Sinopsis:
Las estrellas recorren el cielo nocturno, y son bellas a la vez que interesantes. Dos de ellas descenderían del espacio exterior, a 500 años de diferencia. La última aterrizaría en un bosque, de Monstantd.
Un chico rubio, de ojos dorados...
(Créditos a hitoyuki_00. En fin a darle, a ver que sale... jajaja, ¿Quién dijo eso? debería tomar pastillas para la esquizo.)
—Vas a atacar o solo a mirar rubiecita, adelante estoy esperando —La peli negra mira con cierta sonrisa pícara al muchacho, que en un arrebato de ira intenta atacarla más esta esquiva cada estocada de su espada como si no fuese nada —¿Es eso todo? eres decepcionante, esperaba más de ti.
(Créditos a kizuku_vii)
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—¡No me subestimes, aun puedo pelear! —Aether con la rabia en su corazón realiza varios tajos de espada contra Scaramouche, que en un momento agarra el filo del arma con su mano desnuda sin sangrar.
—¿Q-qué? —Aprovechando el desconcierto del rubio, la fémina tira del arma para después al tenerla en posesión arrojarla lejos. Con su actitud divertida esta da algunos pasos hacia él que retrocede en miedo —Soy una marioneta, contraria a ti yo no sangró, yo no siento, yo estoy vacía y me llena la batalla, lucha o muere es lo único ahora.
—g-gh, a-agh, eres un monstruo, p-pero... yo soy uno igual —Levantando los puños al nivel de su rostro, se prepara para una batalla cuerpo a cuerpo. Su rival realiza el mismo movimiento comenzando un combate cercano donde la última golpea los hombros y pecho del chico rápidamente, cayendo sobre su trasero este toca su abdomen como lo frota algo preocupado —Tus ataques no me hacen nada, ríndete y quizás solo te de una paliza. ¿Porqué te preocupa tu abdomen? Oh ya veo, estas en ese estado... voy a ir al infierno jaja.
—"... Amigo, o sacas la segunda cola o nada bonito nos esperará."
—E-en ese caso... e-es todo o nada, por favor funciona —Jadeante el chico muerde su mano derecha, y en resultado una segunda marca de cola aparece en la palma de su mano. Una sensación de hormigueo recorre su cuerpo que le hace parpadear antes de ponerse de pie de nuevo con un coraje que había perdido —Tienes razón irás al infierno, ¡porque yo te mandaré allí!
Abalanzándose ambos contra el otro tras el grito del rubio entran en un intercambio de puñetazos, con sus nudillos y puños encontrándose por cada golpe. Siendo una batalla donde choque tras choque ninguno golpeaba al otro realmente, los ojos dorados del muchacho siguiendo veloces cada ataque de su enemiga.
La peli azabache alza su antebrazo para empujarlo hacia adelante chocando con el antebrazo opuesto del otro, la mirada de los dos se cruza —¿Copias mis movimientos? muy astuto, veamos si eso sigue ayudándote —Con un salto hacia atrás tomando distancia esta embiste con un puñetazo al rostro que no llego al retraer su brazo, y en un destello aparece detrás con una patada a la espalda más al ver voltear al rubio.
(Créditos a moiredandan)
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