𝐍𝐨𝐜𝐡𝐞𝐬 𝐪𝐮𝐞 𝐜𝐚𝐦𝐛𝐢𝐚𝐧 𝐭𝐨𝐝𝐨.

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10:00A.M.

Desperté por los ruidos que estaba haciendo mi hermano abajo. Me levanté de la cama y me asomé por la puerta para ver qué hacía. Él estaba empacado unos gramos de marihuana, probablemente para venderlas. Mi mamá no estaba ya que ella se iba temprano a trabar y él aprovechaba para hacer su trabajo sucio. Suspire y me metí al baño. Me bañé, me cepillé y me vestí.

Outfit

Baje y solo lo miré

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Baje y solo lo miré. No podía decirle nada, ya que gracias a su "trabajo" es que tenemos esta casa y no nos hace falta nada. busqué en la nevera algo para desayunar, pero nada de lo que había llamaba mi atención. Me acerqué a mi hermano y hablé.

—Angel, nada de lo que hay aquí me llama la atención.-Dije, él aún seguía pesando y separando la droga.

—mm... ¿que quieres comer?, tengo que entregar esto hoy temprano, puedo traerte algo de afuera.- Dijo y termino de separar la droga.

—Mmm... quiero un frappe de guineo.

—¿Es en serio, Emily?- Él se levantó del sofá y río mientras empacaba las cosas que tenía que entregar.

—No estoy bromeando, en serio quiero un frappe.- dije mirándolo seriamente.

—Está bien, está bien. Te lo traeré.

Después de eso, él salió de la casa y yo me puse a ver una película. Luego de un rato una notificación interrumpió mí concentración hacia la película. Desbloquee el teléfono y vi que era dd.

—Hey, linda. ¿Tienes planes para hoy?

—No, ¿por?

—Hay un party a las 10, ¿quieres ir? Obviamente van los demás.

—Oh, está bien... veré si me dan permiso.

—Me dejas saber, si no voy y pido permiso por ti.

—JAJAJAJA, que gracioso.

Después de esa conversación me quedé pensando en si ir o no. Llamé a Samantha y le pregunté si iba a ir y me dijo que sí. Le dije que si podía venir a mi casa para vestirnos juntas y todo eso. Me dijo que sí, que en la tarde vendría. Ahora solo tenía que esperar a que mi hermano llegara.

Pasó una hora y al fin ya había llegado. Abrí la puerta para dejarlo pasar, tomé mi frappe y me senté en el sofá.

—Diablo, toy cansao'.-Dijo. Se quitó el abrigo y los zapatos. Se sentó al lado mío y comenzó a usar su teléfono.

—Voy a salir ahorita si mami me da permiso.

-𝐂͜𝐥͜𝐚͜𝐧͜𝐝͜𝐞͜𝐬͜𝐭͜𝐢͜𝐧͜𝐨͜ - 𝐃͜𝐝͜ 𝐎͜𝐬͜𝐚͜𝐦͜𝐚͜ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora