𝟏𝟓★

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Narrador omnisciente

Ya habían pasado unos tres días para ser exactos. Quedaba muy poco para que Micaela se fuera con sus padres. Ese día se encontraban en el aula hablando de tonterías, pues el grupo había quedado en disfrutar el poco tiempo que quedaba con Micaela.

-"Entonces que dicen, ¿vienen o no?"- hablo Valeria la cual estaba proponiendo ir al nuevo parque de diversiones. -"¿Y de verdad crees que te dejarán ir?"- respondió Alanis, ya que conocía bastante bien a la morena y salir con ella era bastante complicado. -"Pues si no pudiera, no lo estaría proponiendo ¿no?"- añadió Micaela la cual recibió una sonrisa por parte de la morena.
-"¿Entonces?"- habló con desespero y Matteo no tardó en responder -"Yo digo que está bien"- Valeria asintió con desigualdad hacia él y miró a las demás las cuales solo asintieron con la cabeza.

En la tarde

Micaela se encontraba preparándose para ir al parque de diversiones con sus amigos. Estaba cepillando su cabello cuando empezó a escuchar murmullos provenientes de la habitación de al lado.

-"Entonces, ¿quedamos en un acuerdo?"- era la voz de su padre y al parecer estaba hablando del contrato entre familias. Micaela no quería saber nada más del tema, había ignorado la tristeza en esos días y intentaba disfrutar el tiempo que le quedaba con sus amigas y con Matteo. Aún no podía olvidar aquella escena de hace unos días. Cada vez que lo recordaba le daba un escalofrío en todo su cuerpo y no podía evitar ponerse como un tomate.

Con Alanis

Se aplicaba máscara de pestañas la cual no era ni necesaria pero ella era especial y le encantaba verse más diva de lo normal. -"¿Como te sientes al saber que tú noviesita se va a casar con otro chico?"- pregunto la peli negra mientras el contrario estaba en la cama de está, mirando al techo sin muchos ánimos. -"No lo se...tampoco es como si pudiera hacer mucho. No tengo dinero para pagar un viaje hasta allá"- respondió el mismo mientras se giraba ligeramente a ver a su querida amiga. -"Bueno es un milagro que no hayas pensado en matar al chico"- respondió la contraria con una ligera risita la cual se borró rápidamente al ver la cara de su amigo el cual se veía como si se le hubiese ocurrido algo. -"Por algo eres mi mejor amiga"- dijo con una sonrisa inquieta y Alanis trago seco -"No vayas a hacer nada estúpido"- respondió y el contrario rio -"Me acabas de dar una buena idea, sabes que podr-..."- No llegó a terminar lo que estaba diciendo ya que había recibido un trompazo como respuesta. -"¡Oye! ¡Eso dolió!"- habló el mismo sobándose en donde había sido golpeado -"Ya te dije que no vas a hacer algo estúpido, idiota"- respondió la peli negra con el ceño ligeramente fruncido. -"lo que digas..."- respondió Matteo con desigualdad, pero en su mente el plan iba creciendo poco a poco.

Con Valeria

Estaba terminando de alistar sus cosas cuando escucha unos pasos. Rápidamente se dirige a la puerta a cerrar con llave. -"Valeria, tu madre y yo queremos hablar contigo sobre tu comportamiento"- hablo su padre desde el otro lado y se podía deducir que estaba enojado. Valeria maldijo a lo bajo y tomó su mochila para dirigirse a la ventana. -"Nadie me va a arruinar los malditos planes"- susurro para si misma y salió por la ventana para salir de la mansión. Su asistente la esperaba afuera con el auto encendido. Valeria agradecía por tener unos asistentes tan buenos y comprensivos con ella. Se lanzó rápidamente del segundo piso cayendo en los arbustos, soltó un ligero chillido pero rápidamente se puso de pie y se dirigió al auto para salir de allí rápidamente.


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Como casi siempre Alanis fue la primera en llegar junto con Matteo. Observaban el parque desde afuera y se podían escuchar los gritos de emoción y risas de la gente, un ambiente muy divertido y agradable para pasar con amigos.

-"llegamos como que muy temprano, ¿no?"- hablo Matteo mirando a su amiga como una loca que no podía ser impuntual. -"Solo llegamos 20 minutos antes, relájate"- dijo con normalidad y el contrario la miro como si estuviese loca. A los pocos minutos llegó Valeria la cual se bajó del auto con una sonrisa contagiosa acercándose a estos. -"¡Hola!"- dijo en un tono alegre la morena mientras se quitaba algunas hojas del cabello y Alanis se acercaba a ayudar. -"¿Que demonios te pasó?"- Pregunto Alanis mientras le quitaba una rama del cabello. -"Eso no es importante ahora"- respondió. -"Yo creo que si..."- hablo el pelo negro el cual fue fulminado con la mirada de la morena. Estaba a nada de insultarlo hasta que se escuchó una voz a lo lejos. -"¡Oigan!"- Era Micaela, se acercaba corriendo hacia Valeria y la abrazo por detrás explotando los celos del peli negro el cual estaba en una guerra de contacto visual con la morena. -"Bueno, ¿entramos?"- hablo Alanis rompiendo la guerra entre estos dos -"Claro..."- respondió Valeria de manera seria y fue la primera en entrar rompiendo el abrazo de Micaela.

Pasaban las horas pero cada segundo había una maldita pelea entre los dos susodichos. -"Mierda, ya me duele la cabeza por culpa de esto dos"- hablo Alanis sobándose la cien mientras miraba al suelo -"Tengo una idea"- hablo Micaela. Luego de unos minutos los cuatro estaban haciendo fila para "la casa embrujada". -"¿Es en serio? Esto no da ni la mitad de miedo"- hablo la morena -"Por primera vez estoy de acuerdo contigo"- respondió Matteo con cierta molestia en su voz, las personas iban montándose en los carriles hasta que les tocó a ellos. -"Bien Alanis...donde.."- Valeria la buscó hasta que la vio con Micaela montándose en los carriles de atrás. -"Esto no puede estar pasando..."- dijo incrédula Valeria y miro a Matteo con odio el cual también la miro de la misma manera. Estaba a punto de irse cuando el trabajador los obligó a entrar ya que había bastante fila. Ambos se montaron uno al lado del otro a regañadientes, Alanis y Micaela estaban tres carritos atrás así que no las podían ver. La atracción empezó a moverse y el sitio se volvió oscuro con ciertas luces rojas y muñecos extraños. Se escuchaban los gritos de los animatronicos y personas. El carrito tambaleaba de un lado a otro haciendo que estos dos se chocaran.

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-"No fastidies y échate a un lado"- dijo de mala gana Valeria empujándolo a un lado -"¿Crees que me gusta estar aquí?"- respondió el contrario girando su rostro para ver su cara de fastidio -"No es mi culpa que estemos aquí"- hablo la morena -"Eres muy molesta"- dijo y la atracción se volvió completamente oscura -"Tu no te quedas atrás, maldito piscopata"- respondió la morena y sintió como este la agarraba del cuello bruscamente -"¿Que mierda crees que haces?"- dijo Valeria algo desesperada mientras intentaba soltar su agarre. Las luces rojas se encendieron levemente y un animatronico apareció detrás de la morena haciendo que se sobresaltara y impulsara hacia adelante chocando de frente con Matteo -"Mierda, eres más idiota de lo que pensaba"- hablo el de cabello negro -"Que yo sepa el que me está tratando de estrangular es otro"- respondió sin miedo y Matteo estaba saliendo de sus casillas -"¿¡Por que tienes que ser tan molesta!?, ¿eh?"- gritó Matteo acercándose a su rostro de manera amenazante -"¿Te molesta que hable con la verdad?"- respondió Valeria con una sonrisa sarcástica acercándose más demostrando que no estaba siendo intimidada. Matteo desvió la mirada hacia sus labios y lo consumieron sus pensamientos, cuando recibió una cachetada de parte de la misma -"Maldito loco..."- dijo la morena logrando que ambos se separaran. La atracción duraba 7 minutos y para ellos fue una maldita eternidad. Valeria estaba tan enojada que no se fijó en aquello y en cambio Matteo estaba confundido.


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¿𝐐𝐮𝐞 𝐜𝐫𝐞𝐞𝐧 𝐪𝐮𝐞 𝐯𝐚𝐲𝐚 𝐚 𝐩𝐚𝐬𝐚𝐫?

𝐁𝐢𝐞𝐧...𝐡𝐚𝐬𝐭𝐚 𝐚𝐪𝐮𝐢 𝐥𝐚𝐬 𝐚𝐛𝐚𝐧𝐝𝐨𝐧𝐨...

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⏰ Última actualización: 13 hours ago ⏰

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