Levi siempre había sido increíblemente inteligente desde pequeño, la escuela jamás significo ningún problema, era alguien autodidacta que disfrutaba de investigar los temas por su cuenta, aprenderlos y después poner en práctica lo que aprendía. Al inicio, esto le parecía algo de lo más interesante a Erwin, que siempre iba detrás de él, observando cómo es que Levi parecía moverse con una facilidad increíble entre números, formulas, frases, idiomas y demás contenidos académicos. Incluso considero asombroso el primer volcán que construyo con sus propias manos, utilizando objetos de la cocina y del taller de su tío, no solo haciendo una combinación de sustancias, si no también creando un sistema eléctrico que provocara que pareciera que el volcán de verdad escupía lava.
Ese tipo de cosas los adultos tendían a admirarlas y aplaudirlas, adularlas y revolver los mechones de cabello diciendo algo como: "De seguro lo heredo de ti." Con voces agraciadas. Claro, más tarde esa frase podría ser tanto un halago como un insulto.
Desgraciadamente, los adultos amaban y preferían más la sumisión antes que la inteligencia. Y Levi podía ser todo lo inteligente que pudiera, pero de dócil no tenía ni el polvo de las uñas. Así que el favor de los adultos le duro muy poco tiempo, haciendo que la inteligencia se volviera en su contra. Entre más leía y comprendía de los temas, más encontraba la vena sensible para cuestionar el raciocinio que los adultos usaban para tratar los asuntos importantes, entonces siempre entraba en discusión con ellos, haciéndoles preguntas que los ofendía, contradiciendo sus opiniones y alzando la voz en desacuerdo.
Erwin aprendió entonces que la inteligencia no lo era todo. Saber manejar a las personas y leer su temperamento lo era. De esa manera, llegar a su punto importante y fingir que eras obediente, siempre sería algo que provocaría le dieran lo que quería.
El tema entre ellos iba mucho más allá de solo Mikasa y el matrimonio arreglado (algo que sin duda odiaba con toda su alma), sino más bien, su forma de ver las cosas. Levi era agresivo, rebelde, anarquista y nunca se quedaba callado, cuestionaba todo a su alrededor, analítico y muy minucioso, nunca dejaba escapar algo con lo que podría debatir, y aunque Erwin también tendía a ser analítico, él sabía cuándo debía hablar, disfrazaba las palabras y evitaba meterse en problemas con los adultos, así conseguía lo que quería, teniendo un alto perfil. Al principio, Erwin había intentado aclarar las cosas con Levi, llevar la fiesta en paz, tener un acuerdo mutuo de beneficios, después de todo, tener a alguien tan inteligente a su lado nunca sería una desventaja, pero al verse totalmente indispuesto a colaborar, no tuvo otra opción que intentar deshacerse de él. Tener a alguien tan inteligente nunca era una desventaja, solo si estaba en su equipo, pero si era un enemigo, en realidad terminaba por ser un problema que había que erradicar desde la raíz.
Los requisitos indispensables para ser presidente del consejo académico y representante del alumnado eran solo dos: Estar dentro del top 3 de la clasificatoria global de calificaciones y tener un puntaje personal casi perfecto. (El puntaje personal se basa en virtudes, conducta y habilidades extracurriculares como artes, lenguas y deportes) Y para cuando ambos pasaron a preparatoria, cumplían a la perfección esos requisitos. Sin embargo, Levi siempre fue el candidato preferido para el puesto, según los profesores, era alguien que sabía resolver conflictos, entendía casi a la perfección los problemas del alumnado, tenía un lenguaje limpio y una comunicación tacita y claro, sus calificaciones eran más que un ejemplo a seguir.
En especial, tenía el favor del director general, Dot Pixis, que admiraba al chico, esa rebeldía iba más allá de la adolescencia, siempre ponía en duda lo que le decían y era algo que no todos podían apreciar como una virtud. Así que, durante el primer año, Levi represento a la escuela en más de un concurso académico, alzando el nombre del instituto como uno de los mejores. Debates, ortografía, deletreo, química, física, matemáticas, tecnología, lenguas, no importaba la materia, Levi siempre se las arreglaría para obtener el primer lugar y barrer a sus contrincantes con apenas el mínimo esfuerzo. Sería el representante estudiantil más destacado.

ESTÁS LEYENDO
La melancolía de Plutón.
Fanfic¿Cómo se podría definir el amor si no? Comprender un concepto tan complicado como el amor podría depender más de la gente a nuestro alrededor que de nosotros mismos. riren. Levi x Eren.