.

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A- ¿Sam?- preguntó entrando al lugar detrás del gimnasio, sabía que su amiga iba allí cuando se sentía mal o quería estar sola.

La vio sentada en el suelo, con sus leotardos y falda mojados, y la capucha de su sudadera puesta, con una tijera en su mano mientras sollozaba.

S- Vete...- dijo débil a punto de llorar.

A- Sam ¿estas bien?- dijo acercándose.

S- ¡¿No me escuchaste?! ¡Vete!- le gritó para después llorar.

Abril se fue de aquel lugar después del grito, Samantha nunca le gritaba, se sentó en el suelo antes de arrepentirse, ¿por que tenía una tijera en la mano?

S- Te odio...- susurró para ella misma mientras rasgaba su mano con la tijera, haciéndose cortes, siguió y siguió hasta que el dolor fue demasiado y colocó ambas manos ensangrentadas en su boca para intentar reprimir sus sollozos convertidos en lágrimas.

Lastimosamente, Abril no estuvo allí para verla.

Y esa sería una de las últimas veces que la vería.

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Dos capítulos cortos en un mismo día, racha.

Creo que ya vemos como tenemos el rumbo de la historia...