estrategia de seducción - inosuke x t/n

capitulo 62

hubo un ataque en la base

en donde estaban todos nuestros amigos y familiares

Nos llegó la alarma automática de ataque, de las lunas de rango superior… Douma

quizá ese haya sido el malestar que había sentido en todo momento, estaban cerca y lo presentía

Me vestí rápidamente y por más que le pedí a t/n que se quedara en mi apartamento no quiso, por su hermano, por Mitsuri, Sanemi… por todos

y la entendía, porque yo tampoco me hubiera quedado en casa esperando noticias, así que ambos bajamos a mi vehículo y ahora estoy manejando a mucha velocidad, ella está en completo silencio, mirando por la ventana.

-todo va a estar bien, amor -le tomé una pierna sin dejar de mirar el camino, lo último que queremos es tener un accidente, ella asintió con la cabeza- tuviste que haberte quedado en casa -dije en voz baja, como diciendo para mi mismo

-imposible -dijo desviando la mirada hacia mí- mi familia está ahí

Ahora yo fui quien asintió sin decir nada más, porque le podía decir muchas razones pero ninguna le iba a ganar a la de ella.

conduje en silencio sacando la mano de su pierna solo en los momentos en donde tenía que pasar el cambio del vehículo, pero después la devolvía

no sé por que tenia el presentimiento que mi toque la tranquilizaba a ella o a mí

desde lejos ya sentíamos el olor y la presencia de demonio, el ruido de la lucha en la base, el olor a… muerte

me estacioné a unos par de metros y me bajé rápidamente para el maletero de mi vehículo para sacar mis katanas, t/n ya se había bajado y había empezado a correr, la alcancé y avancé a su lado tomándole la mano, cuando llegamos a escasos metro de la puerta, el poder de los demonios ya lo sentía en todo mi cuerpo, en todas partes.

-quédate siempre, siempre detrás de mí -le dije mirándola a los ojos de repente recordando que ella no sabe pelear, que su trabajo es de laboratorio, me odié- ¿has avanzado en tu entrenamiento con Sanemi?

-no pienses en eso ahora -me dijo tan seria que el estómago se me apretó

-ok, entonces por nada del mundo te separes de mí, a menos que se aparezca un demonio y me esté ganando, en ese caso, corre…

-no digas eso -ahora su tono era un poco más de preocupación, le tomé la cara con ambas manos y miré sus bellos ojos

sonreí a pesar de todo

-si se aparece un demonio y te digo que corras, es por que sé que me va a matar, tú corre lo más rápido que puedas y encuentra a alguien… y refugiate, no puedes morir -ella asintió nuevamente con la cabeza, yo la acerqué a mí para abrazarla y depositar un beso en su frente- no debiste venir

-sabías que no me ibas a poder dejar en casa -dijo ella aferrándose a mi cuerpo- en nuestra casa

-lo sé -la miré con una pequeña sonrisa para tranquilizarla por que en el abrazo sentí que su corazón estaba golpeando su pecho fuertemente- es por eso que tenemos que salir con vida de esta, para que vayamos por tus cosas a la casa de tu hermano y te mudes de una maldita vez conmigo

ella sonrió

-es un trato -susurró tratando de esconder el miedo en su voz

la besé una última vez, y aunque traté de que fuera rápido no pudimos, nos demoramos unos segundos y odié que se sintiera que era un “por si no nos volvemos a ver”

nos miramos, y sé que ella sintió lo mismo, así que respiré profundo y le tomé la mano mirando la entrada de la base

-ok cerebrito -le dije- primero dime si necesitas algo que tengas que ir a buscar

-¿que? -dijo ella un poco confundida

-No hay tiempo de vacilaciones amor, debes pensar que Iguro está bien, Mitsuri, sanemi, genya y todos los demás también, así que no te preocupes por ellos, ¿hay algo que necesites?

-kaburamaru -dijo ella- está en el sótano con los demás animales, hay que ir a rescatarla y soltar a todos los animales, pueden ayudar -la miré, en este momento entiendo 100% lo de kaburamaru, pero lo que los demás animales nos ayuden es ridículo, como cuando Uzui no contó que quería entrenar a unos conejos o ratones que les llevaran y trajeran sus cosas, y aunque no dije nada, ella leyó mi expresión- todas estas semanas -dijo pasando de mi, le tomé nuevamente la mano y la seguí de cerca- he estado modificando genéticamente a los animales, y las he entrenado

-entrenado -dije un poco incrédulo atento a todos las sensaciones a mi alrededor

-nunca se lo dije a nadie, pero en eso es en lo que he trabajado todos estos meses y por fin he encontrado resultados, hice el veneno de las serpientes, escorpiones e incluso el toque de las mariposas más potente, una sola mordida y te mueres en menos de dos segundos -empezamos a correr, nos detuvimos en una esquina, no había nadie por los alrededores- claro que con los demonios solo logran paralizarlos por un par de minutos, pero nos pueden dar ventajas

-si es que no atacan a los nuestros, mierda…

la hice a un lado, un demonio había llegado a atacarla directamente a ella, logré cortarle la cabeza en segundos, pero cuando la miré, ella estaba asustada

-ya está amor… sigueme contando -le dije para desviar su atención del cuerpo inerte del demonio

-Hay que dejar a los animales sueltos, al igual que Iguro le enseñó a kaburamaru, yo les enseñé a las demás especies que los demonios son la amenaza, no los humanos, han respondido bien… solo me han mordido unas par de veces

-que alivio escuchar eso -ella soltó una pequeña risa, seguíamos avanzando, los sonidos de la pelea se hacía cada vez más intenso, incluso me pareció escuchar a Zenitsu- pero hagámoslo, encerrados ahí abajo tienen menos probabilidades de sobrevivir

llegamos al sótano, ella bajó corriendo delante de mí mientras yo echaba un último vistazo a los alrededores, nos estamos encerrando nosotros mismos, pero tratariamos de hacer esto rápido, cuando bajé con t/n, ella ya tenía a kaburamaru en el cuello.

-abre las cajas de todos los que puedas -me dió la orden mientras ella hacía lo mismo, ví pequeños animales salir a toda prisa por los suelos, algunos escondiéndose, cuando ví a la que seguía se me hizo un nudo en el estómago, la Ophiotuhermana, o como se llamaba esta serpiente que me quiso atacar la primera vez que entré a este lugar, creo que había crecido un poco por que la encontraba mas larga, y me miraba fijamente.

pero no tenía tiempo, así que abrí su caja y retrocedí un par de pasos.

Ella se levantó por la cabeza y sacaba la lengua rápidamente y la volvía  a meter en su boca y sin darme cuenta se lanzó sobre mi.

o mejor dicho a un lado de mi cabeza, por que no tuve tiempo de reacción cuando pasó por mi lado, fue muy rápida, me giré, y la serpiente tenía clavado sus dientes en un demonio del cual no me había percatado que había entrado, t/n soltó un grito y reaccioné, ella corrió para acercarse, pero yo ya me había acercado al demonio que estaba hinchándose por el veneno y le corté la cabeza, la serpiente me miró, y luego se fue rápidamente

tragué

-¿Cómo lo dejó así? -miré al demonio, en donde lo había mordido la serpiente estaba prácticamente derritiéndose

-ciencia -dijo ella- y mucho tiempo libre

-no sé si me dan mas miedo tus animales o los demonios

-bueno -dijo ella mirando la serpiente- yo prefiero los animales… -me miró- por eso me enamoré de ti

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