Naruto X RWBY {REMNANT'S MAELSTROM SHINOBI} - LIBRO II y III (REMAKE)

Capítulo 50: El resonar de un nuevo mañana

Hola, chicos todos los derechos al autor original del primer libro de esta obra MothBallz; a la serie Naruto y Rwby; este es una secuela hecha por un fan, esperando que esta historia les haga pasar un buen momento en este breve tiempo:

Tyrian recobró la consciencia con un zumbido agudo en los oídos. Su cuerpo, entumecido por el impacto, no le respondía de inmediato, y un dolor punzante le atravesaba la zona del vientre, solo pudiendo recordar el sentir un fuerte dolor en su pecho antes de que todo fuera envuelto en oscuridad.

El hombre parpadeó varias veces, tratando de ajustar su visión en medio de la oscuridad apenas interrumpida por las luces parpadeantes que se filtraban desde las ventanas rotas en la habitación desordenada.

Trató de moverse, pero sintió sus brazos y piernas atados. El frío contacto del metal en sus muñecas le hizo darse cuenta de su situación: estaba inmovilizado en una de las pocas sillas que aún no habían sido destruidas en la oficina de una de las hermanas traficantes de Dust. El olor a humo, metal y polvo quemado aún persistía en el aire, resultado de la devastación que se había desatado en el puerto.

Tyrian hizo un esfuerzo por levantar la cabeza, y ahí estaba para su desgracia del seguidor más fiel de Salem, la reina de los Grimms.

Una figura alta, envuelta en sombras, lo observaba con una mirada que brillaba desde la penumbra. A pesar de la oscuridad, no tuvo que esforzarse mucho para reconocer esa silueta. Era él. El cazador de Negro, la figura temida en los bajos mundos, un nombre que viajaba en susurros entre los más oscuros rincones del inframundo.

Un temblor involuntario recorrió su cuerpo. Tyrian, normalmente un hombre sin miedo y fiel seguidor de Salem sintió cómo la punta helada del pavor se deslizaba por su espina dorsal. Trató de recordar lo que había sucedido antes de quedar inconsciente: había subestimado a esos jóvenes.

Había sido tan arrogante, tan seguro de que no serían rivales para él... hasta que en un abrir y cerrar de ojos, todo se vino abajo cuando reconoció a la figura legendaria del Cazador de Negro. Ahora que lo pensaba mejor recordó una platica de su Diosa sobre de que trataran de evitar al cazador emblemático por su propio bien.

"Despierta, Tyrian", dijo la figura con una voz profunda y cortante. Su tono estaba cargado de autoridad y amenaza para tener su atención.

Naruto, envuelto en la apariencia del cazador de Negro, se acercó un paso más, haciendo crujir el suelo bajo sus pies. Tyrian forzó una sonrisa torcida, tratando de recuperar su compostura. A pesar de la situación, su naturaleza caótica no podía evitar un comentario mordaz a sabiendas de que podría lamentarse posteriormente.

"Ah, el cazador de Negro en persona...", murmuró Tyrian, su voz aunque goteando veneno no pudo disimular el temblor en su cuerpo y mirada tan solo por su presencia.

"Supongo que no pude haber esperado una mejor audiencia. Estoy seguro de que Salem estará más que contenta de llevarte ante ella", a pesar de la amenaza en su comentario está carecía de toda confianza debido a su posición actual.

En cambio, Naruto con su rostro cubierto por la máscara no respondió de inmediato. Su figura, completamente cubierta de sombras y con su característica capa negra que ondeaba ligeramente, parecía un espectro salido de una pesadilla. La presión en la habitación aumentaba con cada segundo que pasaba.

Tyrian podía sentirlo, esa aura abrumadora de poder y experiencia. No era como con los cazadores comunes. Esto era algo mucho más peligroso, tanto así que Salem no se andaba con juegos al momento de planificar sus estrategias.

Aun permaneciendo firme, con los brazos cruzados. Finalmente habló, su voz helada perforando la poca confianza que quedaba en Tyrian:

"Habla, Tyrian. ¿Qué hacía alguien como tú en este lugar? No eres exactamente un mercenario corriente. ¿Qué quieres con estas organizaciones?", decidió por preguntar por los más obvio antes de ir a la pregunta que le importaba.