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𝑭𝑨𝑰𝑹𝒀𝑻𝑨𝑳𝑬
𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 5 "𝑴𝒚𝒔𝒕𝒊𝒄𝒂𝒍 𝒄𝒓𝒆𝒂𝒕𝒖𝒓𝒆𝒔"
ENORA
Habían pasado varios días, mi propuesta había sido escuchada. Durante todo este periodo, desde que propuse la idea, se escuchaban las peleas de mis padres desde el pasillo cerca del despacho. Mi madre no estaba de acuerdo, mientras que en mi padre se notaba la desesperación por no saber que más hacer, porque esa fuese la última opción.
Tenían miedo, todos lo teniamos. Pero el miedo nunca ha sido algo favorable ante una situación complicada y en este caso, tampoco lo sería.
Nuestro cerebro llega a colapsar en situaciones como estas, dónde la desesperación y el miedo nos invaden haciendo que nuestra cabeza se llene de malas decisiones con tal de salir de ello.
En este caso era el pueblo, aunque a la vista de cualquiera parecía que todo se encontraba normal, yo sabia que especulaban muchos cosas, corrían rumores llenos de suposiciones de que habrá sido de los niños, pero también todos con una duda ¿Volverá a suceder?
Todo lo relacionado con el bosque era un tema tabú, y eso incluía también la magia. Pero en esta ocasión no importaba, no con tal de descubrir aquel misterio.
-Se acerca una tormenta. - Mencionó mi madre mirando por la ventana mientras seguía cosiendo
-Me imagino que la guardia deberá volver al castillo.
-En efecto.
Y tras varios minutos, los guardías llegaron cabizbajos al salón del rey, dónde, junto a mis padres, esperaba a que nos otorgaran noticias.
-Majestades. - Saludó el general James. - Lamento comunicaros que no ha habido rastro de los niños. - Tras varios segundos de silencio hablé.
-Podrían ir al anochecer. - Solté en respuesta. Mis padres me miraron curiosamente, al igual que los guardías. - Si ellos salen en la noche podría haber huellas o alguna pista que nos ayude.
El general miró a mi padre esperando una respuesta a mi idea, al igual que yo. Tras varios segundos donde el rey pensaba detenidamente mi padre respondió:
-Mañana al anochecer iniciarán partida. - Respondió con voz autoritaria. Mientras en mis adentros sonreía al ver que aceptó mi propuesta.
~°•☆●☆°•~
Peinaba mi blanco cabello con suma delicadeza sin apartar la mirada del espejo mientras tarareaba una melodía. Al lado de mi espejo se encontraba un ramo de violetas con un pequeño papel dónde ponía mi nombre en cursiva. Al verlas por primera vez me encontré con una nota, las flores provenían del príncipe William.
