Me enamoré de ti

Esto es guerra

(DAMIAN)

Escuchaba retumbar entre sueños la música del despertador así que abrí los ojos y lo apagué quedándome recostado boca abajo en la cama. Sería mejor que me levantara no quería llegar tarde el primer día.
Después de bañarme y desayunar estaba listo para salir de casa. Despeine ligeramente mi cabello para darme un toque rebelde, que me queda bastante bien, mire la hora en el reloj de mi muñeca y como aún tenía tiempo decidí caminar al metro, llegué muy pronto al instituto y solo había un par de personas más afuera del salón que mi horario señalaba, supuse que serían mis nuevos compañeros de clase, pero no me acerque a hablar con ninguno y entre al aula para poder escoger mi lugar, el salón era bastante grande con tres hileras de mesas para dos personas con detrás sus respectivas sillas localice al fondo a la izquierda localicé el que sería mi lugar, quedaba a dos mesas del final del salón junto a una ventana, sonreí y me senté. Poco a poco el salón se fue llenando, al menos nadie se había sentado junto a mí, lo cual era excelente ya que no quería compartir lugar con cualquier chico idiota o chica fea, ¡oh no! Damián Robinson no compartiría lugar a menos que fuese la chica más buena o el tipo más genial del grupo.
Entró el profesor y se presentó escribiendo su nombre y la materia que impartiría en el pizarrón, como si eso no viniera en la tira de materias.
-bien chicos, mucha atención a la pizarra ahora- lo mire fijamente y luego recargué la espalda en la silla para relajar un poco la postura que tenía- mi nombre es Mario Fuentes y conmigo tomarán Química, por favor anoten el porcentaje que escribí- señaló con el dedo al pizarrón y luego se sacudió las manos- este será el modo en que los evaluare, tienen dos minutos para copiar, después haremos una rápida presentación y comenzaremos con la clase.
La "rápida presentación" consistía en decir tu nombre, tu edad, algo que te guste mucho hacer y recordar el nombre de al menos alguno de los que se presentaron antes que tú. Dios, no estábamos en preescolar. Se estaba presentando una tal Miriam cuando la puerta se abrió de golpe haciendo que todos volteáramos hacia ella, estaba una chica de pelo castaño y desordenado, se veía agitada, supuse que venía corriendo de su cuello colgaban unos audífonos, en el brazo izquierdo que sostenía la puerta traía colgando una pequeña mochila y su otra mano se encontraba en su frente
-siento llegar tarde- miré la hora, cuarenta minutos de retraso, parece que alguien sí que se quedó dormida, reí y volví a mirar al profesor que tenía el ceño fruncido y miraba a la chica
-nombre- ordenó y ella entro cerrando tras de sí la puerta para quedarse recargada en ella como recobrando el aire- ¡Nombre!- esta vez se lo gritó haciendo que ella lo mirara e hiciera un gesto extraño con una ceja levantada
-Valentina- contesto sin cambiar su gesto, el profesor abrió más los ojos y negó muy ligeramente con la cabeza como diciéndole estúpida- Valentina Soler
-bien Valentina siéntate...- recorrió el salón con los ojos y los posó en el lugar junto a mí, yo hice lo mismo y me percaté de que el único lugar libre que quedaba era ese- ahí, al fondo- ella asintió y comenzó a caminar, estoy seguro de que la vi morderse el labio inferior rápidamente, rodé ligeramente los ojos y quité mi mochila de la silla para que ella pudiera sentarse, también me preparé para rechazar cualquier intento por hablar conmigo y pensé en una manera poco cruel de decirle que aunque yo soy guapísimo, nunca tendremos nada, que no comience a creer que la suerte estará de su lado por sentarse junto a mí.
Se sentó y miró al frente, no tardaría en comenzar a hablarme, siempre me pasaba lo mismo con las mujeres, es que soy irresistible, sonreí y me hice hacia atrás en el asiento con un brazo en el respaldo y el otro sobre la mesa
-hola- dijo ella, sabía que no se podría resistir la miré y abrí la boca para contestarle- antes de que contestes alguna estupidez, no quiero ligar contigo, solo quiero saber qué es lo que se supone que estaban haciendo antes de que llegara- soltó con arrogancia y yo me sorprendí un poco, pero no lo demostré
-una presentación, cuando te toque hablar dices tu nombre, tu edad, lo que te gusta hacer y el nombre de alguno de los que se presentaron antes- ella asintió y miró al frente sin decir nada más.
¿Qué rayos le pasaba a esta chica? "No quiero ligar contigo" seguro que es alguna de esas tontas que creen que me enamoraré perdidamente de ella si me trata mal como sucede en todas esa estúpidas películas y libros románticos, me cruce de brazos con incomodidad, ya me habían hecho eso antes y no funciona, así que en realidad tampoco me importa. Miré fijamente a mi cuaderno y me quede así, con la mente en blanco.
Sentí un fuerte golpe en la costilla y miré a la chica sentada a mi lado, no estaba mirándome pero sé que me golpeo, rodé los ojos y me volví a cruzar de brazos enojado y ella volvió a darme un codazo, incluso más fuerte que el anterior
-¿qué te pasa?- dije sin gritar, aunque cada vez más enojado. Ella me miro seria y luego señaló al frente con la cabeza, levante la mirada y los chicos sentados al frente de mi me miraban, al igual que el profesor
-lo escucho- dijo el profesor, ¿en qué momento había pasado medio grupo a presentarse?
-mi nombre es Damián Robinsón, tengo 17 años, toco la batería en una banda con algunos amigos y recuerdo el nombre de...- mire a Valentina ¿ya se había presentado?, ella pareció adivinar lo que pensaba y asintió dos veces con la cabeza para luego mirar hacia el otro lado- de Miriam, Carlos y Valentina- miré a cada uno cuando pronuncie su nombre para que el profesor entendiera que sabía quiénes eran.
Cuando terminaron las presentaciones el profesor Mario dijo que sería nuestro tutor este año, que no le diéramos problemas y salió del salón.

(Valentina)
Por fin se fue, dios este dolor de cabeza está matándome
Nota mental: adiós al alcohol... Por el resto de mi vida
Mire al salón y bueno la mayoría de mis compañeros se veían bastante normales. Sacudí un poco mi cabello de arriba sin importarme que lo estaba desordenando aún más, cerré los ojos y me recargue un poco hacia atrás en la silla
-hola- dijo el chico de en frente así que abrí los ojos y sonreí
-hola
-Valentina, ¿cierto?- asentí- Yo soy Raúl- se presentó y que bueno porque francamente no recordaba su nombre, era un chico bastante atractivo, con cabello castaño y chino, tenía bonitos ojos marrones. Pero ahora sólo podía pensar en dormir- me gusta tu camiseta- dijo sonriendo y yo me mire la camiseta negra con un estampado de the beatles, parecía que se estaba esforzando por hacer conversación, así que fui lo más amable que pude y hable con él por un rato sobre música, comida y las clases de hace un año.
Mire al chico de al lado mío de reojo, él también era atractivo, pero tenía esa mirada de creerse el centro del mundo y esa sonrisa de conquistador, me miró y cerró un ojo, Imbécil, rodé los ojos y me cruce de brazos.
Este será un año bastante largo...
El día fue pasando con absoluta tranquilidad, gracias a todos los dioses porque el dolor de cabeza me estaba matando, aunque para este punto ya me estaba acostumbrando. Miré la hora en mi celular, once menos cuarto, me estaba muriendo de hambre y la profesora de física no paraba de hablar y yo deje de escuchar luego de que dijo "buenos días, les impartiré física, mi nombre es..." carajo no podía ni recordar su nombre.
Estaba cansada, enojada, entumida y con hambre ¡genial!
Estire mis brazos y sin querer rocé al chico de junto y lo miré preguntándome si sería buena idea disculparme o mejor no. Me mordí el labio (cosa que hacia siempre que algo me molestaba) ante su mirada retadora y su estúpida manera de sentirse superior. Creo que voy a tener que bajarle los humos a este idiota. Aparté la vista y noté que la profesora al fin se había largado
(Damián)
Ahora que veía con detenimiento a la chica es bastante guapa, no se ganará un premio pero no está mal. Seguro que coquetearle sería divertido, mentalmente sonreí y fije mi atención en ella que ahora tenía los ojos cerrados, las manos colgando a sus costados y los labios apretados en una línea
-¿Te sientes bien?- intenté ser amable, pero ella solo abrió los ojos para mirarme con desprecio y los volvió a cerrar
-Aja- solo eso se limitó a decir, levanté las cejas sorprendido ¿cómo podía atreverse a contestarme así?
Toqué su frente "buscando algún indicio de fiebre" pero la realidad es que quería ver si lograba ponerla nerviosa, lo siguiente pasó muy rápido. Tomó mi mano y le dio una especie de giro a mi muñeca, golpeó con el pie la pata de mi silla y de un segundo a otro yo estaba en el suelo boca abajo con su mano aun torciendo la mía y su rodilla en mi espalda. Todos nos observaban pero ella no pareció percatarse de ello.
-Escúchame muy bien pedazo de imbécil porque no voy a repetirlo, si vuelves a tocarme sin mi permiso te partiré el brazo y en menos de cinco segundos estarás tragándote una silla. ¿comprendes?
Dicho esto tomo su mochila y se fue. Me levante con algo de vergüenza, no era algo común que el primer día una chica quisiera patearme el trasero, en realidad ninguna chica jamás había querido hacerlo.

Quería largarme, todos me miraban y algunos incluso murmuraban, pero como aún faltaba una clase me senté y mire al frente ignorándolos a todos
Este seguro sería un año horrible...

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Hola, espero que les haya gustado este primer capítulo, comentenme que opinan, subiré el siguiente muy pronto, en esta misma semana si es posible.

Gracias por leerme :)