El peso del poder, la sangre y el destino (Gojoxoc)

capítulo 16

Se dirigió a su salon en busca de los chicos, los cinco se encontraban en un salón hablando con el maestro Yaga. Parecían enojados.

Miró a todos con su expresión seria -¿Qué ocurrió?- dudaba que fuera algo bueno.

-nada realmente, despidieron a un supuesto encardo de los asistentes que era el responsable de este asunto, pero todos sabemos que no es cierto- Nanami observó a la rubia incrédulo, era sorprendente como había previsto todo lo que ocurriría.

-dijeron que compensarán a los alumnos, ya que afectaron a una heredera de un clan- Lea quería reirse, la situación era absurda, pero no lo hizo, se mantuvo seria.

-le informamos a tu padre, dijo que te contactes con él lo mas pronto posible-

-creí que tu padre había muerto- todos a excepción de Satoru y Yaga quedaron confundidos.

-el que llama ahora es mi padrastro, líder del clan y esposo de mi madre, pero le trato como padre- tomó su celular -luego los veo- se despidió para realizar la llamada en un lugar privado.

Llamo al número que se encontraba primero en su lista de contactos, tras preguntar si se encontraba bien y confirmar su buen estado de salud, Taro quiso saber que pasó -aclárame con tus propias palabras la situación, por favor- tras contar todo, el líder se tomó unos segundos para hablar -es una oportunidad de oro. Hiciste las cosas excelente, quedaste como una heroína que salvó a sus compañeros- podía notar toda la euforia en la voz de Taro -Debemos aprovecharlo, si te ofrecen compensación monetaria, rechazala-

-¿puedo saber el porqué?-

-no del todo, te daré la explicación completa cara a cara- tras algunas explicaciones del plan de Taro, Lea sabía exactamente que hacer, solo esperaba que sus compañeros no se decepcionen de ella. Debería explicarles después su situación delicada.

El resto del día se la pasó descansando y viendo televisión, atenta al llamado de los altos mandos, el cuál llegó a la mañana siguiente. Aprovechando que su uniforme nuevo todavía no estaba listo, se vistió de forma elegante con un vestido blanco, tapó su cicatriz con maquillaje, debía lucir angelical, debía verse como alguien muy noble, una blanca paloma.

En la entrada de una gran sala la esperaban sus amigos, antes de ingresar les dijo que pase lo que confiaran en ella, después se los explicaría. Si entender bien de que se trataba asintieron, los tres ingresaron, hablarían directamente con los altos mandos.

La sala era completamente oscura todos se encontraban detrás de unas paredes de papel, cubrían su identidad, Lea no entendía el porqué, pero de todas formas no le importaba.

Pronto se escuchó una voz a su izquierda -los trajimos aquí por el escándalo que se armó, luego de su misión. Me parece que ninguno de los tres a entendido que al aceptar este trabajo aceptan arriesgar su vida en nombre de la humanidad-

El primero en responder fue Kento -eso lo entendemos, lo que no entendemos fue la necesidad de mandarnos a matar, no era una misión apta para nosotros-

-nadie niega que se cometió un error grave, la persona que lo cometió ya fue despedida-

-¿no fue ejecutada?- las palabras de Lea solo fueron para comprobar la verdadera culpabilidad de la persona, después de todo si dicha persona fue la que cometió el error debía ser ejecutada -digo, siempre se habla de la escasez de hechiceros, y ahora una persona iba a permitir que mueran dos, lo considero un delito grave-

-dado el tiempo que aporto su ayuda, se le dio clemencia, pero si tú lo deseas puedes matarlo, tienes experiencia tomando justicia de esa forma- Lea no actuó avergonzada como anteriormente hizo, permaneció sería, mas no enojada.