Curita para el corazón

06

La ansiedad podía ser visible en él, los malos tratos y las palabras ofensivas casaron una vez que regresó a la universidad luego de haber sido internado en el hospital.

Sentía las miradas feroces, pero nadie se atrevía a molestarlo.

Un pequeño suspiro escapó de él, movió hábilmente su mano redactando un ensayo para la siguiente clase, con su mano libre sostenía un jugo de frutas que bebía con ayuda de un sorbete.

Las palabras fluían en sus pensamientos eran interrumpidas por aquel rostro varonil, aquel embriagador aroma, aquella profunda voz que llamaba tan lindo su nombre.

"Bible"

-¡Bible! -un pequeño golpecito lo sacó de su ensoñación. Su mirada viajó al intruso. -¿Qué tanto piensas? Llevó horas llamándote. -exageró Bas mientras tomaba lugar frente al pelinegro.

-Eh... Solo escribo... Tarea-señaló con obviedad en su voz.

La mirada del mayor cayó en la hoja perfectamente cuidada, su miraba captó algo muy interesante en ella y una sonrisa maliciosa escapó dejando ver sus futuras intenciones al contrario, Bible lo miró sin entender que pasaba por la mente de su amigo.

-Oh~, no sabía que "Bible Tilapornputt", es un... -sus palabras quedaron suspendidas en el aire, su pequeño amigo miró con horror su hoja; rió con ganas al ver la reacción del chico.

-Eres un imbécil. -habló bajito, lo suficiente para ser escuchado por el mayor, quien solamente soltó una carcajada.

Bible no había escrito nada raro, solo le quiso jugar una broma.

[💔]

«Vamos al cine, yo invito»

Jes se comunicó con él, aquellas palabras no fueron una simple invitación, más bien, fueron una orden y Bible no supo cómo negarse ante sus palabras.

Sus pasos seguían las pisadas de sus amigos, animadamente hacían planes para ir a comer en un local de comida tradicional, Job alagaba descaradamente a Bas para que éste pagara sin negarse ante la imposición, Jeff se limitaba a apoyar al hijo de la doctora.

Su mente buscaba maneras de librarse de ellos sin mencionar al mayor, no quería dar explicaciones porque no tenía idea de que decir, pero tampoco quería mentir.

-¿Estás de acuerdo con ello, Bible? -preguntó Jeff mientras detenían sus pasos y miraban al menor.

Bible quien mantenía su mirada en el piso, alzó su mirada con lentitud temiendo ver a los ojos a sus amigos; estaban en la salida, su corazón latía más fuerte por los nervios de ser descubierto.

-Oigan. -comenzó a hablar, su mano derecha picaba un poco.

Sus palabras quedaron atoradas por el escándalo que varios chicos comenzaron, interesados por saber la razón, caminaron juntos más allá de la salida, viendo la multitud de chicas y chicos ver con emoción a un punto específico.

-¿Qué mierda hace el doctor Jes aquí? -habló Job mirando el automóvil color negro, tan familiar del médico.

-¿Cómo sabes que es el doctor? -preguntó Bas cruzando sus brazos sobre su pecho mientras miraba al alto.

Jeff miraba con diversión la escena; Bible no sabía cómo reaccionar.

Y como si de un idol se tratase, Jespipat Tilapornputt salió de su vehículo alterando los corazones de varios presentes, su mirada buscando a cierto lindo chico.

"¡Es el doctor Jes!"

"¡Es tan guapo!"

"¿Qué hace aquí?"

"¿Vino a buscar a su novia?"

Eso último retumbó en las entrañas de Sumettikul, las personas esperaban ver al apuesto médico de la mano con una bella dama, no con... Él.

Rápidamente ideo un plan, si escapaba en esos momentos podría poner de escusa que no se sentía bien y que en otro momento podrían verse, sin embargo, sus miradas chocaron como un imán, la picazón en su mano se sintió más presente.

-¡Oh! Está viniendo a nosotros. -mencionó Job mirando la determinación en los pasos del mayor.

-No. -habló Jeff. -Está viniendo hacia Bible. -dijo mientras observaba los movimientos de Jes.

Bas chilló de la emoción, tomando del brazo a sus amigos, dando un paso hacia atrás.

-Bible. -saludó el mayor con una sonrisa, al sentir unas afiladas miradas sobre él, giró un poco su cuello y saludó con timidez a los amigos del nombrado. -Hola chicos, ¿cómo están?

Los "lobos feroces" de Jeff y Job lo miraban con atención sin parpadear, Bas por su parte sonrió ampliamente y saludó al mayor.

-Doctor, es un gusto volver a verle. -miró rápidamente a Bible quien apartó la mirada, luego regresó su atención al mayor. -Nos encontramos muy bien, ¿verdad? -pellizcó disimuladamente a sus amigos quienes asistieron rápidamente ante las palabras del chico. -Pero dígame, ¿qué le trae a está humilde universidad, lejos de su trabajo?

Si las miradas fueran un arma mortal, Bas posiblemente estaría muerto a manos de los bonitos ojos de Bible.

-Eh~ -Jes miró al chico a su lado y luego a los amigos de éste. -Pasaba por aquí... Y, bueno. -aclaró su garganta. -¿Quieren ir a comer? Yo invito.

Y con esas palabras, los "lobos feroces" regresaron a sus cuevas con la cola enroscada.

Una gran parte del alumnado presenció como Bible subía al lujoso auto del médico y a pesar de que no fueron solo ellos dos, los rumores distorcionarian la verdad de lo acontecido.

[💔]

-¡Estoy muy lleno! -gritó Job mientras acariciaba su abdomen, Bas le dió un manotazo en la zona. -¡Oye!

Bible sentía pena por su amigo,
Sentía pena por él mismo.

Su pequeña cita con Jes se convirtió en una salida grupal y definitivamente el ir al cine con aquellos personajes no sería buena idea.

-¿Ahora a dónde nos llevará doctor? -preguntó Job sin pena alguna.

-No seas grosero, no sabes si el doctor está ocupado o no. -regañó Jeff.

Y una peña discusión de formó entre ellos, donde la palabra "doctor" destacó.

-Si dejan de llamarme doctor-las palabras del mayor captaron su atención deteniendo su intercambio de ofensas. -, los llevaré con gusto a dónde quieran.

-Sí, Jes. -hablaron en forma militar.

Bible se recordó porque es amigo de esos dos y porque sigue estando con ellos.

[💔]

-No hay nada mejor que las ferias. -mencionó Bas mirando a su alrededor.

Los demás estaban de acuerdo con ello. Ir a la feria y disfrutar libremente de los juegos y comidas era un plan perfecto...

"Una cita perfecta"

Un leve sonrojo adornó sus mejillas al imaginar una cita con aquel hombre atractivo a su lado, solo ellos dos y nada más.

-Bien, una carrera hasta la Casa de Espejos. -prpuso Jeff y sin pensarlo dos veces, el grupo corrió tratando de ganar el primer lugar.

Una noche inolvidable se acercaba,
Un grupo de chicos competitivos en acción,
Un corazón latiente con la esperanza de ser tomado y,
Una cajita de cristal lista para cuidar con delicadeza el frágil contenido.