ᴄᴀᴘÍᴛᴜʟᴏ 14

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                                                                                   Capítulo 14

Acomodé mis anteojos -sin aumento, claramente- y saqué la llave de la mochila de Casey y, temblorosa, quise colocarla en la cerradura, pero fallé. Maldita sea, ¡concéntrate! es tu primera acción y ya fallas, ¡estúpida!

¡Bien, lo logré! Un pequeño living acogedor, televisión prendida transmitiendo hockey sobre hielo, olor a coco y vainilla. En podía verse parte de la cocina, alguien estaba fregando los trastes, su silueta...

Recordé las palabras de Luca: "-Entra y di: "ya llegué, par de idiotas"."

Estaba nerviosa, sentía cosquilleos permanentes en mis pies y manos, como si todo fuese un maldito sueño de mal gusto. Ya no era Malena, ahora... ahora era Casey.

-¿Se puede saber dónde mierda has estado?- un joven muy alto apareció de un momento a otro en el living, vistiendo camisa blanca desaliñada y unos jeans oscuros. Thiago.

"-Recuerda que Casey le dice Tae, él es su pequeña obsesión"

-Hola, Tae- respondo con un leve temblor en la voz. Su presencia era muy similar a la de Till; dominante. Los nervios recorrían cada partecita de mi ser.

-¿Hola Tae?-ríe falsamente- ¡desapareces todo el maldito día y sólo dices "Hola Tae"?

-Lo siento, yo...

-Sácate esa mierda- fue tajante. Creo que hablaba de mi ropa, la que Luca le "regaló" a Casey; compraron dos mudas iguales. Si supiera que la verdadera muda estaba con la verdadera Casey.

"-No te preocupes por las cámaras- habló Alcaráz- colócalas tranquila, con cuidado y estrategia."

-¡Cucaracha rabiosa!- gritan desde la cocina. Mierda. Mierda. Mierda- te preparé unas tartaletas de dulce de leche y frutos secos. ¡Ven a probarlas!- Jonás me miraba dulcemente, parecía embobado de verme y, definitivamente, estaba enamorado de Casey.

"-Ella es muy cariñosa con Jonás, siempre lo abraza y besa en la mejilla"

Tae continuaba taladrándome con sus dos perlas negras enfurecidas y antes de que pudiera regañarme, corrí hacia Jonás y le di un abrazo acompañado de un casto beso en su mejilla. Él desordenó mi cabello y respondió mi beso con uno en la frente. Las emociones resurgieron de las cenizas, dando volteretas como un mono bailarín en busca de atención. Miles de incógnitas aparecían de un segundo a otro, incógnitas que ni siquiera era capaz de resolver; tenía miedo, ésta era la misión más arriesgada jamás tomada y las tartaletas de Jonás no ayudaban a olvidar, sino, a recordar. Esa explosión de sabores tan perfecta...

Nueces, avellanas y castañas tostadas y acarameladas... y mi favorito, el manjar tan preciado: dulce de leche.

Ese bendito dulce que conocí en la mansión de Hartmann. Hartmann... ¿me buscaría para arrancarme el pellejo? ¿Ese momento tan íntimo significó algo para él?

Degusté con tanta ansiedad que las tres tartaletas desaparecieron en pocos minutos. No debes comer demasiado, recuerdalo, Malena. Con ésta mierda ya es más que suficiente.

-Veo que Bonelli no te alimentó anoche- bromeó y me obligué a reír e idear alguna respuesta creativa.

"-Es divertida, no sabe cerrar su boca y eso hace enloquecer a ambos."

-Me quedé con hambre, el postre no fue tan satisfactorio- el doble sentido era el fuerte de Casey, según Luca.

-Tu padre me encargó ayudarte a completar todas tus tareas atrasadas. Cámbiate y regresa aquí- anuncia Thiago desde el umbral de la puerta y desapareció. Qué jodido mal genio.

MALENA [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora