05. 𝙎𝙋𝙀𝘾𝙄𝘼𝙇 𝘽𝙄𝙍𝙏𝙃𝘿𝘼𝙔

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10 de noviembre, 2020.
Monte-carlo, Mónaco.

Durante estos meses las cosas habían cambiado y sin duda, todas eran para mejor.

Olivia (con algo de ayuda de Alexandra) logro su objetivo de llegar a su peso ideal, lo cual le había costado demasiado. Pero estaba segura que ahora no lo dejaría.

Era una de esas alumnas reconocidas por su excelente desempeño académico, lo que muchas veces, era envidiado por ciertas personas que alegaban que se debía por su apellido.

Alexandra y Olivia se habían convertido inseparables, encontrando un lugar seguro en la otra.

Max extrañaba a su bebé y se aseguraba de llamarle todos los días para saber acerca de su día y de sus progresos en sus clases, aunque cada semana la directora de su área le enviara un reporte con dichos avances.

Después de dos semanas de su llegada a Mónaco, Charles y Olivia se conocieron. Llevándose de buena manera al comienzo, hasta que comenzaron a competir por quien pasaba más tiempo con Alex.

Y claro, hasta que la menor de los Verstappen se había convertido en el mal tercio de dicha relación por no tener más amigos que le agradaran tan bien como Alexandra.

Mientras que con el británico que después de solo dos días de marear a Daniel Ricciardo, la llamo, las cosas iban increíbles a su parecer.

La manera de confirmar que jamás sería fácil deshacerse u olvidar al otro se había hecho presente en varias ocasiones a lo lago de los meses que pasaron.

Claramente podían haber días en los que no hablaban para nada, pero se encontraban tranquilos de saber que siempre podrían volver al otro.

Parecían completamente destinados a estar juntos.

—¿Estas seguro que no puedes venir a la cena, Lando?—pregunto esperando que fuera una broma de mal gusto.

Habían prometido verse el día del cumpleaños de ambos, pues, la menor había organizado una pequeña cena en el departamento por fuera de la residencia que tenia con Alexandra.

A pesar de su promesa, ahí estaba él, diciendole que las cosas se habían complicado.

—Se que te lo prometí, corazón. Pero necesitan que revise con el equipo unas estrategias que no pueden esperar más.—explicó una vez más.

—Hiciste una pinky promesa, Lando Norris.—recordó sintiéndose decepcionada de que él no pudiera asistir.

Sin embargo, entendía que no estaba en sus manos.

𝘾𝙊𝙉𝙎𝙀𝙅𝙊 𝘿𝙀 𝘼𝙈𝙊𝙍 | 𝙇𝙉⁴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora