Después de la falsa comunidad, el gupo de Rick decidió buscar un lugar para establecerse, buscaron por horas y horas hasta que encontraron una pequeña iglesia únicamente habitada por un sacerdote al que minutos antes, le salvaron la vida.
Cayó la noche y todos estaban muy contentos, pues por fin estaban todos juntos. Encontraron comida y cenaron felices, decidieron olvidarse de todo lo malo y brindaron por mejores cosas. Daryl, por su parte estaba en un rincón, solo, aislado de todos y observando sigilosamente a Carol, quien ahora parecía estar feliz con su hermano. No soportaba verlos juntos, riendo y jugando a la familia feliz, como si nada de lo que le pasase a Daryl fuera importante para ellos. De Merle se lo esperaba, ¿pero de Carol? No lo soportaba más. Se levantó bruscamente y salió casi corriendo de la iglesia. Carol se dio cuenta y corrió detrás de él alarmada.
-Daryl, ¿qué pasa?- el hombre no contestó. - Últimamente has estado muy callado, como enfadado, casi no quieres hablarme, a veces hasta me ignoras por completo. Dime, ¿que pasa?
-No quiero hablar de ello, regresa adentro. - dijo en un tono violento.
-No voy a ningún lado. Estoy preocupada por ti. No voy a irme hasta que esto quede aclarado.- las últimas palabras de la mujer, cayeron como agua fresca para Daryl. Una pequeña esperanza volvía a él.
-No es nada, de verdad- dijo en un tono más amable.- Mir..... ¡Beth! ¡Ese es el carro que se llevó a Beth! - un coche pasó a toda velocidad.
¡Hay que ir!
Tomaron un coche y se fueron detrás de aquél carro.
Cuando el carro que seguían se detuvo, ellos también lo hicieron, a una distancia prudente, claro. Vieron que unos hombres bajaban de el y se disponían a quedarse ahí. Entonces Carol y Daryl decidieron ir a un refugio que Carol conocía y que estaba a sólo unas calles.
Exploraron el lugar y sólo encontraron a algunos caminantes. Daryl no le dejó a Carol matarlos, pues éstos eran una mujer y un niño, y sabía que no le haría nada bien.
Se encerraron en un cuarto solos, dispuestos a pasar la noche ahi, juntos (por precaución, claro). Carol conocía perfectamente el lugar, pues había estado un par de veces allí, cuando se decidía (y después arrepentía) a dejar a su drspreciable esposo.
El silencio reinaba en el lugar. Carol se había metido tanto en sus pensamientos que se había olvidado de que por fin estaba a solas con Daryl.
-¿Ahora si podemos hablar?
-Hablar? Sobre que? -Daryl sabía perfectamente de que hablaba la mujer.
-¿Por qué te portas así conmigo? ¿Que te hice? ¿A caso ya no me quieres? - bromeó la mujer, sin pensar que esto sólo empeoraría las cosas.
-¿Que no te quiero? No sabes nada. Todo esto ha sido por ti, y dices que no te quiero?! Ni siquiera sabes lo que estas diciendo. - era verdad, pero no podía culparla, pues ella no sabía de su sacrificio.
-Bueno, entonces por que no me lo dices! ¿Que es lo que te duele tanto? - Daryl no podía contarle nada, tenía que calmarse.
-Lo siento, nos han pasado tantas cosas que prefiero no hablar de eso, tan sólo olvidalo.
-¿Olvidarlo? ¿Esa es tu repuesta?
-Por favor, ha sido un día largo, hay que calmarnos y hablaremos después de esto.
-Pfff!! Como quieras.-dijo Carol indiferente. Suspiró y se acostó en la cama. Daryl hizo lo mismo, acomodó su almohada y se acostó al lado de ella.
Se quedaron en silencio mirando al techo. Carol se acercó un poco más. Daryl empezaba a ponerse nervioso cuando de pronto algo pasó. Carol le dió un beso en la mejilla y le susurró al oído: "me gustas", y al ver la reacción de Daryl, sonrió y se acercó un poco más para besarle los labios, cuando el hombre la detuvo y dijo:
-Para. ¡¿Qué estas haciendo?!
-Ya te lo dije. Me gustas y no pienso esperar a que tú te decidas...
-¿Y Merle? El te quiere y ahora tu estas con él ¿no?
-Si estoy con él es por Mika y por la amistad que hemos hecho. Entre nosotros no pasa nada más.
-Eso no es lo que parece, tu y e..
-Bueno, si no me quieres creer allá tu.No tengo que darte explicaciones -respondio enojada y volvió a acostarse.-No soy una puta.
Si bien Daryl dudaba de Carol, no iba dejar pasar esta oportunidad, el sabía bien que sentía, y además, Merle le debía muchas.
-También me gustas. - dió un suspiro y trató de alejar de él todas esas dudas y por una noche, ser feliz.Se acercó a la mujer y la besó. Los labios de Carol eran delgados y finos, los de Daryl encajaban perfectamente en ellos. En un momento Carol pensó en detener al hombre y preguntar qué mierda era eso, pero la intensidad de los besos fue aumentando y Carol deshecho la idea. Los fuertes brazos de Daryl abrazaban la cintura de Carol y bajaban lentamente sobre sus caderas. El hombre se dió cuenta de lo que estaba haciendo y se detuvo un momento, pero los malos recuerdos de su hermano hicieron que siguiera cada vez más.
Ambos se miraron fijamente a los ojos y sonrieron, la mujer lo besó y le sacó el sucio chaleco que traía. El hombre se quitó la camisa y dejó al descubierto sus cicatrices y tatuajes. La mujer lo acarició y empezó a desabrocharle el pantalón, al mismo tiempo que el hombre se deshacía de la blusa y el sostén de Carol. Daryl se abalanzó sobre ella y con todo el peso de su cuerpo la hizo rodar por la cama. Ella no puso resistencia, lo abrazó y besó mientras lo ayudaba a desnudarla. Estaban desnudos y nada importaba. En esos momentos ambos se habían olvidado de todos sus problemas, lo único que importaba era ellos. Daryl se dió cuenta de que Carol era una mujer delicada, y que de ninguna manera debería tratarla como a todas las prostitutas con que él y su hermano se habían metido. Esto era diferente, algo que nunca antes había hecho ni sentido: Amor.Sintió el cuerpo de la mujer enredándose en el de él, trenzandole las piernas, sus labios apretándose contra los de él, y su lengua pugnadose con la suya. Sus manos de hundían en su espalda, en su cuello. Sus caras reflejaban un intenso sentimiento de placer. Los gemidos de Carol aumentaban cada vez más. Terminaéln agotados, lo único que la mujer pudo decir fue un profundo y sicero "Te amo". El hombre no contestó, pero aún así, Carol estaba realmente feliz.
La mañana había llegado ya hace un buen rato, el sol estaba radiante y Carol despertaba plácidamente. Buscó a su lado al hombre que la noche anterior le hizo gozar, pero no estaba. La mujer se levantó rápidamente, se vistió y fue a buscarlo. Lo encontró en el patio, quemando los cuerpos de los caminantes que no la dejó matar. Corol se conmovió ante tal escena y una lágrima le rodó por la mejilla.
-Gracias.- le dijo Carol al hombre.
-No es nada. ¿Estas lista? Debemos irnos. - Daryl sonaba algo cortante.
-Sí, pero... ¿Quieres hablar de lo de anoche?
-No hay nada que decir. Pasó. Será mejor que lo olvidemos.
¿Es posible? Después de tal noche Daryl se comportaba como un idiota. Carol no se lo esperaba ese no era el Daryl del que se enamoró. No dijo nada, solamente asintió y se fueron sin decir una palabra más.
No hablaron durante toda la mañana, Daryl se comportaba indiferente y Carol no hacía ni el intento de saber por qué.---------------
¿Qué les ha parecido el capítulo? Se que es muy corto, pero fue algo complicado. Espero no les moleste una escena tan fuerte. Dejadme sus opiniones en los comentarios. Gracias por leer! c:
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Bite Hard/Muerde duro
General FictionAndamos juntos, Morimos juntos. ¿Somos sólo amigos? Historias sobre Daryl Dixon y Carol Peletier (The Walking Dead) contadas por ellos mismos.