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𝗅 𝖺 𝗋 𝖺
𝗗𝗘𝗦𝗣𝗨𝗘𝗦 𝗗𝗘 𝗨𝗡 𝗗𝗜𝗔 𝗖𝗔𝗡𝗦𝗔𝗗𝗢𝗥 para Franco, nos encontrábamos en mi habitación del hotel. Hace un rato habíamos llegado de cenar en un lugar re lindo que el castaño quería ir desde que llego y fuimos juntos. La habíamos invitado a Mar, pero nos dijo que estaba cansada y quería quedarse durmiendo.
Antes de dormir, me dí mi ducha de siempre y a los minutos ya estaba acostada en la cama, al mirar a Franco estaba concentrado en su celular mirando Instagram.
──¿Qué miras? ─le pregunto una vez que estaba a su lado─
──Videos, amor ─apoya su cabeza sobre la mía, ya que estaba un poco más arriba que yo─
──Cada video boludo te salta ─rió un poco observando su celular─
──Sí mal, ya me cansé igual ─bloquea su celular y se estira un poco dejándolo en una mesita que había al lado de él─
──Vamos a dormir entonces porque no doy más del sueño, se me cierran los ojos ─escucho que el castaño suelta una carcajada y enseguida se acomoda en la cama─
Me abraza por completo, para después dejar algunos besos en mi cuello. Empieza a subir hacia mi boca y accedo fácilmente, haciendo un beso tierno. Hasta que siento bajar su mano por mi abdomen.
──Fran no, seguro estás cansado y mañana tenes carrera. Hay que descansar ─me separo de él y escuche como chasqueo la lengua─
──No importa ─dice en un susurro y vuelve a juntar nuestros labios─
──A mí sí me importa ─me vuelvo a separar de él corriendole la cara─
──Bue, hasta mañana ─sale de encima mío y se da vuelta, dándome la espalda─
──Tampoco era para que te enojes ─pego un suspiro y también le doy la espalda─
