Salí del hospital, entre en casa justo acababa de cerrar la puerta cuando esta se volvió a abrir de manera brusca lo que me asustó.
Era Fernando, lo traía su chofer al parecer venía ebrio no me interesaba la verdad hasta que levanto un poco el rostro alguien lo había golpeado le pregunté al chófer
-Que le pasó
-Tuvo una pelea en el bar señorita
-Mi esposa es doctora llámela por favor- dijo Fernando al parecer no tenía idea de donde estaba
-Que hago con el ?- Me pregunto el chófer
-No lo sé, No es mi problema- Intente irme pero algo en mi me lo impidió me maldije amí misma y gire de nuevo- Póngalo en el sofá ya regreso
Fui a buscar el botiquín al llegar a la sala Fernando estaba sentado en un sofá individual me acerque a él, abrí el botiquín cuando estaba por curar una herida en su ceja este abrió los ojos de repente cruzamos miradas
-Qué bonita
-Estas ebrio- Limpie su ceja y este movió el rostro para evitarlo, lo tomé de la barbilla para que me viera de nuevo – Puedes quedarte quieto
_Es que eso duele
-Lo sé, si no hubieses sido tan idiota para meterte en una pelea no estarías así ahora déjame hacer mi trabajo
Seguí curando sus heridas y Fernando se quejaba estábamos muy cerca yo estaba inclinada frente a él y el en el sofá, sentí que Fernando me abrazo y por la cintura me detuve en el acto
-Que estás haciendo Fernando?
-Siéntate, no estas cómoda
-Así estoy bien
-Vamos Isabella no muerdo- me jalo y caí en sus piernas
Me apure con lo que estaba haciendo
–Listo- intente pararme pero Fernando no me lo permitió –Ahora que
-Puedes ayudarme a llegar a mi habitación
-Voy a llamar a Teo
-Es tarde, solo necesito que me ayudes un poco
-Está bien
Me pare y lo ayude a pararse el se apoyo en mis hombros no puso todo su peso sobre mí, pero sentí que se apoyo dimos unos pasos antes de caer el uno de los sofás grande
-Fernando si quieres que te ayude trata de mantenerte en pie- no me contestó
Levante la vista y este pareció haberse quedado dormido, intente levantarme pero este me abrazo y no me lo permitió
-Espera solo estoy un poco mareado- al fin respondió
-Eres un fastidioso, aparte de curarte tengo que soportar tu borrachera
-Ten paciencia me golpearon por tu culpa
-Y yo que tuve que ver
-Eres demasiado bonita, mis amigos me dijeron cosas desagradables por eso
No entendí a que se refería. Me pare
-Fernando duerme aquí, yo estoy cansada
Iba a irme este me jalo de la mano y me hizo caer de nuevo se coloco de lado y coloco una de sus piernas sobre las mías mientras me abrazaba
-Hueles muy bien me gusta tu perfume- dijo mientras escondía su rostro en mi cuello
-Fernando suéltame
