💖💖💖⚡⚡⚡A Toda Velocidad (Bart Allen X T/n)⚡⚡⚡💖💖💖

El Enfrentamiento Final

Los días pasaron en preparación constante. Tanto tú como Bart sabían que el próximo enfrentamiento sería decisivo y probablemente el más difícil. Bart había logrado identificar el escondite de la organización que lo perseguía, y decidieron enfrentarlos en su propio terreno. Sabían que eso podría ser peligroso, pero no querían seguir huyendo.

La noche del enfrentamiento, ambos se prepararon en silencio. Bart ajustó su traje de velocista, sus ojos reflejaban una mezcla de determinación y nerviosismo. Tú también sentías el peso de lo que estaba por venir, pero tratabas de mantener la calma. Sabías que, pase lo que pase, enfrentarías esta batalla junto a él.

“¿Listo?” Bart te preguntó, mirándote con una pequeña sonrisa que buscaba darte ánimos.

“Listo,” respondiste con firmeza, aunque el corazón te latía con fuerza.

Ambos se adentraron en las sombras, moviéndose sigilosamente por las calles hasta llegar al edificio abandonado donde la organización se ocultaba. El lugar estaba oscuro y en silencio, pero podían sentir la tensión en el aire. Justo cuando entraron, las luces se encendieron de golpe, y varios hombres y mujeres vestidos de negro aparecieron, bloqueando la salida.

“Finalmente han decidido venir a nosotros,” dijo una voz desde la oscuridad. Era el líder de la organización, un hombre de mirada fría y calculadora que no mostró ninguna señal de sorpresa al verlos.

“Ya hemos tenido suficiente de tus persecuciones,” respondió Bart con voz firme. “No dejaré que sigas interfiriendo en mi vida, y mucho menos en la suya,” agregó, mirándote con determinación.

El líder solo sonrió, y con un gesto, ordenó a sus seguidores que atacaran. La batalla estalló de inmediato. Bart se movía como un rayo, usando su velocidad para esquivar ataques y golpear con precisión, mientras tú te concentrabas en las técnicas que habías aprendido. Aunque no tenías su rapidez, cada movimiento era calculado, y lograste defenderte con agilidad.

La organización tenía miembros con habilidades impresionantes, y algunos parecían tener mejoras físicas que les permitían moverse más rápido de lo normal. Pero nada de eso intimidó a Bart. Te mantenías a su lado, cubriéndolo cuando era necesario, y él hacía lo mismo por ti, mostrándote que, para él, tu seguridad era igual de importante que la suya.

En medio de la batalla, lograste enfrentarte al líder. Era más fuerte y habilidoso de lo que esperabas, y cada golpe que lanzaba era calculado y poderoso. Sin embargo, recordaste todo lo que Bart te había enseñado y te mantuviste firme, esquivando y contraatacando con rapidez.

Bart, viendo que estabas en apuros, se lanzó hacia el líder, y ambos lo enfrentaron juntos, sincronizados como si fueran uno solo. Finalmente, con un golpe certero, lograron desestabilizarlo, y el líder cayó al suelo, derrotado.

Con su caída, los demás miembros de la organización comenzaron a retroceder, y poco a poco, abandonaron la pelea, aceptando su derrota.

Después del Enfrentamiento

Con el peligro eliminado, tú y Bart se quedaron en el lugar, recuperando el aliento. Habían logrado lo que parecía imposible, y ambos sabían que esa experiencia los había unido aún más.

Salieron juntos del edificio, y Bart se detuvo en la calle desierta, observando el cielo estrellado por un momento antes de mirarte. Su expresión era suave, llena de gratitud y algo más profundo.

“Gracias por estar a mi lado,” dijo en voz baja, sus ojos brillando con emoción. “No sé qué hubiera hecho si te hubiera perdido en medio de esta locura.”

Sentiste que el corazón se te aceleraba, y sin pensarlo demasiado, te acercaste y lo abrazaste. Bart, sorprendido al principio, te devolvió el abrazo, envolviéndote con sus brazos y acercándote a él. En ese momento, no había necesidad de palabras. Ambos entendían lo que significaban el uno para el otro, y lo fuerte que era la conexión que habían formado.

Momentos Después de la Tormenta

En los días que siguieron, la relación entre tú y Bart se volvió más especial. Después de enfrentar una situación tan peligrosa juntos, cada momento que compartían tenía un nuevo significado. Pasaban tiempo disfrutando de las pequeñas cosas: caminatas, risas, y conversaciones hasta altas horas de la noche.

Una tarde, mientras estaban en el parque, Bart tomó tu mano, entrelazando sus dedos con los tuyos. “Nunca pensé que encontraría algo así aquí, en un mundo que no es el mío. Pero contigo… me siento en casa.”

Su confesión te hizo sonreír, y sentiste que el tiempo se detenía. Ambos sabían que las aventuras aún podían estar por venir, pero también sabían que, juntos, podían enfrentar cualquier cosa.

Desde ese día, tú y Bart compartieron una conexión que iba más allá de la amistad o la aventura. Habían encontrado en el otro a alguien en quien confiar y a quien amar, y con cada día que pasaba, esa conexión se fortalecía aún más.