Cuentos de Afrodita ©

La Flor Perfecta

Hace tiempo que ella no pasaba por aquí, hacia días pero la seguia esperando. Podia recordarla perfectamente. Su cabello rubio y largo, ojos azules y su piel Blanca tipo porcelana.
Pasaba cada mañana a eso de las 7, siempre iba bien vestida y más aun bien peinada.
Se sabía que un campesino como el, no podía aspirar a pedir la Mano fe una joven como ella, su destino era casarse con un príncipe y el de él, si es que tenía suerte, el de casarse con una joven doncella. Como el fue criado sólo por su madre, su aspiración a ser soldado fue opacada, ahora debía estar en guerra aquel que robó el.suspiró de es dulce doncella.
El no era perfecto, pero tenía sus virtudes. Bien quizás no era tan alto y no tenía la piel tan Blanca, pero podía apostar un moneda de oro que era capaz de conquistarla.
Tenía en su mano una vez más una rosa, esperando que ella pasé. Ya lo intentó con otras flores distintas, pero ninguna daba el resultado que el esperaba.
El primer día le dio una Narcisa, y ella creyó que la llamó vanidosa. Enojada le arrojó la flor además de un cruel discurso

-Campesino ¿qué se cree? Es usted un idiota o que, seguro Atenea no la bendijo con la sabiduria. ¿Que no sabe usted que es una ofensa un Narciso?

-Pero es muy hermosa la flor- respondio apenado el campesino

-Estas flores se le da a las vanidosas y no lo niego es muy bella, pero a mi no me gustan- dijo enojada- aquellos que siente amor por uno mismo, demasiado que adoran que todos estén a su alrededor, es ese tipo de mujer quien la merece-se marcho

Luego de 3 días la misma Joven volvió a pasar pero esta vez se tomó más tiempo y le regaló una clavelina roja. Una vez más, la joven se siento algo ofendida

-¡oh por los dioses!¿Cómo regala estas cosas?-dijo mostrándole la flor- una clavelina, es tan deprimente- dijo ella- ¿me considera tan poco? - miró la flor- es una mala copia del clave- arrojó la flor y se marchó

Paso es tiempo, quizás 2 días y una vez más lo intentó. Lo hizo con las Margaritas, quizás, sólo quizás esta vez si le gusten. ¿A quien no le gusta las Margaritas?. Y por primera vez funcionó

-Oh Gracias- sonrio y el campesino se disponía a confesarse,cunado- Me quiere el principe,No me quiere, me quiere, no me quiere- decía quitando los pétalos, el campesino se deprimio un poco- fantástico, estas flores no funcion- dijo arrojandoselas-

-¿Po-porque?- pregunto

-Salio que no me quiere-se marcho

Y aquí estaba como último intento esperando que ella pasé, o al menos eso suponía.
Anoche fue al templo de Afrodita y le dejo regalos. Hablo con Eros y le pidió que lo flecha con su amor verdadero. Eebia funcionar,pero entonces. Por primera vez miro mas alla de la cabellera rubia que empezaba a avercarse. El campesino se levanto y ella ya sonreia

-Oh, no debiste...- emitio, pero el la paso- ¿pero que?

-¿Eres tu aquello que busco?-le pregunto a la joven doncella de cabello castaño, piel Blanca y ojos marrones

-No sabría decir que busca señor, quizás si me lo dice...-dijo ella con una sonrisa

-Buscaba una flor perfecta, cuando debía buscar a la.perfecta mujer para la flor- dijo dándole la Rosa- ¿es usted quizás?

Ella sonrio una vez más y lo beso.

A los pocos tiempos el campesino se casó con aquella joven que era nada más y nada menos que la primera hija del Rey. Así que todo el pueblo se regocijo y la gran boda estaba en pien.

La joven chica de cabellos dorados tuvo un compromiso arreglado con el más pobre del pueblo. Desprecio a tantos hombres buenos que al final, terminó con el único que quedaba.

La Flor perfecta, fue encontrada y el amor vencio