los héroes que salieron victoriosos se enfrentaran al mismo ser que los puso a prueba el creador
La habitación estaba sumida en un caos absoluto. El Creador, una entidad que desbordaba poder más allá de la comprensión, había desatado su plena fuerza sobre el grupo de héroes. Cada golpe, cada ataque que lanzaban, parecía ser absorbido por el vacío infinito que rodeaba al Creador, como si nada pudiera hacerle mella. La energía que emanaba de su forma fluctuante era abrumadora, y cada intento de aproximarse a él parecía ser devorado por el abismo que lo rodeaba.
A pesar de ello, nuestros héroes no se rendían. Sabían que este era el momento crucial, el juicio final. No había vuelta atrás.
Goku estaba agotado, su cuerpo brillaba con la energía de un Super Saiyajin Blue, pero incluso su poder más elevado parecía apenas arañar la superficie del Creador. "¡No es suficiente!", gritó, mientras sus músculos se tensaban y sus ojos destellaban con determinación. El Saiyajin respiraba con dificultad, pero su espíritu nunca vaciló. "¡Kamehameha!" Un gigantesco rayo de energía azul salió disparado de sus manos, chocando contra el Creador. La onda explosiva iluminó toda la dimensión, pero el ser permaneció impasible, como si nada hubiera ocurrido.
Satoru Gojo, que hasta ese momento había mantenido su confianza inquebrantable, se encontraba igualmente a punto de perder el control. "¿Qué es esto...?" murmuró, mientras su técnica de Infinito intentaba crear una barrera, una defensa impenetrable. Pero el Creador simplemente atravesó el vacío con una facilidad escalofriante. "Lo que tú ves como infinito, yo lo veo como limitado."
Gojo se vio obligado a liberar todo su poder. "¡Dominar el vacío... no es suficiente para derrotarlo! ¡¡Me he estado conteniendo todo este tiempo!!" Un resplandor cegador se desató desde su interior mientras activaba su técnica "Reverso Infinito", acumulando toda la energía de su poder ilimitado. Los colores de la realidad parecían distorsionarse a su alrededor, pero incluso con su fuerza descomunal, no logró más que provocar una pequeña fractura en la forma del Creador, que rápidamente la reparó.
Sukuna, observando todo desde su posición, soltó una carcajada gutural. "Este ser es interesante, pero es solo un obstáculo más." Sukuna se acercó al Creador con una velocidad aterradora, sacando su brazo maldito, "Doble Corte", y atacando a la criatura en un parpadeo. La primera espada atravesó la barrera de energía del Creador, pero la segunda fue absorbida por su cuerpo. "¡Demonio... ni siquiera los malditos dioses pueden tocarlo!" Sukuna gruñó mientras sentía cómo su poder era disipado por el vacío que emanaba del Creador.
Maki Zen'in, sin magia en su interior pero con una fuerza incomparable, atacaba con una furia casi frenética. "¡Yo no me rindo! ¡Te derrotaré!" Maki no usaba hechicería, pero su habilidad en combate cuerpo a cuerpo, combinada con su prodigiosa resistencia, la hacía una oponente formidable. Sus puños destellaban con un poder brutal, pero cada golpe parecía ser absorbido por la entidad, como si no hiciera ni la más mínima diferencia.
Mikasa Ackerman, en un ataque de desesperación, arremetió con su espada. Sus reflejos y su destreza en combate eran inigualables, pero el Creador las desintegraba una tras otra. Mikasa fue lanzada hacia atrás por una onda expansiva de energía, pero no se dio por vencida. "¡No voy a dejar que esto termine aquí! ¡Aún hay algo que podemos hacer!"
Kirito, con su Rapier Elucidator y su espada Dark Repulser en mano, se lanzó al ataque con su máxima velocidad. "¡Esto es lo que siempre he querido, un desafío real!" Pero el Creador lo despojó de sus espadas con un simple movimiento de su mano. Kirito cayó al suelo, respirando con dificultad, mientras intentaba recuperar sus fuerzas.
Yor Forger, la asesina letal, se movía con una destreza sobrenatural. Cada uno de sus ataques era como una flecha mortal, pero incluso sus movimientos más rápidos fueron neutralizados por la fuerza de El Creador. A pesar de todo, no dejó de luchar. "Este tipo no es invencible... no lo es."
En medio de la devastación, los héroes comenzaron a entender que su único camino hacia la victoria no era la fuerza bruta, ni la velocidad, ni las habilidades extraordinarias. Era su voluntad. Era el poder de seguir luchando incluso cuando todo parecía perdido. Entonces, con una determinación conjunta, se agruparon, uniendo sus esfuerzos en una última ofensiva.
"¡¡ES HORA DE UNIR NUESTRAS FUERZAS!!" gritó Goku, el primero en lanzarse al frente. Él, Gojo, Maki, Kirito, Mikasa, Sukuna, y Yor, se alinearon, cada uno extendiendo su poder al máximo. Goku estaba al borde de su resistencia, pero su alma ardía con el deseo de proteger a todos los que amaba. "¡Voy a superar mis límites!" Goku ascendió a una nueva forma, la forma Ultra Instinct.
"¡INFINITO! ¡¡MI PODER NO TIENE LÍMITES!!" Gojo, usando todo su poder, creó una esfera de energía absoluta, atrapando a El Creador en un campo que distorsionaba el tiempo y el espacio. Sukuna, sintiendo el aumento de poder, usó su técnica "Corte del Rey Demonio", cortando la realidad misma, debilitando la barrera de energía. Maki, Mikasa, Kirito y Yor atacaron con una ferocidad incomparable, descargando todo su potencial.
El Creador, finalmente comenzando a desmoronarse bajo la presión de su ataque combinado, se volvió hacia ellos con una expresión solemne. "Así que este es el poder de la esperanza..." susurró, mientras su forma comenzaba a desintegrarse, la distorsión en el aire rodeando su ser.
Pero antes de que desapareciera por completo, el Creador, ahora en sus últimos momentos, pronunció palabras que llegaron a los corazones de todos:
"He sido el principio y el fin, el vacío y la plenitud. Pero ahora, viendo sus luchas, veo lo que me faltó. La creación no es solo el fin de lo imperfecto... la verdadera perfección está en aceptar la imperfección, en los lazos que unen, en el sacrificio por los demás. Nunca entendí eso. No fui capaz de verlo. Pero ustedes... ustedes me han mostrado algo que nunca imaginé: que no todo tiene que ser ordenado para ser valioso."
Las palabras del Creador resonaron en el aire como un eco triste, mientras su forma desaparecía en partículas de luz. "Puedo ver el futuro a través de ustedes. La creación continuará. No con mi visión... sino con la suya."
Los héroes, agotados, observaron en silencio mientras el Creador se desvanecía completamente, dejando solo un vacío detrás de él.
En ese momento, el universo se calmó. La batalla había terminado, pero el precio había sido alto. El sacrificio de sus fuerzas, el dolor de sus cuerpos, y las emociones a flor de piel les habían recordado lo que verdaderamente significaba luchar.
"Lo hemos hecho..." susurró Goku, mirando hacia el horizonte.
Gojo, con una sonrisa cansada, asintió. "Sí. Hemos ganado. Pero lo más importante es que ahora sabemos... que la verdadera fuerza viene de nuestra humanidad."
El Creador ya no estaba, pero su última lección permanecería en sus corazones. Y mientras la paz regresaba, sabían que el futuro, aunque incierto, estaba lleno de nuevas posibilidades.