Los Problemas Para Tener Un Arcoiris | Chewis

Problema 7: El Nombre

Sergio tuvo que hacer reaccionar a Lewis a base de una fuerte bofetada para ir al hospital. El británico repetía una y otra vez "Todo esta bien" "Todo va a salir bien" que en un punto dudaba de si era para calmar a Sergio o a si mismo.

El camino que ya tenia memorizando desde hace tanto tiempo se le hacía eterno. Sabía que Sergio está intentando controlar su dolor y miedo lo cual lo hacía desesperar más al no poder ayudarle.

Fueron rápidamente atentidos a su llegada. Hicieron entrar a Sergio a la sala de parto mientras preparaban a Lewis para que estuviera con su esposo.

Sergio insulto a Lewis y al universo entero en todos los idiomas que conocía y quizás en alguno inventado. El dolor era demasiado que nadie le juzgaba. Y los médicos y enfermeras seguramente habían visto peores reacciones.

Lewis intentaba servir al menos de apoyo moral, le dedicaba frases de cariño y de ánimo esperando servir de algo para el pobre omega que ya estaba incluso llorando.

En un punto la sala de partos se redujo solamente al fuerte llanto de un bebé.

Lewis miraba a su esposo con lágrimas en los ojos, le intentaba mostrar a través de sus caricias todo el amor y aprecio que le tenia. Su bonito omega le había dado el regalo más valioso que podía existir para ellos.

La enfermera llamó al alfa para cortar el cordón umbilical y al fin pudo ver a detalle a su bebé.

El pobre lloraba a pulmón abierto y fue hasta que los médicos le ayudaron a cargarlo qué se detuvo.

El corazón de Lewis no podía estar más cálido y lleno de amor en ese momento.

Era un niño. Un niño precioso y saludable según dijeron los doctores. Era pequeño, se miraba tan delicado y frágil qué Hamilton incluso tenía miedo de tocarlo. Tenía el cabello sumamente  negro con ligeros y diminutos rulos, su piel morena parecida a la de Sergio, una boca y nariz diminuta. Era el bebé más hermoso que alguna vez vio y le llenó de orgullo saber que ese bebé era de ellos.

Con cuidado lo llevaron para que bien Sergio pudiera sostenerlo. Aun nisiquiera lo tenia en sus brazos cuando Sergio comenzó a llorar de felicidad. Acariciaba con dulcura las rellenas mejillas, sus manitas y su cabecita.

Era una imagen que Hamilton quería preservar para toda la eternidad.

Sergio debería quedarse algunos días en el hospital solo por protocolo y después aquella pareja que llegó bajo eternos "Todo va a estar bien" se irían a casa siendo tres.

La noticia fue recibida con cariño por todos, cientos de mensajes de fans, familias y amigos felicitandolos llegaron. Incluso algunas marcas y proyectos a los que pertenecían les enviaron cestas de regalos y artículos de bebé.

Después de sus familias, fueron los pilotos quienes llegaron a visitarlos.

Era asombroso ver a un montón de adultos tan asombrados viendo al pequeño bebé que los veía casi de la misma forma.
También seguía siendo la asombrosa cantidad de regalos con la que habían llegado. En serio, Lewis deberá crear un almacén en casa únicamente para ellos.

—¿Y como se llamará? — Pregunto Charles a la pareja de papás.

De hecho tanto el género como el nombre del bebé había sido el secreto mejor guardado por Checo y Lewis, queriendo disfrutar de esos momentos para ellos.

Fueron días realmente ocupados leyendo cientos de libros y páginas de Internet que recomiendan nombres. Ninguno les terminaba de gustar, hasta que la madre de Lewis les dio la idea de usar el nombre de alguien que admiracen o alguien especial en la vida de ambos, así estaría lleno de significado como el apodo que usaron durante todo el proceso.