estrategia de seducción - inosuke x t/n

capitulo 64

mis pies tocaron suelo y la puerta que tenía en la cabeza se cerró de golpe

y ahora lo único que escuchaba era mi propia respiración.

t/n no sabe luchar y está sola en este lugar

ví a algunos compañeros muertos…

levanté un poco la vista sintiéndome mareado

¿donde mierda estamos? ¿Qué es este lugar?

y solo me demoré unos segundos en entender, kagaya nos había explicado de este lugar, pero eran solo cuentos, suposiciones

La realidad me golpeó con fuerza: estaba atrapado en la dimensión demoníaca, sin rastro de t/n, solo con sus ojos en mi mente, ella tenía miedo, yo estaba aterrado por ella

Un rugido ensordecedor llenó la habitación y un demonio poderoso irrumpió mis pensamientos casi golpeándome, un rasguño en el hombro me hizo centrarme en él, sus ojos rojos brillando con una intensidad maligna. Su poder era sorprendente, pero no igualaba el de las Lunas. Aun así, era un enemigo peligroso.

Mi instinto de supervivencia se activó, pero mi corazón estaba vacío, mi mano se cerró sobre la empuñadura de mi katana, más por hábito que por siendo consciente de mis movimientos ya que no podía dejar de pensar en mi mujer

-Tercer colmillo, Desgarrar y devorar -dije en voz baja, invocando mi técnica de combate

El demonio se lanzó hacia mí, sus garras extendidas, pero mi ataque le cortó la cabeza en dos segundos y cayó al suelo evaporándose de inmediato

solté el aire que había estado conteniendo y dejé caer mis katanas, puse mis manos en las rodillas para tratar de regular mi respiración y los latidos de mi corazón

Dí un grito de rabia, tuve que haber estado cerca de ella al momento de caer, pero no sacaba nada con desesperarme ahora, con tan solo unos segundos más mi respiración se estabilizó, mi mente se clarificó. La ira y la determinación se apoderaron de mí. No podía permitir que t/n desapareciera sin dejar rastro. La imagen de su rostro, de sus ojos, se grabó en mi mente como un recordatorio de lo que debía hacer.

-La encontraré -me dije a mí mismo, mi voz baja y firme -La encontraré y la protegeré. Y a todos los demonios que se interpongan en mi camino, los mataré

Me incliné a tomar mis katanas y mi mano se cerró sobre las empuñaduras, ahora con una resolución renovada. Mi corazón latía con fuerza

No importaba cuántos demonios hubiera, no importaba cuán fuertes fueran. Yo los enfrentaría, los vencería, y encontraría a t/n. Mi amor por ella se convirtió en mi fuerza, mi motivación, en mi  mundo entero

empecé a correr doblando en cada esquina siguiendo mi instinto, por que sé que él me llevará donde mi ex esposa.

cada vez aparecían más demonios, pero eran débiles comparados a mi, así que no me detenían ni un segundo, no me retrasaban.

sentía que me acercaba cada vez más a ella, pero de repente, un aura peligrosa llenó el aire. Mi instinto de supervivencia se activó y me detuve, por que sentía que el peligro estaba delante de mí… pero ella también

Y entonces, lo vi. en medio de una neblina espesa en donde su sonrisa sarcástica y sus ojos brillantes destacaban… Douma.

Mi corazón se tensó, mi respiración se aceleró.

-joven Hashibira -me dijo en un tono burlón- al fin nos volvemos a encontrar, podremos terminar nuestro pequeño encuentro de la vez pasada

lo miré fijamente, y la ira que había tenido la vez pasada ya no la encontré en mi corazón, por que ahora tenía algo mucho más importante que hacer

Douma no era el objetivo, solo un obstáculo, mi prioridad era encontrar a mi amada y asegurarme de que estuviera viva.

levanté una de mis katanas sin desviar la mirada de él, demostrando que no le temo, y que tampoco es tan importante para mi en estos momentos

-Estás en mi camino, Douma, así que hazte a un lado, no te detendrás en mi búsqueda.

el se rió, risa que me caló hasta los huesos por que estaba cargada de vidas humanas, luego me miró

-la pequeña de ojos hermosos ¿no? la hermana de Iguro Obanai -me tensé, mi mandíbula se apretó, ¿como sabía que era ella?

dí un paso delante dejando que todo mi poder se manifestara, Douma sonrió aún más

-¿dónde la tienes? -le dije con la voz firme

-¿yo? no la tengo, pero sí la ví caer y ahora iba detrás de ella, pero me encontré contigo, así que… premio doble

en ese segundo entendí algo, no me iba a poder librar de él en estos momentos, tendría que enfrentarme a él para poder ir por t/n, pero tambien sabia algo con claridad, no me iba a dejar vencer por este hijo de puta

-¡Quinto colmillo! -grité mientras daba un salto- ¡Locura de cortes!

.
.
.