capitulo 39

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Me lancé contra Douma con mis katanas en mano, mi ira y determinación quemando en mi interior. La luna llena brillaba sobre nosotros, iluminando el claro del bosque con una luz fría, la muerte se sentía en el aire

Pero Douma no se inmutó. Sonrió con desdén, con un aire de superioridad que odié, lo imaginé mirando así a mi madre, engañándole, manipulándola, haciendo con ella lo que quisiera. Un gritó salió de mi garganta estando a pocos metros de él, levanté mis katanas para ir directo a su cuello

pero el infeliz levantó su mano, creando una pared de hielo que detuvo mi ataque, sentí su risa

-Tu madre era débil- dijo, su voz como un cuchillo que me rasgaba el alma- tú también lo eres, con tan solo unas simples palabras puedo hacer que actúes sin pensar, aunque tu madre solo se conformaba con palabras lisonjeras, era bella, pero tonta

Mi ira se intensificó. Ataqué con más fuerza, pero Douma esquivó con facilidad y contraatacó con una estaca de hielo que golpeó mi hombro herido.

Grité de dolor, pero no me detuve. Mi rabia me cegaba, me consumía, no podia perder esta oportunidad de tener su cabeza entre mis manos y por fin sanar la herida que constantemente consumía mi corazón

Douma se rió, su voz como un eco en mi mente -Tu rabia es patética -dijo- No puedes vencerme

Me rodeó una tormenta de hielo, haciéndome tambalear. Pero no me caí. No podía caerme. necesitaba mantenerme en pie, aunque fuera lo último que hiciera

Me levanté, sangrando y jadeando, la máscara se me había caído, pero después la buscaría y ataqué de nuevo. Douma seguía burlándose de mí, disfrutando de mi sufrimiento.

Pero no me importaba. Solo quería matarlo. Quería vengar a mi madre.

La ira me consumía, me quemaba. No podía pensar, solo sentir.

Y así seguí, atacando y recibiendo golpes, pero sin detenerme.

Porque Douma tenía que morir.

Porque yo tenía que vengar a mi madre.

pero Douma era demasiado poderoso. Esquivaba mis golpes con facilidad y contraatacaba con precisión y si sumamos que el dolor y el rango de movimiento de mi hombro me limitaba… mierda

-si vinieron por los muchachos que estuvieron aquí hace dos noches es inutil- dijo, sonriendo, como si luchar no fuera un esfuerzo para él y podíamos conversar- están todos muertos, no tuviste que molestarte en buscarlos

mierda…

Me enfureció aún más al escuchar su risa.

Ataqué con más fuerza, y esta vez logré golpear a Douma en el rostro. Su sonrisa se desvaneció por un momento y retrocedió mirándome con el ceño fruncido.

ahora el que sonrió fui yo a pesar del dolor, sus ojos se encontraron con los míos, y pude ver la sorpresa en ellos, que empezaba a darse cuenta que con un Hashibira no se juega.

Douma se recuperó y contraatacó con un golpe de hielo. Pero yo estaba listo. Esquivé el ataque y contraataqué con una patada que lo envió volando hacia atrás.

Douma se levantó, sorprendido

-No esperaba que tuvieras tanta fuerza- dijo- Al parecer, tengo que tener más cuidado contigo, no te subestimaré tanto

Su mirada se posó en mi rostro, y sentí un escalofrío al verlo ahora serio

-Eres igual que tu madre- dijo, su voz llena de nostalgia, como si en realidad la hubiera querido- Un rostro hermoso, una belleza que me hace recordarla

Me sentí enfermo. ¿Cómo se atrevía a hablar de mi madre de esa manera?

-no te atrevas a nombrarla -grité asestando mi golpe justo en su hombro, pero se generó de inmediato

-Entonces hablemos de tus amigos que están en este mismo bosque -mi corazón se paralizó por algunos segundos, Douma me dió de lleno en el brazo herido, contuve un grito- Iba detrás de tus amigos, pero entonces te vi a ti. Estabas solo, y había algo en ti que me llamó la atención- Un golpe certero me hizo caer al suelo. La sangre salió de mi boca, y sentí que mi visión se oscurecía- y quiero hacerle un último favor a tu madre- quise moverme, pero estaba totalmente inmovilizado debajo de Douma, el sabor metálico en mi boca era cada vez más fuerte, y todo mi cuerpo me dolía, Douma se acercó, su rostro sobre el mío -Es hora de que te unas a ella- dijo, sonriendo.

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estrategia de seducción - inosuke x t/nDonde viven las historias. Descúbrelo ahora