Capítulo 4: Benjamin

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La sangre se secaba en el patio, mis padres me habían encerrado en mi habitación mientras ayudaban a Tomás. Detrás de mi puerta Daniel me pedía permiso para pasar, aunque entró antes de darle respuesta.

-Que lío armaste ahí abajo Benja, ¿Por que te tiraste así?

No me llegaba una sola palabra o excusa a la cabeza, tampoco quería dársela, me enojé y reaccioné no hay otro motivo. Daniel me miró como si entendiera lo que pasó entre Tomás y yo, me dio unas palmadas en la espalda y continuó hablando.

-No pasa nada si no podes hablar, te puede parecer que no entiendo lo que te pasa o que no me interesas ni un poquito y quizás estas medio acertado, pero todo es una decisión que tuve que tomar de muy chico para encontrarme y estar en paz conmigo.- Las palabras de mi hermano eran ruido que pasaba de ser molesto a llevadero pero que aún así retumba.

¿Que puede decidir un estúpido como yo? Yo soy así y no hay nada que me cambie ya.

- Vos no sos lo que papá y mamá te digan que sos, en parte que lo creas es culpa de mis decisiones, si yo me hubiese dejado manejar quizás podrías dedicarte a soñar con un futuro propio, algo que realmente quieras, no sos ellos tampoco, tu relacion con Nina ni tu vinculo con Tomás, sos Benjamin y punto.

En medio de la charla tenía la sensación de que me faltaba el aire, dentro mio había una presion muy fuerte, mientras, mis pensamientos no paraban de comerme la cabeza. Tuve un momento de relajación el cual me sirvió para tranquilizarme.Sentí la necesidad de irme necesitaba volver , a la pileta , al club , estar simplemente ahí. Mi hermano entendió el efecto de sus palabras en mí por lo que me abrazó y se alejó sin antes decirme

-Llegó Nina, no se si quieras ir a saludarla.

~•~

Bajé esperando ver a mi novia, que se haya enterado de mi explosión y me pida disculpas, yo estoy dispuesto a dejarlo todo con tal de volver a ver a ese Benjamin de siempre. Parte de mi deseo se cumplió, Nina estaba allí preocupada pero no por mi, entre sus brazos estaba Tomás y alrededor la mirada confundida de mi madre. Mi novia, si es que aún lo era, me miraba como si yo fuera el peor monstruo existente, papá los despachaba de a poco.

En la puerta fue donde Nina terminó nuestro capitulo y empezó uno nuevo con Tomás, ¿que era de Benjamin?. En las escaleras Daniel me invitaba con la mirada a ver las fotos que colgaban en la pared, se centró en la foto del dia de mi accidente en lo de la abuela.

-Ese día a los dos se nos impuso un destino en mi opinión, a vos te arrojaron al agua y a mi al odio de la familia- No entendía a que quería llegar recordando el incidente- Yo nunca te empujé Benjamin en realidad quise salvarte de hundirte, pero papá pensó lo contrarío y me obligó a tomar la decisión de esconderme de tu vida, quizá la hundida te haya enseñado a saber cuando tomar un poquito de aire o cuando estirar los brazos a la superficie.

Todo se aclaró para mi, el tropiezo de esa ocasión no había sido más que el nacimiento de un Benjamin totalmente falso pero perfecto, el Benjamin que mis papás podían moldear a gusto. Daniel solo era una construcción de lo que yo debía ser, el agua me transformó y me obligó a tomar su destino. Volví a sentir al agua rodearme pero esta vez sabía como salir de ella o hasta acompañarla. En la superficie podría encontrar, quizá, un molde del verdadero Benjamin

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⏰ Última actualización: Oct 23 ⏰

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El ego, la profundidad y... quizás yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora