"El lobo y la luna."

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N/A: Hice algunos ajustes a las ships, en efecto, la esposa de Aegon era Helaena, y sus hijos eran Jaehaerys, Jaehaera y Maelor.

El capítulo podría tener errores porque lo terminé recién y acá son las 2:40 (me tengo que levantar a las 5am, ayuda).

Eso, ojalá me perdonen.

***

—¿Qué tan lejos? —Luke cuestiona, calzándose el primer par de zapatos que encuentra.

Aegon guarda silencio.

—A menos de un kilómetro.

Luke se incorpora de golpe cuando el llanto llega a sus propios oídos. Voltea hacia Aegon, que se ha sentado del todo, y después hacia la puerta.

—Pon a hervir agua —pide.

—Voy contigo.

—Estás cojo, solo vas a entorpecerme si debo correr —escucha su gruñido, a Luke le da igual—. Pon a hervir agua, tendrán frío, si pasa algo gritaré.

No se abriga, solo sale recibiendo el golpe del viento y los gritos de Daeron mezclados con la nieve. Lo que antes era un suelo de piedra, es ahora una alfombra de nieve mullida y blanda. Luke debe dar zancadas trabajosas para moverse y se guía por su oído, siguiendo su nombre siendo exclamado por Daeron.

—¡Luke!

Su corazón da un vuelto.

—¡De! —grita de vuelta.

Por un segundo, Luke maldice el color blanquecino de Daeron, que le dificulta encontrarlo entre esa inmensidad blanca.

El frío cala hasta sus huesos, se siente como agujas incrustándose en su piel, y fuego quemando sus pulmones. Inhala y grita otra vez, después guarda silencio esperando una respuesta.

—¡Luke!

Luke corre otra vez, levantando nieve mientras se acerca.

—¡Aquí estoy!

—¡Luke!

Percibe la figura solitaria de Daeron corriendo entre tropezones. Escucha su respiración acelerada y el llanto desesperado mientras grita y grita su nombre. Luke corre, notando su propia desesperación cuando la nieve se hunde bajo su peso y relentiza sus pisadas.

Daeron rompe en llanto cuando Luke logra llegar a él. Primero revisa su cuerpo de forma rápida, después lo abraza, lo levanta y esconde su cabeza mientras corre de vuelta a la cueva.

Daeron llora contra su cuello, su cuerpo tiembla mientras se aferra a él. Es una pequeña cosa tibia que se estremece y aprieta su ropa. Y llora.

—Estás bien —susurra—. Estás bien, mi amor, estás a salvo. . .

Aegon está de pie frente a la puerta cuando Luke vuelve a entrar. Sienta a Daeron frente a la chimenea y comienza a quitarle la ropa mojada. Daeron solloza, a Luke se le quiebra el corazón oírlo llorar. Lo cubre con una manta de lana y frota sus manos heladas, después sostiene su rostro y enjuaga las lágrimas que corren sin tregua por sus mejillas enrojecidas.

—Daeron, mírame —pide. Daeron sigue llorando. Luke siente un arañazo de angustia lastimar su pecho ante la idea de no saber dónde está Aemond. La historia de Aegon se reproduce por su cabeza en bucle, y el terror comienza a enfriar su sangre y a generar imágenes escalofriantes—. Necesito que me digas qué pasó.

—L-Lobos. . . —él solloza—. Aemond y lobos. . .

—¿Peleó con ellos?

Daeron no responde y Luke entonces lo termina de envolver y se endereza. Toma su abrigo, se cubre con velocidad

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⏰ Última actualización: 7 days ago ⏰

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