Daisy estaba molesta realmente molesta, cuando llegó a dónde los chicos se estaban quedando entró y los vió a los dos jugando.
— ¿¡Que les sucede!?
Los chicos la miraron confundidos.
— ¿Tratan de matar a Sidney otra vez?
— Day.. – Habla Stu pero Billy lo interrumpe
— ¿Si fuera así cuál es el problema?
— ¿¡Cuál es mi mejor amiga, quizás ese es el problema!?
— Por favor, eso no piensas cuando me besas o incluso..
— No, quizás no. – Admito – ¿Pero que esperaban que me enterara que Sidney está muerta mientras ustedes me ocultaban su plan? – Subí mi tono de voz – ¿Y después matarme a mí?
— Sabes que jamás te haríamos daño. – Stu admite seguro
— Pues no lo sé, no sé que pensar de ustedes, me ocultaron su plan por algo, quizás también en su plan estaba matarme.
El rubio se levanta y se acerca a mí.
— Cualquiera que sea su plan no lo hagan Billy. – Luego mire a Stu – Tu también, no les voy a permitir que maten a Sidney, ¿Acaso no ven que están libres por ahora? ¿Quieren estar en la carcel por el resto de sus vidas después de matar a Sidney?
Los ojos de los chicos se volvieron oscuros como si estuvieran viendo a su próxima presa y fue cuando Daisy se dió cuenta que ella también iba a ser una víctima.
— No lo haremos Daisy. – Billy hablo seguro
— No podemos hacerlo. – Stu confirmo entonces la castaña se alejo de ellos para salir por la puerta
— No me busquen más y desde ahora somos enemigos, yo salvaré a Randy y Sidney de ustedes como yo me salvaré de ustedes. – La chica salió de la casa para cerrar la puerta y salir corriendo de ahí hacia su casa
Cuando volteo se dió cuenta que los chicos estaban viendola correr así que corrió más rápido hasta que llegó a su casa cuando entró subí las escaleras con rapidez para llegar directo a su cuarto y marco a el número que Dewey le había dado.
— Dewey! Contesta!
— ¿Hola?
— Hola Dewey, iré a la casa de Sidney, tenés que estar ahí conmigo también estará Randy tengo el presentimiento de algo.. – Admito
— Pero, ¿qué pasa? Te escuchas alterada, ¿te encuentras bien?
