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-¡Ey, galletita!- el grito de una chica hizo que todos en la cafetería vieran en dirección a la puerta.

Nayeon corrió a Wooyoung con los brazos extendidos, tirándose al chico sentado solo en un de las mesas de la esquina.

San estaba en clases y sus amigos ensayando para los competencias de baile, por eso la soledad.

-Llevo horas buscandote- se quejó con un puchero.

-Perdón, Yeonie. ¿Necesitas mi ayuda?

Masticó un pedazo de su panqueque de chocolate, viendo con sus ojos brillosos a la chica sentada a un lado de él.

-San me mandó, dijo que no quería dejarte solo y con mucho gusto acepté- sonrió.

-¿Volviste a hablar con él?

La castaña asintió emocionada. Quería tanto a San que le alegraba la idea de volver a hablar con su mejor amigo.

-Sí. Hoy me buscó y me pidió disculpas, casi lloré- la risa escandalosa de NaYeon ocasionó miradas de alumnos.

-Me alegra tanto, Yeonie- su singular sonrisa no tardó en aparecer, estrujando el corazón de la beta.

Un olor a frutos rojos se hizo presente entre los dos, volteando se dieron cuenta de que una rubia sonriente hacía acto de presencia frente a ellos.

-Oh, Jeongyeon, ¿Pasó algo?.

Los cachetes esponjosos de la rubia se colorearon.

-Ah... Yo-yo quería ver si aceptas una cita conmigo

NaYeon se quedó estática. Su crush estaba allí, pidiendo una cita. Debía estar soñando de seguro. El corazón le latía con fulgor, casi saliendo de su pecho por la velocidad en la que iba, pero su sonrisa se esfumó al recordar las palabras de su madre.

-Lo siento, Jeongie. Solo me gustan los chicos.- Las palabras salieron casi en un suspiro doloroso, queriendo llorar al ver que la cabeza de la rubia bajó decepcionada.

-Es-está bien,lo siento.

Luego de esas palabras corrió tropezando con personas en su camino, siempre teniendo la mirada de NaYeon en ella.

-Te gusta- afirmó Wooyoung -¿Por qué le dijiste eso?

La castaña sintió sus ojos humedecerse y sus manos temblar.

-Mi mamá no aceptaría eso -respondió

-No entiendo, Yeonie

-Mi madre sabe que me gustan los chicos, pero no sabe que las mujeres también...- suspiró -Ella piensa que las personas bisexuales solo quieren jugar con los demás y solo tener sexo con ellos. No aceptaría que sea bisexual y ande con una chica.

Wooyoung vio a su amiga llorar con dolor.

-¿Qué piensas hacer?- el rubio tomó su mano mientras caminaban por los pasillos

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-¿Qué piensas hacer?- el rubio tomó su mano mientras caminaban por los pasillos.

-Hacer que se enamoren, aunque ya lo están...- puchereo -Quiero organizar una cita sin que se den cuenta, así la pasan bien y terminan siendo pareja.

Sus ojitos brillaron ante su gran idea y San solo asintió dándole la razón, sonriendo al ver como su novio saltaba de alegría por hacer tal cosa.

-¿Y qué harás con lo que te platicó?

La sonrisa del pelioreo se fue como la neblina de la mañana, bufando enojado al no haber pensado en ese pequeño detalle.

-¡No lo había pensado!

-¿Por qué no mejor hablas con ella? De nada serviría que organices esa cita si NaYeon sigue pensado en las cosas que su madre le dijo- aconsejó besando con ternura la mejilla del contrario.

-¡Tienes razón, Sannie! Mi novio es tan sabio- El rubio rió fuertemente.

-¡Tienes razón, Sannie! Mi novio es tan sabio- El rubio rió fuertemente

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