Mundos opuestos

Epílogo

Luego de que Lúa naciera y pudiera volver a casa, Emilio cumplió lo que les había dicho a los papás del menor, entregó los casinos y ciertos hoteles que le pertenecían a Jorge. Emilio había delegado Athena y Colmena a ciertos trabajadores de confianza y que se hacían cargo cuando él estaba en casa con su familia.

Abre la boca -dice Joaquín intentando que Lúa pueda comer una papilla- aquí viene el avioncito -mueve la cuchara para que la niña pueda comer la cual no abre la boca y mueve su cabeza- amor tienes que comer -la niña solo lo mira- eres igual de terca que tu padre

Supongo que te refieres a ti -dice Emilio entrando a la cocina donde el menor está con la bebé-

-lo ve y sonríe- sí claro, yo soy el terco

Si -le da un beso en la cabeza y ve a su hija para luego ver al menor- tiene 7 meses no creo que sea necesario que aún coma, el médico dijo que puede seguir con leche

Si amor, pero igual necesita tener otros nutrientes -lo ve- intenta tú - se levanta y deja a cargo al mayor-

No creo que sea tan difícil -se sienta y toma la cuchara para comenzar a intentar darle de comer a la niña- haber amor, abre la boquita para papi -acerca la cuchara a la mejor la cual de inmediato abre la boca- eso amor -ve a su novio- te dije que no era tan difícil -la niña cierra su boca y al segundo escupe todo en la cara del castaño-

Tienes un don amor -lo ve y luego ríe al ver como su hija le escupe la comida- si claro, nada difícil -no deja de reír y toma un paño para limpiar la cara del castaño-

-cierra los ojos y suspira- es igual a ti, me queda duda -se deja limpiar por el menor-

Yo nunca te he escupido -sonríe y termina de limpiar la cara del contrario-

No, pero juegas con mis sentimientos-abre los ojos- me haces sentir que hice algo bien para luego escupir tu veneno -sonríe-

¿Veneno? -alza una ceja- tengo una bebé y no dudaré en usarla -ríe leve-

También es mía -lo atrae por la cintura para sentarlo en sus piernas-

-sonríe y se deja hacer- ¿qué tramas? -lo ve manteniendo su sonrisa-

-niega- nada -lo ve- te amo mucho

-frunce el ceño- ¿qué pasa?

Nada amor -le sonríe- solo quería decirte que te amo y que me encanta estar formando una familia contigo

-entrecierra los ojos- Osorio Marcos, que hiciste ahora -suspira-

-ríe negando- nada amor, te juro que nada -suspira- me iré a lavar la cara que siento que huelo a vomito de bebé

-ríe y se levanta de las piernas del mayor- Lúa no te vomitó, solo te escupió comida -lo ve- pero si hueles feo

Bésame -estira sus labios-

Lávate primero -lo ve- amor, lo siento pero no te besaré mientras huelas a comida de bebé

Malo -le da una nalgada y se retira de la cocina en dirección al baño-

Ay -sonríe y se vuelve a sentar para intentar que la bebé coma algo-

Hola princesa -dice Jhon entenado a la cocina-

Al fin llegó mi salvador -dice el menor viendo al recién llegado-

-frunce el ceño- ¿qué pasó?

Por favor intenta darle de comer a Lúa, conmigo no come y a Emilio le escupió la comida -lo ve- por favor

Y si me escupe a mí también -lo ve y luego ve a la niña que lo observa y sonríe- pero por ella hago cualquier cosa