STAY AWAY (Billie Eilish y tú).

8. AHORA SÍ

—Yo no quiero tener nada que ver contigo, Eilish. Ya se acabó, lo que vi fue suficiente.... Gracias por las rosas, en serio, pero olvídate de mí.

—Y-yo sé que lo hice mal, pero... Te prometo que todo estaba preparado, no quise...besarlo.

—No, quisiste hacerme daño. Te perdone una vez, dos, tres ya no, Billie.

Cecilia asintió y me rodeo por la cintura — respeta su decisión.

Billie se veía casi incapaz de hablar, moviendo nerviosamente sus labios, sus ojos océano me suplicaron con la mirada.

—____________... Por favor. Solo una oportunidad más... S-si quieres me arrodilló.

—¿Que? No-no, no te arrodilles, levanta — trate de detenerla, no funcionó. Se arrodilló ante mí con los ojos llorosos.

Y joder que costaba mantenerse firme, pero ella me había daño antes, no podía permitírselo de nuevo. Tomé la mano de Cecilia y dije lo primero que se me vino a la cabeza.

—Estamos saliendo.

Cecilia casi abrió la boca de la sorpresa, pero se dio cuenta de lo que yo trataba de hacer y asintió.

—¿...eh?— Billie intercalo la mirada entre nosotras dos —¿Desde cuándo?

—Ayer. Simplemente ocurrió.

Ella se levantó, asintió cabizbaja y se fue con los hombros caídos. Me dio pena y sentí culpa, si.

Pero no pensaba perdonarla de nuevo.

Y se lo merecía.

—___________...

—Gracias por seguirme el rollo.

Iba a apartarme, pero entonces Cecilia me sostuvo de las muñecas, y, antes de que pudiera reaccionar: me beso, haciendo que me quedara congelada.

—Que demonios...— murmuré cuando se separó. No respondí a su beso, primero porque estaba sorprendida, segundo porque...

Era Cecilia, mi amiga, no me gustaba y no entendía que estaba pasando.

—Joder, __________, lo siento, me llevas gustando un tiempo y me di cuenta ayer cuando estábamos hablando juntas en la playa... De lo mucho que quería que te fijaras en mí, y no en Billie.

Me quedé mirándola incrédula, antes de carraspear y hablar.

—Cecilia yo no quiero que confundas las cosas... Siempre te he visto como mi amiga, y te agradezco que hayas estado para mí en mis malos momentos pero... Siquiera he superado lo que ha estado pasando con Billie, y tú... A ti solo te veo como mi amiga. Lo siento mucho.

Cecilia asintió nerviosa y no dijo nada, solo salió disparada de la cafetería. Me frote los ojos.

¿Que mierda le estaba pasando a mi vida amorosa?

— mejor sigo trabajando.

─˚ஜﾟ─

Salí de allí y me sentí completamente sola, ya no podía mensajear ni llamar a Billie, con Cecilia ahora mismo no sé qué va a pasar, y Sarah no está para hablar con nadie.

—Pff.... — suspiré y me gire hacia la pared.

Podría intentar pasar un rato con mis padres, pero siempre están discutiendo y amargados desde la muerte de Matheo.

─˚ஜﾟ─

Eran las 3:45 de la madrugada y no encontre nada mejor que desarmar mi habitación de arriba a abajo. Hasta que encontré algo interesante, que yo no recordaba haber dejado colocado aquí.