Inesperado

Epilogo

Epilogo

Cuando Loki llamó pidiendo un favor, Tony se debatió diez minutos si ayudar o no, no tenía ni la más mínima intención de dejar sus avances con un robot como para ir a avisarle a un viejo hombre que su cita no iría.

—Loki, se que te gustan los hombres grandes, pero creí que corporalmente, no en edad—se burló.

—Tú no entiendes. Natasha me matará si lo planto sin avisar, si le aviso... al menos solo recibiré un monologo aburrido de una hora. Tienes que ir y decirle que lo lamento, pero no me presentaré.

—Ve tú, Loki, tu problema. ¿Para qué pediste una cita si ahora la cancelas?

—Yo solo bromeaba al decir que quería a alguien más serio que mi Thorpe, fue una pelea estúpida. Estaba molesto y Natasha salto sobre eso para venderme la cita con el señor "Capitán del ejército, señor perfecto, serio y educado".

—Como dije, tu problema, ve a solucionarlo.

—Vamos, Tony, estoy con Thor. Vino con flores y chocolates. Las flores quedaron destrozadas cuando las use para golpearlo, pero los chocolates son deliciosos compartidos con su boca.

— ¡No necesito detalles!

—Vamos, solo ve y discúlpate por mí y serás el padrino de mi boda.

— ¿Te propuso matrimonio?

—Es Thor, claro que todavía no lo hizo, está tratando de encontrar sus pelotas. Pero sé que lo hará, el muy Thorpe creyó que dormía cuando tomó la medida de mi dedo. Vamos, Tony.

—Bien, ya deja de lloriquear, pero yo que tú llamo a algún buen lugar y pido comida, espero encontrar algo bueno en mi puerta cuando regrese.

—Dalo por hecho, te mando por mensaje la información que Natasha me envió.

Tony, esperaba ver a un hombre alrededor de los cuarenta y cinco o cincuenta años, quizás más. Con reflejos de canas entre sus cabellos, vestido con el uniforme de su rango como medio de conquista, pensaba que quizás el hombre se enojaría y lo regañaría como lo hacía su padre.

Sin embargo, cuando llegó fuera del restaurante, al que había ido innumerables veces a cenar con sus padres; se encontró con un hombre joven, alto y de apariencia más que un poco agradable, decidió de inmediato que Loki era un imbécil y se merecía totalmente a su Thorpe por rechazar esta cita. También, que debía saber por qué Natasha no mencionó nada de esto con él, con solo una foto, Tony hubiera abandonado sus robots rápidamente.

Steve Rogers, el guapo Capitán del ejército, joven para su rango militar, rubio, alto, de ojos claros y hombros anchos que iban en armonía con esas montañas de músculos que tenía por brazos, debajo de la perfectamente planchada camisa que llevaba, se los veía.

Tony, como el genio que era, procesó diez escenarios diferentes de cómo abordar la escena mientras se disculpaba por Loki. No hubo gritos, regaños ni enojos por parte del hombre. Rogers, fue todo gentileza, compresión y un tanto de desilusión que pinchó el pecho de Tony cuando lo notó, por lo que solo decidió tirarse de cabeza a la piscina y rogar porque haya agua.

Fingió estar asombrado por el lugar, no fue mentira que estaba hambriento, pero sabía que se enfriaría la comida que Loki debía enviar a su casa. Steve, solo se superó en perfección a si mismo aceptando de inmediato el pedido, tomando todo con ligereza, arruinó la temporada de la serie que miraba Tony, se rio de él con él. Cuando salieron del restaurante, Tony continuaba creando conversación, puentes para permitirle a hombre avanzar, pero nada parecía funcionar. Sabía que, en el momento que se subiera a un taxi, la oportunidad se perdería y solo quería preguntarle a Natasha por qué no él y Loki sí, pero creía comenzara entenderlo, no parecía del interés de Steve si este ni si quiera su número estaba pidiendo. Después de todo, era Rogers el interesado en las citas y no estaba tomando sus indirectas.