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Shen Yuan estaba cansado, no físicamente, si no de manera mental, se sentía agotado de solo pensar, su cabeza no dejaba de dar vueltas y recordar cosas que no tenían importancia ya.

Luo Binghe lo abrazo más cerca de su corazón, estaban en recostados en la cama, con una manta de seda de araña cubriendolos de la noche. Shen Qingqiu recordaba la forma tan vergonzosa con la que actuó esa tarde con su esposo, pero no tenía nada de ganas de dejarlo ir.

Después de doce años viviendo en ese mundo, después de tantas cosas que ha pasado, hecho o presenciado, su mente al fin le estaba pasando factura.

Es como si no pudiera evitar más las preguntas que se había hecho y dejo para después el día que llegó.

¿Su familia lo extrañaba?

¿Cuanto tiempo paso para que su familia superará su muerte?

Tal vez siguen de luto, o quizás solo lloraron una semana antes de seguir con sus vidas.

¿Su madre consiguió el contrato que estaba buscando? Probablemente, ella siempre obtenida lo que quería.

¿Su padre dejó de fumar como había prometido? Tal vez no, no era la primera vez que prometía eso.

¿Su Da-ge le propuso matrimonio a su novia? No cree, su hermano estaba muy indeciso.

¿Qué hay de su Er-ge? ¿Al fin obtuvo su licencia? Quien sabe, tal vez la cuarta fue la vencida.

¿Y que me dicen de su Meimei? ¿Cumplió su sueño de ser famosa? Seguramente, se parecía a mamá, conseguía todo lo que se proponía.

Sintió como Binghe se movía pero no lo dejo escapar, se pesco fuertemente a su cuerpo.

— No te vayas - si voz salió débil pero no quería estar solo, no quería quedarse a solas con sus pensamientos, no le importaba si era OOC, era lo que necesitaba en ese momento

— No lo haré, no me voy a ir - Luo Binghe acomodó mejor su posición para encajar plenamente en el abrazo.

El calor de su esposo comenzaba a tranquilizarlo, las caricias en su cabello lo arrullaban poco a poco hasta que sus ojos se cerraron y se quedo dormido.

Cuando sus sueños empezaron a amenazar con volverse pesadillas, la energía de su esposo las tranquilizó hasta dejar su mente en un hermoso prado y ahí fue cuando pudo descansar.

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Algo pasaba con su esposo, cualquiera lo podía notar, había algo que lo lastimaba que lo hacía sentir mal, pero no sabía que.

Lo ha estado notando desde tiempo atrás, inicio con breves momentos en los que se perdía en su mente, luego comenzó a descuidar su alimentación, tenía que recordarle que tenía que comer algo más que dulces, y ahora tenía lapsos en los que se mostraba vulnerable.

Sea lo que sea, todo comenzó el día que encontró a su Shizun con aquellas cosas extrañas en su cabaña de bambu.

Sea lo que sea lo estaba lastimando.

Y sea lo que sea, Luo Binghe estará dispuesto a luchar contra ello para proteger a su esposo.

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Volvieron a Cang Qiong, Luo Binghe dijo que era más cómodo para ambos y Shen Qingqiu lo acepto sin reclamos, dar clases lo distraía.

Desde que se volvió Shen Qingqiu, Shen Yuan no ha participado en ninguna selección de discípulos, aunque se hacen cada pocos años, casualmente cada que ocurren algo le pasa a él y no participa, aunque no se niega a aceptar discípulos nuevos si se lo piden.

Los discípulos más jóvenes que tiene son algunos niños que van llegando poco a poco, que por casualidad llega a encontrar en las calles o que se unen por alguna conexión, incluso aquellos que llegaron por cuenta propia a la cima son aceptados.

Así que si hay algunos jóvenes que aún necesitan de su maestro y sus discípulos mayores siempre están dispuestos a recibir alguna clase de su parte.

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